The Legend of Celestia: Twilight Princess
Chapter 17
Previous Chapter Next ChapterRare-Rare, la "última" batalla
—¡Amiga Rare-Rare! Justo a ti te estaba buscando — dijo Sparkler entrando al recinto de la titánide de la Generosidad.
—¡Ah, amiga, me encanta verte! Pero en serio es un mal momento, sabes que estoy esperando a mi Portadora para enfrentarnos y recargar su Elemento, ¿no puede esperar?
—De hecho no, de lo contrario se me va a olvidar — dijo Sparkler sacando una especie de monedero y tomando varias estrellas. — Toma, el dinero que me prestaste, muchas gracias por el favor y ya no te entretengo más. Suerte amiga, con los guerreros de Hyrule las pruebas están les están resultando más fáciles de lo que pensábamos.
Rare-Rare contó el dinero y sonrió tranquilamente.
—Sabes que no era necesario que me pagaras, siempre es un honor hacerle un honor a mis mejores amigos de todo el mundo — dijo la titátnide, que parecía ser hecho de diamante, pero en realidad el único diamante estaba en su corazón; ella estaba hecha de hielo.
—Sí pero no me sentiría bien aprovechándome de tu generosidad, después de todo cuentas cabales hacen buenas amistades — sonrió Sparkler. — En fin, mucha suerte.
En ese preciso momento, la puerta se abrió violentamente cuando dos enormes wolfos blancos fueron lanzados por la puerta. Link y Midna entraron liderando al grupo.
—Ya decía yo… — dijo Rare-Rare. — Sparkler, ¿te importaría retirarte? Estoy por poner a prueba a mi elegida y quiero que la batalla sea de uno a uno, lo mismo para ustedes guerreros de Hyrule, este problema es contigo Rarity Belle.
Rarity se acomodó bien la capa y se adelantó al centro de la habitación, donde la poni de hielo la recibió. Era muy hermosa, como la escultura más bella jamás tallada; con el hermoso corazón de diamante latiendo en su interior. Tan alta como las mismísimas Princesas, Rare-Rare miró hacia abajo a Rarity, que se miraba muy nerviosa, y luego sonrió amablemente.
—Bueno, felicidades, lograron pasar a través de la torre de hielo, y sé que es especialmente peligrosa y molesta, ¿así que no se les ofrece algo? Tengo té, café, chocolate, cola caliente (a algunos raros les gusta eso) y hasta brandi; mi recomendación personal para el frío.
—Te acepto el brandi — dijo Midna con tranquilidad.
—Yo… yo me quedo con el té — dijo Link. — cae muy bien algo caliente en estas condiciones. En serio me estoy helando.
—¡Pues dúh! La torre de hielo bobito — se rio Pinkie Pie. — Chocolate, quiero chocolate.
—Té está bien por mí — dijo Applejack.
—Sí, también un poco de té para mí… si no les molesta — dijo Fluttershy.
—Té, en definitiva té — dijo Twilight.
—Yo acepto un cafecito — dijo Rainbow contenta.
—Té, como Link — pidió Epona.
—Brandi, me caería bien — opinó Sweet Fog.
—Tecito si no es molestia — pidió Rarity.
Rare-Rare tomaba nota como buena anfitriona y tras ofrecerles unos mullidos asientos a sus invitados, trajo lo que pidieron acompañado de galletitas y se sentó a charlar tranquilamente; una pequeña muestra de generosidad antes de la batalla en sí. Entonces se fijó que alguien no tomaba nada.
—¿Segura que tú estás bien así, este…?
—Fi, y sí, me encuentro perfectamente. Soy un espíritu, no necesito comer ni me afectan las temperaturas altas o bajas. Pero agradezco el gesto — dijo Fi inclinándose.
Rare-Rare no insistió más, ya que ella misma era un espíritu y comprendía. De hecho, todos los Titanes eran más o menos como Sparkler; chispas de luz pero tomaron formas físicas para ayudarse durante la prueba a sus Portadoras.
—¿Entonces, todos recuperados verdad?
—Sí querida, estoy lista para mi prueba final, o por lo menos eso creo — dijo Rarity levantándose y colocándose la capa que tomó del Wizzrobe.
Rare-Rare entonces hizo aparecer una enorme plataforma rodeada de pequeñas antorchas que emitían un misterioso fuego color azul que misteriosamente estaba frío.
—Sólo hay algo que no comprendo, — dijo Rarity cuando por fin llegó al centro de la plataforma con la capa lista — se supone que ustedes quieren proteger Equestria. Ahora que los Elementos de la Armonía se han perdido, ¿no se supone que trabajen para recuperarlos en lugar de ponernos estas difíciles pruebas? ¡Responde!
—Eso hacemos, los Elementos viven en ustedes; estas pruebas sirven para que ustedes mismas los despierten a través de la Magia de la Amistad. Nadie esperaba que esta Magia abarcara más que Equestria misma. No nos quejamos pero en serio, la próxima vez tráiganse a alguien menos violento; los monstruos no importan tanto, son manifestaciones de nuestro propio poder… pero en serio no tenían que eliminar al Rey Sombra.
—Ya veo que la estupidez de los Creadores es la que afecta a la tal Celestia — dijo Midna claramente fastidiada. — Hasta la diosa Hylia supo que para eliminar al maldito de Demise había que matarlo y por eso creó un plan a largo plazo y… ay olvídenlo, termina con esto Rarity Belle que no estoy de humor de andar discutiendo filosofías idiotas con nadie.
Rare-Rare hizo una mueca pero luego volvió a concentrarse en Rarity.
—Bien, dejando eso de lado ¿comprendes lo que quisimos lograr? El valor que han demostrado las ha fortalecido y con ustedes, sus Elementos. Pero bueno, es hora de tu prueba final. Espero que estés lista.
Rarity sonrió y entonces Rare-Rare extendió su casco hacia una de las llamas azules, tomándola y arrojándola contra Rarity; que gritó y se movió como pudo. Una fina capa de hielo se formó donde el ataque impactó y Rarity contraatacó con sus propias llamas. Rare-Rare hizo un gesto y las antorchas más cercanas la envolvieron con sus llamas como un manto protector; que hizo que resistiera el ataque de Rarity y atacó ella misma.
Rarity saltó pero la puntita de su cola se prendió en llamas con una chispa que saltó del impacto y quedó congelada.
—¡Ay no, mi preciosa cola! — Gritó de indignación Rarity al tiempo que la cola congelada se partía en pedazos.
Rare-Rare hizo un gesto y la cola de Rarity volvió a crecer.
—Oye, muchas gracias.
—No se me olvida lo que hiciste por la serpiente marina, ¿quién crees que hizo que te creciera tan rápido la primera vez, eh? Pero bueno, sigamos luchando.
Entonces arrojó una llamarada congelnate; que Rarity apenas si logró bloquear imitando la técnica de Rare-Rare.
Rare-Rare sonrió ante la niña que aprendía rápido y contraatacó repetidas veces con pequeños impactos de llamas frías; que Rarity trataba de esquivar a como diera lugar. El problema principal era que no era muy atlética y se estaba agotando; sin mencionar que tampoco era muy buena usando magia así que a diferencia de Twilight, no podía ir y teletransportarse de un lado a otro así como así. No, tenía que pensar en algo.
"Vamos Rarity, no puede terminar así. Todas tus amigas han pasado su prueba y el Titán siempre tiene una forma de ser vencido, y por lo que dijo Rare-Rare, ella quiere que ganemos. ¿Qué es lo que tengo que hacer? Piensa Rarity, piensa un poco por lo que más quieras"
Tenía que ponerse a pensar, la tal titánide la conocía; no podía pedirle mucho más de lo que podía hacer, así pues era un acertijo. ¿Cuál era el fuerte de Rarity? Físicamente no era muy habilidosa, tampoco mágicamente; su fuerte era ser modista, ¿pero eso de qué le servía? De momento seguía eludiendo los ataques de Rare-Rare y no podía aguantar mucho más; a este paso sería congelada sin remedio. "Modista, yo soy modista; ¿y qué necesito para ser modista? Por favor que alguien me ayude…"
—¡Vamos Rarity, no te rindas! ¡Tú puedes! ¡Demuéstrale qué tan fastidiosa puedes llegar a ser! — Le gritó Applejack.
Rare-Rare miró a la yegua naranja.
—Ay vamos, gritarle para darle ánimos no debería estar prohibido — se quejó Applejack.
—Sí, es cierto — dijo Rare-Rare regresando a la batalla. — Pero nada más eso.
Rarity por su parte aprovechó ese momento que le dio Applejack y de paso su comentario. ¿Fastidiosa, ella? Bueno, según Applejack era porque siempre se fijaba demasiado en los detalles pequeños todo el tiempo. ¿Detalles? "Sí, fijarme en los detalles es fundamental para ser modista, ahí está la respuesta; gracias Applejack"
Se concentró en los ataques de Rare-Rare, y entonces obtuvo lo que necesitaba. Las antorchas de los alrededores eran las que rodeaban con sus llamas frías a Rare-Rare y ella sólo las redirigía contra Rarity. No producía sus propios ataques, sólo utilizaba el fuego frío de las antorchas.
Rarity sonrió y lanzó un ataque doble; que una vez más Rare-Rare bloqueó rodeándose de llamas azules, y de inmediato notó que algo nadaba mal. Éstas se hicieron más débiles, ¿qué pasaba? Se volvió y descubrió que dos de sus preciadas antorchas habían sido destruidas.
—Así que lo descubriste Rarity, qué bien. A partir de aquí se pone peor. Extendiendo sus dos cascos frontales dos grandes llamas los cubrieron y formaron enormes bloques de hielo que lanzó contra Rarity; quien con un casco lanzó una llamarada que fundó el ataque de su oponente y con el otro destrozó otra de las antorchas.
—Buen tiro — felicitó Rare-Rare.
—Gracias querida, la puntería es un don que sólo desarrollas en su máxima expresión cuando sabes fijarte en los detalles, ¿eh Applejack?
La vaquera sonrió recordando aquella pijamada. Bueno, tenía que admitir que Rarity era hábil cuando quería. Pero aquel no era el momento de dejar que esa pequeña victoria la frenara; ahora mismo tenía que seguir alentando la lucha de Rarity, que se puso más complicada.
Rare-Rare extendió sus cascos creando muchos más bloques y trató de aplastar a Rarity, que corría en círculos y un par de veces se teletransportó frente a las antorchas de Rare-Rare para hacerlas trizas. Había despejado un cuarto del círculo de antorchas en un cuarto creando así una pequeña zona segura para que ella pudiera moverse; aunque no iba a quedarse a descansar así como así. Tenía que actuar y actuar rápido. Sonriendo, siguió corriendo en círculos para no ser alcanzada por aquellos ataques aplastantes pero tropezó en cierto momento.
—Lástima, ibas muy bien — dijo Rare-Rare.
Entonces arrojó el ataque aplastante. Rarity sonrió y rodó fuera del alcance de ese lanzamiento; que siguió su trayectoria destrozando las antorchas de la propia Rare-Rare.
—¡Ey, buena esa! — Dijo Rare-Rare.
—Insisto que es aprender a poner atención a los detalles — dijo Rarity antes de destrozar otra de las antorchas.
Ahora Rare-Rare sólo contaba con la mitad de sus defensas, pero sorpresivamente estaba orgullosa.
—Si seguimos así pronto recuperarán sus poderes de Armonía, más te vale ganar con el último ataque Rarity Belle.
Entonces con las llamas congelantes, Rare-Rare formó una enorme espada de hielo; que al igual que ella misma, se rodeaba con el poder de las llamas y lanzaba filosos cristales que destrozban todo a su paso. El suelo era resbaloso y costaba correr, así pues Rarity supo que esa no era opción. Cargando al máximo su poder de llamas arrojó un certero chorro de fuego contra Rare-Rare. Ella blandió su espada para protegerse pero el fuego fue más poderoso de lo que había calculado y la espada se derritió; y para colmo de males las llamas todavía tenían fuerza suficiente como para darle de lleno.
La poni de hielo gritó de dolor mientras su cuerpo se derretía en parte, dejándola del tamaño de un poni normal, aunque eso sí: recuperó su espada con las llamas congelantes, sólo para darse cuenta que ahora faltaban otras dos de sus antorchas y Rarity ya iba por la tercera.
La golpeó con su espada, y Rarity correspondió con una suave llama, derritiendo la espada por su filo así pues el golpazo sólo la lanzó al otro lado; estaba entumida y tenía frío pero seguía en condiciones.
—Buena esa — volvió a felicitar Rare-Rare.
—No tanto como esta — dijo Rarity extendiendo sus llamas por el suelo obligando a Rare-Rare a correr hacia la zona segura, entiéndase donde ya no había antorchas ni llamas calientes que la perseguían.
—Oh, demonios — dijo Rare-Rare.
Efectivamente, Rarity acabó con las últimas de las antorchas de la titánide de un movimiento certero. Rare-Rare no tenía más armas ni defensas, estaba a merced de Rarity.
—Bien, gané — dijo Rarity cargando el fuego.
—Sí, ganaste — dijo Rare-Rare al momento que las llamas ardientes deshacían su cuerpo hasta llegar al diamante del centro.
Era el fin, el último de los Titanes de la Armonía había sido derrotado y la prueba finalizada.
—¡Lo logramos, recuperamos el poder de los Elementos de la Armonía! — Gritó Twilight.
—¡Sí, sí lo hicimos lo hicimos! — Gritó Pinkie Pie saltando de un lado a otro. — Es el momento de la celebración, vamos a divertirnos ahora que terminamos con esto.
—Sí pero antes salgamos de esta torre — pidió Epona. — El helarme hasta los huesos no es mi idea de celebración.
—Pero podemos patinar en hielo por aquí — sugirió Pinkie Pie.
—No, pero Epona tiene razón — dijo Applejack. — En lugar de congelarnos aquí vayamos a divertirnos en Ponyville; ansío verlo lejos del horrible Twilight.
—Ajá, cuando no de acuerdo con Epona — picó Rarity, era raro en ella fastidiar de esa manera pero estaba de muy buen humor.
—Sí, eso y mis mascotas estarán esperando a que les cuente esta gran aventura — dijo Fluttershy.
—Sin contar con las Crusaders, no nos las vamos a poder quitar de encima en todo el día — suspiró Rainbow Dash.
—Por cómo están las cosas seguro que Epona se encargará — sonrió Twilight. — Ahora sólo quiero regresar a casa y ver mi amado pueblo a salvo.
Los comentarios de victoria y demás siguieron llegando y todo, cuando el diamante que había sido Rare-Rare se levantaba y con un aura hecha del fuego helado formaba una vez más a la titánide.
Rarity saltó hacia atrás preparándose pero Rare-Rare negó con la cabeza llameante.
—No se preocupen, el combate terminó; y yo estaba perdida desde el momento en que me dejaste sin antorchas. Ya ganaste, en serio que sí, pero tenía que materializarme para explicar algo: todavía no han restaurado el poder del Árbol de la Armonía. A ver Rarity, ¿qué fue lo que te dije sobre le poder de la Armonía?
—¿Que está en nosotras? — Se aventuró a decir Rarity.
—Efectivamente — dijo Rare-Rare. — Ustedes han restaurado su propio poder, y si quieren que el Árbol regrese y detenga al Twilight tienen que recargarlo desde adentro.
Twilight tragó saliva.
—¿Se refieren a que tendremos que… entrar al…?
—Al Twilight — completó Midna. — Bien, teniendo en cuenta cuánto se ha expandido es prácticamente entrar a un territorio conocido suyo, ¿no? El bosque Everfree..
La titánide Sparkler entró en escena, mostrándose en calma.
—Sin embargo, al entrar en contacto con el Twilight, las criaturas del bosque Everfree se han transformado en una especie de criaturas de tinieblas, como aquellas que sólo llegas a encontrar en Hyrule o peor, en el Twilight propiamente dicho. Está plagado de monstruos realmente peligrosos ahora. Entre lo peor de Equestria…
—¿Y lo peor del Twilight? — Preguntó Fluttershy con temor.
—No, lo triste que es lo mejor del Twilight — dijo Sparkler.
—¿Entonces qué hacemos? — Preguntó Epona.
Sparkler sonrió.
—Ir, por supuesto. En circunstancias normales estaría preocupada pero han demostrado mucha más habilidad de la que esperábamos; y todo gracias a la Magia de la Amistad que ha podido llegar al más solitario de los héroes; y la más retorcida y maligna de los Twily.
—Oye — dijo Midna.
—Lo siento, — se disculpó Sparkler. — Sólo hago la observación que pueden ganar. Estoy segura, pero tienen antes que pasar esta prueba final.
Al final el grupo salió de la caverna de hielo, mágicamente guiados por Sparkler y llegaron a la granja de rocas de los Pie. Se despidieron y tomaron el tren más cercano a Ponyville; y las seis amigas estaban especialmente enfurruñadas.
—No lo entiendo, simplemente no lo entiendo — dijo Applejack. — No sólo nos matamos pasando estos estúpidos templos sino que encima hay uno más antes de la victoria definitiva, ¿quién se lo esperaba?
Los guerreros de Hyrule levantaron la mano armándose de paciencia.
—Bienvenidas al negocio del héroe errante — dijo Link.
—Sí, la vida está llena de tropezones de estos pero aprendes de ellos. Nosotros estábamos listos para que sucediera esto — dijo Midna. — Tranquilícense.
El tren pronto llegó a Ponyville; sólo para darse cuenta que el Twilight se había movido hasta el mismísimo centro. Las cosas no pintaban bien.
—¡Twilight Sparkle! ¿Qué ha sucedido? — Preguntó la Princesa Celestia que los esperaba. — Creía que la expansión de este Reino llamado Twilight se pararía.
—Se parará Princesa Celestia, pero tendremos que hacerlo desde adentro — dijo Twilight observando al Twilight. — Esto lo terminaremos hoy mismo, no se preocupe.
Las seis ponis avanzaron hacia la pared naranja y negra del Twilight y miraron a los héroes.
—Antes de entrar, — advirtió Sweet Fog, — les diré que sus cuerpos cambiarán una vez dentro, pero creo que no será la gran cosa. Perderán atributos de vuelo y magia pero teniendo en cuenta que este cuento de los Elementos están ligados a sus almas, tienen lo básico. ¿Entonces, vamos al árbol ese?
Twilight tragó saliva, esto sonaba peor ahora; pero de todos modos avanzó tras los guerreros de Hyrule.
—Maestros, siento una presencia muy poderosa al otro lado del Twilight. El Árbol de la Armonía nos espera, nos guiará para que recobremos su poder.
—Bien vamos — dijo Midna extendiendo su mano con el cristal oscuro. — Y por el bien de todos, más nos vale terminar esta aventura rápido.
Entonces todos se teletransportaron al Twilight.
—Mucha suerte en el Twilight, Twilight Sparkle, todas — dijo Celestia. — Estoy muy orgullosa de todas ustedes.
…
Del otro lado del Twilight, todas observaron sus nuevos cuerpos sorprendidas. También lo estaban los guerreros de Hyrule, era la primera vez que veían a caballos percherones de varios colores; pero de todos modos no dijeron nada.
—Bien, andando — dijo Link. — Epona, amiga, no creo que en tu forma actual puedas usar el spinner así que guárdalo.
—De acuerdo — respondió la yegua. — Ni modo, me había encantado usar esa cosa.
Entonces comenzaron a avanzar, con Link y Midna a la cabeza.
—Esto se siente raro.
—Sí, más nos vale galopar para así recuperar mis alas — dijo Rainbow. — ¿Porque aún podemos correr, no es así?
—Sí que sí — dijo Applejack. — ¿Qué dices tú, Epona?
—¿Qué digo? — Dijo la yegua. — Link, cuando esto termine yo me quedaré a vivir en Equestria, ¿lo sabes verdad viejo amigo?
—Claro que lo sé — dijo Link. — Y te deseo la mejor de las vidas en donde mereces estar Epona, en donde los de tu especie son libres.
Epona acarició el rostro de su dueño con el suyo, ahora que era otra vez bastante alta no tenía ningún problema para ello. Luego le sonrió.
—Pero antes, ¿te parece un último paseo? Por los viejos tiempo amigo.
—De acuerdo, por los viejos tiempos — dijo Link saltando de un ágil salto al lomo de Epona.
—¡Oye! ¿Por qué estás montando a Epona como si fuera tu esclava? — Preguntó Applejack indignada.
En lugar de prestarle atención a su nueva novia, Epona miró hacia el frente; mientras que con un leve empujón, Sweet Fog llamaba la atención de Midna. La Twily sonrió a su caballo y también montó.
—¿Entonces, nos movemos?
Y ambos percherones corrieron con todo llevando a sus dueños a la última gran aventura, seguidos de la heroínas de Equestria, dispuestas a terminar con todo aquello por fin.
De acuerdo, el desenlace. Sólo uno o dos capítulos más y oficialmente habré terminado Twilight Princess. Espero les haya gustado el cap y los que siguen crisis infinita prepárense para el triunfal regreso de Link, Fi y Midna a Equestria.
Chao; nos leemos!