Lazos de sangre.

Capítulo 25. La ciénaga de los lamentos.

Finalmente, luego de una larga caminata, Shining junto a su hija Ara, salen de las profundidades de las montañas nubladas, encontrándose con una inmensa ciénaga pantanosa. Los dos ponis se encontraban en lo alto de un barranco contemplando el inmenso pantano que los esperaba, un pantano que abarcaba una inmensa área hasta donde se alcanzaba la vista.

-pero que horrible huele….- dice la potrilla mientras esta se cubría la nariz con los cascos.

-hija hagas lo que hagas, no te acerques al agua- dice Shining.

-huele a podrido….. No pienso acercarme…. Pero…. ¿Cómo cruzaremos? ¿Vamos a rodear?- dice Ara.

-me temo que no…. Eso nos tomaría mucho tiempo… y sería muy peligroso- dice Shining con seriedad.

-¿más peligrosa que esta peste?- dice Ara.

-me temo que si- dice Shining mientras pensaba en los grifos cazadores.

-pe… pero…. Si me dijiste que no me acercara al agua…. ¿Cómo lo cruzaremos? Creo que solo nadando podremos cruzar- dice Ara confundida.

-no necesariamente…. A lo largo de esta ciénaga hay algunos caminos ocultos…. Por los que podremos pasar sin problema- dice Shining.

-no creo poder resistir este aroma- dice Ara.

-no te preocupes, todavía no lo cruzaremos- dice Shining mientras toma a la potrilla y la coloca en su lomo- sujétate- dice dando un largo brinco y transformándose en lobo y bajando la montaña con una serie de brincos sobre las rocas. Shining aterriza cerca del inmenso pantano, este se le queda mirando por unos instantes y luego corre por la orilla.

-¿A dónde vamos? ¿No dijiste que lo atravesaríamos?- dice Ara un tanto confundida mientras el lobo blanco que era su padre corría por el borde del pantano, luego de algunos minutos llegan a la entrada de un bosque.

-¿este es el bosque de los sueños? Creí que era azul- dice la potrilla confundida, el lobo blanco retoma su forma poni y mira a su hija.

-no, este es el bosque Everfree- dice Shining.

-¡que! pe… pero…. Hace barias semanas que salimos del bosque…. Como es que…. regresamos….- dice Ara atónita.

-lo que paso es que cortamos camino por la montaña…. Creo que si hubiéramos seguido por el bosque…. Quizás nos habría tomado el triple de tiempo- dice Shining.

-entonces….. Aún falta mucho….- dice Ara algo deprimido. Shining estuvo a punto de responderle que ya habían recorrido poco más de medio camino, pero prefirió mejor no decirle para no preocuparla, pues aún había un largo camino por recorrer.

-no te preocupes mi cielo…. Cuando te canses te cargare en mi espalda- dice Shining con una sonrisa- igual que yo cargue casi todo el camino a Trixie- piensa este mientras recordaba todas las veces que este cargo en su espalda a la unicornio azul.

Shining y su hija se adentran al bosque, una vez que encuentra un lugar fresco cerca de un riachuelo y una pequeña cueva en donde puedan descansar, este deja a su hija y se va en busca de alimento, Shining atrapa a algunas ardillas, y las lleva con su hija, y este se queda sorprendido al encontrar a su hija comiendo algunos peces que atrapo en el riachuelo.

-esta niña es mejor que yo buscando alimento- piensa Shining sintiéndose un tanto avergonzado por el gran trabajo que a este le costaba.

Luego de eso, este prende una pequeña fogata y al llegar el anochecer los dos se sientan junto a esta para poder calentarse, últimamente a echo más frio, pues ya está muy cerca la época invernal, al punto de que pareciera que en cualquier momento estará a punto de caer una nevada.

-papi…. ¿No tienes frio?- dice Ara mientras esta era cobijada por su padre con las mantas y el morral que tenían.

-no mucho hija- dice Shining mientras la acomodaba.

-¿estás seguro? Es que…. yo aún cobija dita tengo mucho frio…- dice la potrilla titilando del frio.

-no te preocupes por mi cariño…. Tu duerme…. Que mañana nos iremos por el camino de la ciénaga- dice Shining mientras le daba un beso en la frente.

-si papi….- dice la pequeña Ara mientras se acurrucaba en el morral.

-descansa cariño- dice Shining mientras se trasformaba en lobo para que así su pelaje le ayudara a mantener el calor más fácilmente, este una vez transformado se recuesta y acurrucándose junto a su hija y rodeándola con sus patas, abrasándola.

-buenas noches papi- dice la potrilla acomodándose en el pecho de su padre, y cerrar los ojos para ya dormirse.

A la mañana siguiente, Shining y Ara toman una serie de hojas de menta, las cuales introducen en un trozo de tela y las colocan sobre sus narices, así el fétido aroma de la ciénaga no les sería tan insoportable.

Los dos ponis se ponen frente al inmenso pantano, quedándose por unos instantes parados frente a este, observando el largo camino que nos esperaba.

-¿Cómo lo cruzaremos?- dice la potrilla con miedo.

-hay un camino…. Que debemos seguir- dice Shining con un tono de voz un tanto temeroso, no por la peste que les esperaba, si no por algo más que no le ha mencionado. Y ahora este está reconsiderando si cruzar o no el pantano, no por él, sino por la seguridad de su hija. Sin embargo si rodean el pantano les espera de un mes a dos solo rodeándolo, sin mencionar que sin importar el camino que tomen, cada uno tiene sus respectivos peligros.

-papi…. ¿pasa algo?- dice la potrilla.

-no….- dice Shining suspirando- cariño…. Cruzaremos el pantano…. Pero…..-

-¿pero qué papi?- dice la potrilla. Shining mira en todas direcciones, analizando cada camino, tres caminos eran lo que podían tomar, si rodeaban el pantano ya sea cuál de los dos caminos que tomen pasarían muy cerca de los reinos de los grifos o Equestria, siendo quizás el más peligroso el de los grifos, pero eso no quita que también este arriesgando a su hija si toma el otro camino, de igual forma cualquiera de esos dos caminos le tomaría mucho tiempo, pues en si es rodear el pantano, en cambio si pasan directo por el pantano podrían cruzarlo en una semana quizás, sea cual sea el camino que tome, ninguno es seguro.

-pase lo que pase…. No te alejes de mí… y no te acerques al agua- dice Shining con severidad mientras tomaba a su hija y la colocaba en su lomo.

-si papi….- dice la potrilla un tanto temerosa mientras sostenía la mascarilla de hojas de menta contra su nariz.

-sujétate, no te sueltes- dice Shining y transformándose en lobo y echándose a correr por el borde del pantano, hasta encontrar un pequeño camino de tierra dentro de las aguas del pantano, para eso este tiene que saltar por lo que da un largo salto de un alrededor de 5 metros, logrando llegar a la orilla de al pequeño camino que se encontraba entre el pantano, una de sus patas traseras logra tocar el agua y provocando un fuerte salpicón y barias ondas en esta, y sus dos patas delanteras se hunden en el fango, Shining inmediatamente saca sus patas del lodo y mira exaltado el agua, como si esperara que algo surgiera pero nada pasa, este da un suspiro de alivio.

-¿pasa algo?- dice Ara.

Shining retoma su forma de poni y dice- no-

-tendremos que cruzar todo esto ¿verdad?- vuelve a repetir Ara tragando saliva un tanto inquieta.

-si hija….- dice Shining mientras miraba el suelo.

-¿Qué haces papi?- dice Ara un tanto curiosa.

-estoy buscando un camino… hay muchos caminos conectados a lo largo del pantano…. Pero también es muy peligroso si no pisamos con cuidado….- dice Shining.

-oh… está bien….- dice Ara un tanto tímida.

-pero me temo que no podre transformarme en lobo…. Dado a mi peso extra en esta transformación, termine hundiéndome en el fango, esta tierra es muy blanda…. Me tomara más tiempo atravesar este pantano en mi forma poni…. Pero es más peligroso para nosotros- piensa Shining.

Shining empieza a caminar por el camino del inmenso pantano, encaminándose al otro lado del camino. Yendo a pazo moderado, mas no corriendo del todo, pues antes tenía que asegurarse de que la tierra que estaba por pisar era segura y que no haiga algún peligro. Alguno de los caminos de tierra era muy estrecho, o tenían la tierra muy blanda, en más de una ocasión Shining estuvo a punto de quedar atrapado en el fango, pero este se las arreglaba para poder salir y continuar.

Pasan las horas, Shining sigue caminando por el sendero, y pese a todo lo que recorrieron, no parecía que hallan recorrido siquiera una pequeña parte del pantano, un camino aún más largo los esperaba.

Luego de que todo el día se la pasaran caminando Shining se detiene al notar que faltaba poco para el oscurecer.

-¿papi… porque nos detenemos?- dice Ara.

-se está haciendo de noche- dice Shining con seriedad- es momento de que busquemos un lugar para descansar-

-creo que aún faltan un par de horas- dice Ara.

-lo sé pero…- dice Shining con seriedad- creo que ya caminamos mucho…. Es hora de que busquemos un sitio para descansar-

-pero…. Aun no tengo sueño…- dice Ara.

-lo se mi cielo pero…. Yo estoy algo cansado jeje- dice Shining con una falsa sonrisa.

-está bien- dice Ara- ¿descansaremos aquí?- dice refiriéndose al sitio donde estaban parados.

-no cariño…. Buscaremos un sitio…. Más amplio- dice Shining.

-está bien….- dice Ara.

Shining merodea junto con su hija los alrededores, y pese a que su hija le señalo sitios cómodos, con arbustos que podrían usar como refugio, Shining se negó a estos, diciendo que no eran adecuados o seguros, cosa que confundió a la potrilla, pues ella no le veía nada de malo a los sitios que ella señalaba. Finalmente Shining encuentra una isla muy amplia, con solo algunos arbustos secos, sin siquiera hojas secas que puedan usar como cama.

-¡bien, aquí dormiremos hija!- dice Shining.

-aquí….- dice la potrilla un tanto indiferente mientras miraba a su alrededor.

-sip….- dice Shining con una sonrisa- es perfecto ¿no crees cariño?-

-bueno…. Quizás sea la isla más amplia de este pantano…. Pero…. No se ve muy cómodo….- dice Ara.

-bueno….. Tratándose de un pantano… creo que es mejor buscar un sitio amplio y estable a uno cómodo ¿no crees cariño?- dice Shining.

-bueno…. Supongo que tienes razón- dice la potrilla un tanto pensativa.

Shining prepara las cosas, acomoda un sitio con tierra suelta para que ellos puedan recostar, aún faltaba para el atardecer pero Shining aun así prepara una fogata y para antes del atardecer ya se encontraban cenando algunos ratones que Shining atrapo antes de que partieran al camino del pantano.

-papi…. ¿Cuánto tiempo crees que nos tome cruzar el pantano?- dice Ara mientras le daba un mordisco a una rata asada que estaba comiendo.

-supongo que una semana- dice Shining.

-hay…. Supongo que terminare acostumbrándome a este horrible aroma antes de que lleguemos al final- dice la potrilla y en eso los dos se echan a reír a carcajadas.

-papi… ¿no comerás?- dice Ara al notar que Shining no comía nada.

-no te preocupes por mi hija, no tengo hambre, tu come- dice Shining.

-¿seguro?- dice Ara.

-si mi cielo- dice Shining con una sonrisa.

-pero…. No has comido nada en todo el día….- dice Ara.

-bueno…. Mira…. Tenemos poca comida…. Tenemos que racionarla hasta que lleguemos al final del pantano- dice Shining.

-pero… creo que vi algunos peces en el agua…. Creo que podemos pescarlos…- dice Ara.

-no nos acercaremos al agua- dice Shining con severidad.

-pe…. Pero….- dice Ara un tanto sorprendida por el tono con el que este le respondió.

-perdóname cariño…. Es solo que…. no le tengo nada de confianza a los peces que viven en este pantano…. Podríamos enfermarnos- dice Shining.

-bueno… supongo que si…- dice Ara.

-no te preocupes por mi… cuando lleguemos a tierra firme yo también comeré…. Por lo pronto yo quiero que tú te alimentes bien mi cielo- dice Shining con una sonrisa.

Una vez que Ara termino de cenar, Shining la recuesta entre sus cascos y empieza a cobijarla con las mantas que tenían.

-papi…. ¿no crees que es demasiado temprano para dormir? Apenas va a oscurecer… aún hay un poco de sol- dice la potrilla un tanto confundida, pues nunca antes la había obligado a dormir tan temprano.

-necesitas dormir bien mi cielo- dice Shining.

-pero aún no tengo sueño- dice la potrilla.

-aun eres muy pequeña, tienes que dormirte desde temprano- dice Shining mientras la cobijaba con las mantas desgastadas que tenían.

-pero me puedo dormir en tu lomo….- dice la potrilla.

-yo también quiero descansar- dice Shining suspirando.

-oh bueno... pe… pero…. Creo que si recorriéramos más camino en la noche…. Podríamos recorrer más camino…. Cruzar más pronto- dice la potrilla.

-no te preocupes hija, cuando salga el sol continuaremos- dice Shining- hemos recorrido un largo camino, lo mejor será que los dos descansemos-

-es… está bien…- dice Ara suspirando.

-duerme cariño… mañana será un día largo- dice Shining.

-buenas noches papi- dice Ara acurrucándose en sus cascos.

Pasan las horas, para antes de que el cielo se oscureciera por completo, Shining y su hija ya estaban dormidos en el centro de la isla, con Shining abrasando a su hija fuertemente, acurrucados para mantener el calor de ambos.

Era la mitad de la noche cuando de repente se empiezan a escuchar algunos ruidos en el agua, esto genera que poco a poco Ara despierte, esta da un fuerte bostezo y mira a su alrededor, todo estaba completamente oscuro, y en eso esta nota algo que antes no estaba ahí, un escudo de energía lo estaba rodeando, esta voltea a ver a su padre que estaba durmiendo y en eso nota que su cuerno estaba brillando.

-¿papi? – piensa la potrilla extrañada.

En eso se escucha un chapoteo, la potrilla voltea en dirección al agua, esta quiere ir a investigar, pero en eso está lo siente, su padre la tenía bien sujeta.

En eso se escucha algo, un gemido que la potrilla en un principio no pudo identificar, pero en eso este se escucha un poco más fuerte y claro, este era un llanto, posiblemente de una mujer.

-¿hay alguien hay?- pregunta la potrilla un tanto intrigada, esta mira en dirección a la oscuridad, pero no hay nada, sin embargo por unos instantes pudo notar algunas ondas en el agua como si algo se hubiera asomado entre las profundidades del lago o la oscuridad, y los observara.

-¿hola?- dice la potrilla.

El llanto se escucha más fuerte y cercano a ellos, esta mira a su alrededor, pero no había nada, pese al miedo que debería estar sintiendo en ese momento, está más que miedo sentía curiosidad e intriga ¿Quién es el que estaba llorando? ¿Qué es lo que está pasando?

La pequeña Ara intenta soltarse de entre los cascos de su padre para poder ir a investigar mejor, pero Shining la apretaba muy fuerte aun para estar dormido.

-¿papi?- dice la potrilla, está por un instante sintió la tentación de despertarlo, pero algo dentro de ella le decía que no lo hiciera. Esta intenta soltarse de los cascos de su padre, se escucha unas ramas rompiéndose, esta voltea y es entonces que lo ve, ella ve a un Grifo, según parecía de género femenino, está la estaba observando, una ventisca helada golpea a la potrilla y a Shining, cosa que hace que Shining impulsivamente suelte a su hija para darse la vuelta y estar recostado en dirección contraria a la ventisca que lo acababa de golpear.

Ara mira como su padre la soltaba y se daba la vuelta para acurrucarse, en eso la potrilla voltea y la grifo que hace poco había visto ya no estaba, Ara sale del morral que usaba como bolsa de dormir y avanza hasta el final des escudo de su padre.

-¿hola?- dice la potrilla intentando divisar algo de entre el pantano y la oscuridad de la noche, pero nadie respondía- no te hare daño…-

En eso se escucha una respiración en otra dirección, esta voltea y es entonces que ve no a la grifo que vio hace poco sino a un unicornio, esta voltea a verlo y en eso está nota que el unicornio tenia puesta una armadura, que quizás ella no lo sabía en ese preciso instante, pero esa era una armadura antigua que hace más de mil años los soldados usaban.

-ho… hola…- dice la potrilla, esta mira más detenidamente al poni que yacía parado fuera del escudo, este la observaba y pudo notar que según parecía el poni estaba triste. Se escuchan una serie de llantos a lo lejos.

-¿Por qué estas triste?- dice la potrilla ya a punto de salir, pero en eso esta nota algo extraño, una luz blanca que brotaba de sus ojos, y de repente tras del poni se distinguían algunas bolas de luz blanca, flotando a los alrededores, se escucha una serie de respiraciones, al principio Ara pensó que era ella, pero en eso se da cuenta de que no era ella.

La potrilla da un alarido de sobresalto al ver como el poni que estaba parado junto a su escudo era envuelto en una luz intensa y se convertía en una esfera de luz flotante.

Por el alarido de su hija Shining inmediatamente despierta, y mira exaltado en todas direcciones al no encontrar a su hija en sus cascos.

-¡Ara!- dice Shining mirando a su hija un tanto exaltado.

-papi…- dice Ara.

-que…. ¿Qué haces?- dice Shining.

-solo…..- dice Ara.

Pero en esta esta escucha con un tono melancólico- por favor no le digas-

-yo…. Yo…- dice Ara.

-¿si? ¿Qué pasa cariño?- dice Shining con algo de severidad mientras miraba en todas direcciones.

-solo…. Solo tenía ganas de ir al baño…- dice Ara apenada.

-oh…. Bueno… me hubieras despertado… por favor…. No te alejes de mi… es muy peligroso este sitio de noche….- dice Shining.

-¿Por qué?- pregunta Ara un tanto curiosa.

-bueno…. Es que…. no se ve nada en la noche y podrías caer al agua si no tienes cuidado- dice Shining un tanto nervioso, era evidente de que sabía algo, pero este no quería decírselo a su hija.

-bu… bueno….- dice Ara.

-ven a dormir…. Por favor… no quiero que te vuelvas a separar de mi… no sabemos que es lo que pase si te separas….. Este pantano no es seguro- dice Shining tomando a su hija.

-por favor duerme otro rato- dice Shining.

-está bien papi…- dice Ara.

Shining acomoda a su hija contra su pecho y vuelve a aferrarse a ella con fuerza para no soltarla.

-pero que idiota fui…. No puedo dormir…. Tengo que asegurarme de que nada le pase a mi hija, y lo que sea que vive en este pantano y sale en las noches, no estoy seguro de que sea exactamente, pero no puedo permitir que se acerquen a mi hija- piensa Shining con severidad mientras miraba en todas direcciones y esta hacia brillar su cuerno para fortalecer su escudo protector.