Login

La gema sangrienta: libro 2-Lazos de Sangre

by parca333

Chapter 12

Previous Chapter Next Chapter

Lazos de sangre.

Capítulo 12. Los corazones de los criminales.

Shining se encontraba empacando rápidamente todas las cosas que tenían, principalmente mantas y algo de comida, este tenía que llevar a Trixie al hospital del pueblo más cercano, el cual era Ponyville, sin embargo, ellos se encontraban demasiado alejados del pueblo, es un gran camino el que se tiene que recorrer, y dado a lo delicada de Trixie, el camino irregular y peligroso a causa de la tormenta, y el hecho de que también llevaran a su hija consigo, les llevara al menos 3 días enteros, eso si no se encuentran con algo que los obligue a desviarse del camino, pues la tormenta provocó muchos cambios en el entorno, normalmente, a Shining le llevaría la mitad del tiempo en llegar, pero dado a que tiene que cargar a su familia e ir con cuidado, por eso le tomara mucho más tiempo.

Shining termina de empacar todos los pocos artículos que tenían y los envuelve en una sábana, para posteriormente colgársela en la espalda.

-es hora de irnos- dice Shining levantando a Trixie y colocándola en su lomo.

-no… mi hijo…. Shining….- dice esta entre delirios, su temperatura era cada vez más alta, cosa que confundían la mente de Trixie, quien aún seguía insistiendo en ver a su hijo perdido.

-lo siento mucho, pero no puedo seguir descuidándote, no estarías así si tan solo te hubiera llevado a un hospital desde antes- dice Shining convirtiéndose en el lobo blanco y colocándola en su lomo.

-Shining….- dice Trixie.

-lo siento- dice este emprendiendo su camino bajando de un brinco por la montaña.

-Shining… idiota…. No vallas tan rápido que Ara se va a caer- dice Trixie antes de quedarse dormida en el lomo de Shining.

-no…. ¡no te duermas!- dice Shining.

Mientras tanto, lejos del bosque Everfree, en los cielos se encontraba volando a toda velocidad el encapuchado.

-falta poco, dado a que amaneció perdí mucho tiempo, pero ahora ya casi llego, jeje si me apresuro terminare antes de que amanezca, incluso puede que ya este de regreso jeje- piensa el encapuchado mientras sobrevolaba las montañas, pasa unas horas y finalmente llega a la ciudad de Manehattan.

-Perfecto, es hora de jugar, 15 corazones me pidió, 15 corazones le llevare- piensa el encapuchado con una sonrisa, mientras sobrevolaba las calles de la gran ciudad.

-veamos, ¿por dónde empezare?- piensa el encapuchado mientras observaba las calles desde lo alto.

- mmmm creo que empezare por los barrios bajos- dice mientras empezaba a descender, este llega hasta la sima de un edificio de departamentos.

-perfecto, este será el mejor sitio, en Ponyville no creo que me sea tan fácil encontrar a 15 ponis como aquí- piensa mientras contempla la gran ciudad.

-no creo que me sea tan difícil, sé que aquí la delincuencia abunda - dice el mientras da un brinco y cae directo en un callejón.

- 15 ponis, 15 ponis, donde encontrare a 15 ponis que merezcan ser degollados, veamos, mmmmm 15 ponis mmmm - piensa el encapuchado mientras merodea por las calles.

No muy lejos de ahí, se estaba llevando a cabo un robo, un unicornio que amenazaba a un poni terrestre con su magia si no le daba todos los bips de la caja registradora.

-¡rápido, rápido!- dice el unicornio, y en eso este dispara un rayo contra un estante de fruta haciéndolo explotar en miles de pedazos.

-¡RÁPIDO!- dice el unicornio.

-¡sí! ¡Sí! ¡Aquí tiene!- dice el poni terrestre entregándole una bolsa llena de bits.

El poni toma la bolsa y la ve con indiferencia.

-¿pasa algo?- dice el poni terrestre con miedo.

-no- dice el unicornio abriendo el costal de bips y echando dentro todos los dulces que cabían dentro, en eso el unicornio sale de la tienda, corriendo con el botín en su lomo.

Sin embargo cuando este estaba por cruzar la esquina, este tropieza con algo, el unicornio cae de súbito, era el encapuchado quien le había puesto la pata para que este callera.

-hola- dice el encapuchado avanzando lentamente hasta el unicornio en el suelo, este toma la bolsa y la habré- buen botín- dice el encapuchado.

-¡DÁMELA!- dice el unicornio disparando un potente rayo contra el encapuchado, pero este inmediatamente lo esquiva, y desaparece entre las sombras. El unicornio corre hasta la bosa tirada y la recoge.

-demonios ¡¿Dónde estás cobarde?!- dice el unicornio entre dientes.

-atrás de ti- se escucha, el unicornio inmediatamente voltea y se encuentra con el encapuchado quien lo toma por el cuello.

-su… suéltame- dice el unicornio.

-pero qué demonios…. Solo eres un mocoso ¿Qué edad tienes? ¿15, 16 años?- dice el encapuchado.

-tengo 14- dice el unicornio.

-¡solo 14! te ves un poco más grande…. pues eres muy joven para echar a perder tu vida- dice el encapuchado dándole la espalda- no lo vales-

-¡a dónde vas idiota! ¡Devuélveme la bolsa!- dice el unicornio.

-la regresare al poni que se la quitaste- dice el encapuchado.

-¡no lo harás!- dice el unicornio disparando un rayo muy fuerte contra el encapuchado.

-¡eres un idiota!- dice el encapuchado desapareciendo en las sombras e inmediatamente reapareciendo frente a él, y tomándolo por el cuello, este lo levanta y lo tira al suelo.

-¡ESTUPIDO! ¡Te di una oportunidad! ¡Las escorias como tu deberían morir! - dice el encapuchado con severidad.

-suéltame idiota- dice el unicornio.

- Normalmente no doy segundas oportunidades- dice el encapuchado suspirando- ¡Pero dado a que eres un mocoso!- dice y en eso este lo toma por el cuerno y de un tirón se lo arranca, el poni da un grito de dolor.

-sin tu cuerno sé que no volverás a cometer estas estupideces, eres demasiado enclenque, estudia, trabaja, has lo que quieras menos robar o amenazar a otros- dice el encapuchado dejando caer el cuerno al suelo, el unicornio empieza a sangrar bastante por su herida.

-¡idiota! ¡Me arrancaste el cuerno!- dice el ex-unicornio.

-algún día me lo agradecerás- dice el encapuchado emprendiendo el vuelo.

Más tarde en unas de las calles más solitarias y oscuras de la ciudad, una yegua se encontraba regresando de su trabajo, merodeando por las calles, camino a su casa, sin embargo pronto esta empieza a notar como un par de ponis la seguían, esta empezó a sentirse insegura y temerosa, por lo que esta empieza a acelerar el paso, pero los ponis que iban tras ella hacen lo mismo, esta mira a su alrededor buscando algún sitio, como una tienda o algo parecido donde poder esconderse de ellos, pero no había ningún sitio donde esta pueda ocultarse, asustada esta empieza a acelerar el paso poco a poco hasta que finalmente se echa a correr, pero los dos ponis hacen lo mismo, persiguiéndola, en eso otros dos ponis le llegan por el frente.

-hola lindura-

-¿Qué hace una linda yegua como tú en un lugar como este?-

-¿Qué es lo que llevas hay?-

-¡mi bolso… tomen!- dice la yegua entregándoles el bolso, esta sentía que su corazón latía a mil por hora, estando a punto de salírsele.

-¡solo 72 bips! ¡Solo eso!-

-es todo lo que tengo…. Lo siento- dice la yegua asustada.

-no lo creo-

-¡¿Qué?!- dice está asustada.

-si es verdad jeje, tiene mucho más-

-ven acá- dice uno de los ponis tomándola.

-¡no! ¡No por favor!- dice la yegua asustada, pero los cuatro ponis la someten con facilidad.

-¡NOOOOO! AUXILIO ¡QUE ALGUIEN ME AYUDE!- suplicaba la yegua mientras los ponis la arrastraban hasta un callejón.

-hagamos esto rápido-

-no hay prisa, hay que disfrutarlo-

-¡no lo hagan por favor!- dice la yegua ya entrando en yanto.

-nadie te escuchara cariño-

-en eso se equivocan- se escucha, todos voltean y ven al encapuchado.

-si saben lo que les conviene dejaran ir a esa joven- dice el encapuchado con un tono burlón.

-jajaja ¿enserio?-

-¡y tú quien te crees para amenazarnos!-

-oigan, creo que este infeliz no sabe contar, nosotros somos cuatro, y este marica solo uno-

-hay que enseñarle modales- dice uno de los ponis más grandes anteponiéndose ante el encapuchado.

-dejen ir a la señorita y quizás les perdone la vida- dice el encapuchado.

-no lo creo- dice uno de ellos sacando una navaja y colocándolo contra el cuello de la yegua.

-muy bien, muy bien, esa fue su última oportunidad- dice el encapuchado.

-jajaja, si tu como digas-

-veamos, intento de violación, robo, amenaza, y a juzgar por su comportamiento no es la primera vez que lo hacen, creo que la sentencia es obvia- dice el encapuchado con una sonrisa.

-¿Qué tanto parloteas?-

-que les llego la huesuda- dice el encapuchado extendiendo su casco y es entonces que una venda surge igual que un látigo y se amarra contra el casco del poni que sostenía el cuchillo y lo arrastra, arrojándolo contra él, en eso el encapuchado le da un puñetazo en la cara con gran fuerza que le rompe la nariz, seguido de eso este levanta al poni y lo arroja contra los otros tres.

-tome señorita vallase- dice el encapuchado tomando el bolso y entregándoselo a la yegua.

-gracias….- dice ella tomándolo.

-corra- dice el encapuchado, al yegua entonces se echa a correr saliendo del callejón, pero inmediatamente uno de los ponis va tras ella.

-¡¿a dónde vas?! ¡No hemos terminado!- dice el poni que seguía a la yegua, pero en eso una venda se le amarra en la pata y este cae en seco.

-¡no! Yo no eh terminado con ustedes- dice el encapuchado arrastrando a poni de vuelta al callejón.

-les llegó su hora- dice el encapuchado, pero en eso un florero lo golpea en la cabeza, este suelta al poni, y los cuatro ponis empiezan a golpear y patear al encapuchado.

-¡quién te crees para enfrentarnos!-

-Idiota, nos quitaste a nuestra presa, esa yegua tenía un hermoso trasero-

-te crees un héroe je, ahora morirás jajaja-

-te mataremos ahora-

-¡no! ¡Ustedes morirán jajaja!- dice el encapuchado y en eso este emprende el vuelo tomando a dos ponis por el cuello y elevándose en lo alto rápidamente.

-veamos tu eres un pegaso mmmm, pero tú solo un poni terrestre, adiós- dice el encapuchado soltando al poni terrestre, dejándolo caer a su muerte mientras el pegaso y los ponis que se encontraban en el suelo miraban con impresión y atónitos como el poni terrestre caía, se escucha un estruendo muy seco, como si dejaras caer un costal de papas al suelo, todos miran con pánico e impresión al poni terrestre muerto.

-ESTE TIPO ESTÁ LOCO CORRE- dice uno de los ponis que se encontraba en el callejón al otro, ambos ponis corren rápidamente, pero en eso el encapuchado aparece frente a ellos.

-¿A dónde van? ¿No dijeron que ustedes iban a matarme? Jajaja- dice el encapuchado avanzando hasta los ponis, aun con el tercer poni aun en el casco, pero apretando con fuerza su cuello, ahorcándolo.

-su… suéltame…. Por… por favor…. No puedo…. Res… res… respirar- dice le poni que sostenía el encapuchado, en eso el encapuchado aprieta más fuerte y se escucha un tronido, era el cuello del poni partiéndose en dos, este lo suelta cayendo en seco ya muerto.

- 2 menos, y con ustedes serán 4 y me faltaran solo 11- dice el encapuchado, los dos ponis salen huyendo despavoridos, pero el encapuchado inmediatamente los alcanza.

-¿Cómo les gustaría morir?- dice el encapuchado.

Finalmente el silencio de la noche es interrumpido por los gritos de dolor y agonía de los dos ponis.

Más tarde en uno de los callejones se encontraba un poni terrestre de gran tamaño, golpeando a un pegaso con un ala rota mientras otro poni observaba como este lo golpeaba.

-el jefe te dijo que si no nos pagabas un abono más a tiempo, esto pasaría- dice el poni de gran tamaño.

-disculpen…. Pe… pero… no pude conseguir el dinero- dice el pegaso suplicando.

-fuimos pacientes con tigo, te dimos el dinero para la operación de tu esposa, ahora debes pagarnos- dice el otro poni mientras prende un cigarro, en eso el poni más grande le daba un puñetazo en el estómago al pegaso y este cae rendido, poniéndose de rodillas.

-per…. Perdonen…. Es mucho dinero…. No…. en mi trabajo no me pagan lo suficiente…. Les prometo que la próxima semana tendré lo suficiente para pagarles este abono- dice el pegaso escupiendo sangre.

-más te vale, si te atrasas otro pago, me temo que te ira mucho, mucho peor- dice el poni mientras escupía el humo en la cara del pegaso.

-ahora vete- dice el poni de gran tamaño, el pegaso se levanta con dificultad y sale corriendo lo más rápido que puede del callejón.

-como detesto que se atrasen con los pagos- dice el poni de gran tamaño.

-sí, que se le va hacer, son unos infelices que no tienen ni en que caerse muertos- dice el poni fumando.

-¿me das un cigarro?- dice el poni de gran tamaño.

-cómprate los tuyos- dice el otro.

-interesante, ¿ustedes forman parte de una banda o algo así?- se escucha.

-¡quién eres! Sal de donde estés-

-¡si! O mi amigo te arrancara la cabeza-

-hola, jaja- dice el encapuchado saliendo de entre las sombras-¿forman parte de una banda o algo parecido?-

-jeje, que no sabes, nosotros dos formamos parte de una de las más grandes organizaciones criminales de Manehattan, somos los cascos rojos- dice el poni.

-interesante, interesante, jeje ¿puedo unirme a ustedes?- dice el encapuchado con un tono burlón.

-si por que no- dice el poni más grande.

-momento ¿apenas nos conoces y ya quieres unirte a nuestra organización?- dice el otro.

-si por que no- dice el encapuchado.

-jajaja, no sé por qué, pero algo me dice que eres policía- dice el poni fumador.

-nop, no lo soy, se los juro por mi padre que lo tengo bajo tierra- dice el encapuchado.

-¿trabaja de minero?- dice el poni más grande.

-creo que se refiere a que está muerto- dice el otro.

-oh… disculpa- dice el poni más grande.

-si…. Como sea ¿me dejaran unirme a ustedes o no?- dice el encapuchado.

-jajaja, yo creo que no, esto ya es demasiado sospechoso- dice el poni.

-si… es verdad- dice el poni más grande.

-acabalo amigo- dice el poni, y el más grande arremete contra el encapuchado, este de un salto logra esquivarlo, y termina atrás del poni de gran tamaño, este vuelve a arremeter contra él, pero el encapuchado saca sus vendas y con estas amarra al poni más pequeño y lo usa como escudo poni.

-¡hay, perdóname!- dice el poni de gran tamaño apenado.

-las mariposas son azules- dice el poni cayendo inconsciente, por el fuerte golpe que le dio su compañero.

De repente las vendas se amarran contra los cascos del poni más grande, y el encapuchado brinca hasta el empezando a darle fuertes golpes en la cara con sus patas traseras, el poni logra soltarse y toma al encapuchado por los cascos, pero este continua dándole patada, tras patada en el rostro, luego lo carga y lo arroja contra una pared, el poni de gran tamaño gime del dolor mientras el encapuchado se le acercaba lentamente con frialdad.

-¡tú ganas! ¡Tú ganas! ¡Estas dentro!- dice el poni.

-no quiero estar dentro, quiero que me guíes con tu jefe- dice el encapuchado con una sonrisa, y en eso un brillo escarlata brotan de sus ojos.

Al día siguiente la noticia de al menos 20 criminales muertos se difundió por toda Manehattan, a todos se les encontró muertos, con severos golpes, cortes y fracturas a lo largo de sus cuerpos, pero lo que más llamo la atención y difundió el miedo en todos los habitantes de Manehattan, es que a todos los criminales se les robo el corazón, todos los cuerpos se encontraban sin el corazón.

Esa noche, en las profundidades del bosque Everfree, se encontraba el encapuchado, con un costal manchado con sangre, en dirección al castillo de las dos hermanas. Este ahora se encontraba destrozado por la anterior tormenta, al punto de que casi solamente se encontraban los cimientos y una de las torres medio destrozada.

El encapuchado entra a los terrenos del castillo, hasta encontrarse con una figura encapuchada con una piel de oso blanco.

-jeje, deberías leer los periódicos, unos te llaman monstruo, otros asesino, y otros más héroe, es interesante jeje, mataste a puros asesinos y criminales de Manehattan- dice Carnage.

-eso que importa, eran escorias que merecían la muerte- dice el encapuchado dejando caer el costal con un alrededor de 20 corazones.

-interesante, me entregaste más de los que te pedí- dice Carnage con una sonrisa.

-tuve la fortuna de encontrarme con un nido de esas escorias- dice el encapuchado.

-jejeje, gracias, muchas, muchas gracias- dice Carnage- no sabes lo útil que me has sido-

-¡solo dame lo que me prometiste!- dice el encapuchado.

-sí, sí, claro, pero que pasa con migo jejeje- dice Carnage buscando entre sus pliegues de ropa- aquí esta- dice con una vos infantil e inocente, y entregándole la cuchilla con cadena. El encapuchado la toma y se le queda mirando.

-¿pero qué es lo que pasa? ¿Por qué no reacciona?- piensa Carnage mientras observa como el poni encapuchado miraba su arma, en eso este nota un resplandor blanco brotar del cuello del encapuchado, este era tan leve que el encapuchado no lo noto, pero si Carnage.

-¿estas seguro que con esto lo derrotare?- dice el encapuchado.

-¿qué? Si… si… si no te será nada difícil derrotar a ese Shining- dice Carnage.

-perfecto- dice el encapuchado dándose la media vuelta.

-¿disculpa? ¿Pero quién te dio ese collar?- dice Carnage.

-que te importa, solo lo encontré en el suelo- dice el encapuchado.

-ya veo- dice Carnage.

-¿Por qué? ¡Algún problema escoria!- dice el encapuchado.

-no, no, adelante vete, y si quieres alguna otra cosa jeje, sabes dónde buscarme- dice Carnage con una sonrisa.

-la verdad no creo volver a verte, mi único deseo es matar a aquel que me lo quito todo- dice el encapuchado.

-¿y qué es lo que harás cuando lo logres?- pregunta Carnage- si tú quieres, puedes trabajar para mí, en verdad, me sería muy útil alguien con tus capacidades, y si trabajas para mí, te devolveré tu antiguo y hermoso rostro, y también podrás salir a la luz del sol jejeje-

-je, no me interesa ya, sé que aunque recupere mi rostro, nada volverá a ser lo mismo, mi vida se acabó- dice el encapuchado.

-como quieras, jeje, nos volveremos a ver, quieras o no- dice Carnage, el encapuchado abre sus alas y emprende el vuelo.

Mientras Carnage lo observaba como se iba el encapuchado, este se puso a pensar en el collar de oro blanco que traía con sigo el encapuchado -así que jajaja, el espejo blanco que Celestia tiene en su poder no es la única reliquia de los astrales que se encontraba en este mundo- piensa Carnage con una sonrisa- hay más, jeje, y yo me encargare de encontrarlas todas, jajajajaja, estas me serán muy útiles para mi juego-

Next Chapter: Chapter 13 Estimated time remaining: 0 Minutes
Return to Story Description

Login

Facebook
Login with
Facebook:
FiMFetch