Discord
Chapter 14: Fiesta y el día después
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Los personajes de MLP: FIM no me pertenecen. Antes de leer el capítulo me gustaría aclarar que mientras tejo la trama de los próximos capítulos del pasado de Discord, no tengo tantas ideas; así que pueden saltarse este capítulo y aun así entenderán perfectamente la trama. Por lo tanto este capítulo es como un capítulo auxiliar, prescindible. De todas formas si lo leen, espero que les guste.
Cuánto puede aguantar un Draconequus una aglomeración de gente en un lugar como el ayuntamiento sin caos, seguramente poco, pensaba Twilight. Sin embargo Discord se había mantenido sentado en una fila intermedia de asientos, cuando se daba por iniciada la fiesta de aquella noche con unas cuantas palabras de la alcaldesa y claro, de Celestia después de ella.
Sin embargo, el señor del caos se mantenía impaciente, de forma muy sutil ya había jugado bastantes bromas a los diferentes ponis que pasaban, detalles simples, que no arruinarían a gran escala la velada eran su medio para dar el caos necesario a la fiesta; agregar un poco de purgante al ponche, tapar todos los baños y detalles que no eran visibles.
Para cuando la fiesta inició Discord ya se encontraba aburrido, de qué servía una fiesta si no podía divertirse… si no lo hacía a su manera, no se divertiría, esa era una regla de oro que resultaba cierta.
Sin embargo sus expectativas de lo que sería una noche poco divertida, por no decir aborrecible, se vieron descartadas cuando vio ingresar un abastecimiento de sidra en el lugar, pese a que el sistema de los ponis se volvía un poco más "alegre" con dicha bebida, necesitaban una cantidad considerable para llegar a este; así que no lo dudo un segundo y se dirigió hacia el preciado cargamento, sin completar el plan en su cabeza, con un simple chasquido incrementó el sabor y por supuesto, la substancia responsable de la reacción de los ponis, después cual araña en su red, se sentó esperando que sus presas llegaran.
En un lapso relativamente corto, la pegaso de melena multicolor llegó a la mesa con una sonrisa.
- Espera Raimbow Dash, no empieces con la sidra tan rápido. Advirtió Applejack, al escuchar aquello Discord hizo una seña de frustración.
- Oh vamos Applejack, no es que me la vaya a pasar toda la fiesta bebiendo la fabulosa sidra de Sweet Apple acres. La sonrisa de Discord no tardó en aparecerse, hecho que Luna notó desde el otro extremo.
No conocía muy bien a Discord como para saber cómo era en las fiestas; pero algo dentro de ella le decía que no sería exactamente del tipo tranquilo, así que sorteando a varias parejas de baile, unas sillas mal ubicadas y un vaso de ponche salido de la nada, sus cascos la llevaron en dirección al Draconequus, hasta que un color de pelaje familiar se hizo visible entre toda la alegre multitud que se encontraba celebrando.
La crin amarilla, el pelaje rojo y por supuesto el característico yugo, unidos formaban al corcel que le llamaba la atención desde hace tiempo, se encontraba transportando varios barriles de sidra y desde luego, mientras lo hacía recibía la mirada de más de una admiradora, que por suerte, ignoraba de forma involuntaria.
Se habían separado después de que ganaron las competencias en la plaza principal, ni siquiera les había alcanzado el tiempo como para hablar, pese a que no era del tipo conversador, era muy acogedor hablarle, de todas formas, mirando para otro lado se vista se dirigió hacia el Draconequus que ya se encontraba a pocos metros de distancia, cuando este percibió la llegada de Luna, tomó un vaso de ponche y se lo ofreció, Luna desde luego tomó agradecida el vaso.
- ¿Por qué no sales a bailar Discord?
- Es que no me sé el paso, créeme si bailo, debe haber un poco de caos, y ¿qué me dices tú?
- Pues, me encantaría bailar con un corcel ahora, pero se nota que está ocupado.
- Una poni más hermosa que tú supongo.
- ¿Qué? No nada de eso, solo está trabajando. Respondió mientras daba los primeros sorbos a la bebida.
- Ya veo... – decía mientras no quitaba el ojo de encima de Raimbow Dash, pronto las tres o cuatro jarras de sidra que llevaba tomando harían efecto.
- Raimbow, no crees que deberías dejar la sidra unos cuantos minutos – advertía algo tímida Fluttershy, tratando de vencer a la potencia del volumen de la música.
- Ok Fluttershy, pero solo si bebes esa conmigo.
- De acuerdo… Fluttershy junto con su amiga de Cloudsdale chocaron las jarras y al unísono terminaron el contenido de las mismas, dejando las jarras en la barra, ambas se dirigieron a la pista a sacudir los cascos junto con el resto de sus amigas.
Ya solamente era cuestión de tiempo, la mayoría de los ponis había pasado a refrescar la garganta un poco, ya sea con ponche o sidra, pronto harían efecto y Discord podría divertirse a su modo; sin embargo cuando las tres potrillas llegaron para tomar algo de sidra, el Draconequus no pudo evitar pensar el efecto que la bebida tendría en las pequeñas, por lo cual su cola de dragón, como si de una de sus garras se tratase, hizo un chasquido, haciendo que las bebidas de sus amigas volvieran a la normalidad, era más caos del que necesitaba para divertirse, al menos para aquella noche.
- Hey, ¿qué es exactamente lo que estás haciendo?
- Nada princesa, solamente me preparo para salir a divertirme un poco.
- Con la idea que tienes de diversión prefiero no arriesgarme.
- Vamos, menciona una vez en la que me haya abusado de mi diversión.
- Déjame ver… ah sí, cuando metiste a mi hermana en una laguna de agua fría. Decía la princesa de la noche con sarcasmo y recalcando la palabra hermana.
- Eso solo fue un accidente, si hubiera querido convertirla en hielo, habría empezado con su melena.
Luna miró extrañada al Draconequus mientras daba otro sorbo a su ponche – que por cierto, estaba delicioso.
- Es que se parece a uno de esos conos de helado arcoíris que venden en Cloudsdale.
Luna no pudo evitar reír por la ocurrencia de su interlocutor, era cierto, en más de una ocasión había llegado a pensar lo mismo de la melena de su hermana, sin embargo…
- Estoy segura de que se resfrió, eso significa que mañana tendré que levantar el sol.
- Pensé que te gustaban los retos, o es acaso la princesa de la noche no puede con todo…
- Ja, ya lo hice más de una vez, esto no será nada para mí.
- De todas formas, ¿qué hiciste con la sidra?
- Algo diferente de lo que hice con el ponche.
Entonces el purgante comenzó a hacer su trabajo, en el estómago de Luna se libraba una batalla que era muy graciosa de ver para el señor del caos, cuando finalmente entendió a lo que se refería, tomó a Discord con ambos cascos y le dijo.
- Esto no se quedará así…
Acto seguido galopó a toda velocidad hacia los baños, bueno, era más que seguro que no se lo pasaría de lo mejor allá. Discord se contentó con su primera broma; sin embargo había otra que era el plato fuerte de la noche, no debía perder de vista a Raimbow Dash.
La pegaso cian se mantenía bailando y bebiendo varias jarras de sidra cuando paraba por un rato a descansar, se encontraba junto a Fluttershy, cuando el efecto de la sidra empezaba a hacerse cada vez más notorio en ambas, Fluttershy empezaba a ser un poco más abierta, a tal grado que cada vez era menos tímida con unos corceles que la venían siguiendo, Raimbow Dash por otro lado no dejaba de ver todo aquello y unírsele en la pista cuando esos dos se peleaban para sacarla a bailar.
- Te dije que no me dieras tanta sidra. Le decía Fluttershy mientras daba pasos de baile demasiado buenos para ser de ella.
- Jeje, solo diviértete amiga. Poco después, ambas parejas de baile daban una vuelta, ambas pegasos dieron una vuelta en el aire de forma sincronizada al encontrarse del otro lado.
- No creas que eres la única que puede hacer esos pasos.
- ¿Estás retándome? Decía Raimbow extrañada y al mismo tiempo emocionada con la forma de actuar de su amiga.
- Desde luego, la perdedora debe dejar de beber sidra.
- De acuerdo, solo un round, porque no necesitaré menos.
- Muchas palabras amiga, no veo que bailes.
Apelando a la debilidad que Raimbow tenía con la sidra, Fluttershy le daba mayor interés a la pequeña competencia que habían hecho, Raimbow Dash desde luego, considerando lo que estaba en juego aceptó moviendo la cabeza, se aceró un poco al corcel que bailaba junto con ella.
- Escucha, espero que sepas bailar bien.
Sin esperar más palabras, ella empezó un movimiento continuo, fluido de sus cascos, hasta que pudo lograr sincronizar con el corcel una, de derecha a izquierda, de izquierda a derecha, las cuatro patas de ambos hacían dar giros lentos mientras no perdían contacto visual, sin esperar más, Raimbow se sujetó de su cuello y se arrastró con sus rodillas por debajo del corcel, empujándolo de forma suave; rodando por el piso suavemente, el cuello y la fuerza del poni hicieron exactamente lo que Raimbow deseaba – se entendían bien –,eso era rodar sobre si.
Ella levantaba un suave vuelo por sobre él, siguiendo la trayectoria de su acompañante y sin perder el contacto visual, mantenía sus alas en un movimiento suave y llamativo, a tal grado que parecía que cada de una de sus plumas seguía un patrón de movimiento en línea. Ese truco llamó la atención de gran parte de los que se encontraban bailando, por lo cual se hicieron a un lado para deleitarse con el espectáculo que ofrecía la conocida pegaso cian.
Cuando el poni terminó de dar la vuelta en el piso, Raimbow lo tomó de uno de su cascos, acto seguido lo atrajo hacia ella y comenzaron a bailar de forma conjunta, Raimbow se alejó un poco y mientras ambos se paraban en dos cascos, él la tomaba por uno mientras ella se daba un par de vueltas, lo cual gracias a su melena multicolor y la luz de un reflector que se había encendido gracias a ella.
Se alejó un poco más, soltando el casco de su compañero para dar dos vueltas más y por último, una voltereta en el aire, para aterrizar finalmente con el corcel, quien mantenía un paso constante y bien ejecutado, no obstante Raimbow era el centro de atención de todos los presentes.
Sin vacilar un segundo más, se pusieron frente a frente mientras Raimbow movía sus flancos de lado a lado de forma sutil y leve, lo suficientemente seductora como para entrar en el baile y no en lo ridículo, entrecerraba los ojos mientras con una sonrisa observaba a su compañero de baile, quien le devolvía el gesto, un dos tres, un dos tres, los paso sincronizados junto con el sonido de las trompetas y violines de la música hacían de sus pasos simples los mejores.
Vinyl y Octavia eran buenas, pero cuando decidían unirse para realizar un grupo – que se separaba la misma noche en la que se creaba –, eran inigualables, la música que creaban era simplemente grandiosa, combinaba los instrumentos de Octavia con las mezclas electrónicas de Vinyl, esa música simplemente tenía de todo. Esperando una fracción de segundo hasta que las trompetas callaran, las mezclas de Vinyl empezaran a ser de bajos y de sonidos que eran cada vez menos notorios, dándole a Octavia el tiempo para lucirse, Rainbow dio unos pasos atrás, sentándose y atrayendo a su pareja con ella, con un cuidado extremo Rainbow puso ambos cascos en el estómago del corcel, empujándolo con suavidad para que entendiese que quería que diera una vuelta en el suelo nuevamente, pero en lugar de soltarse, cuando la vuelta del corcel finalizó, él se concentró en impulsar a su pareja de baile hacia arriba.
Rainbow en un movimiento singular, levantó un vuelo, haciendo un círculo perfecto por toda la pista de baile, los presentes simplemente se deleitaron con el baile de la pareja era algo muy hermoso de ver, para finalizar, Rainbow aterrizó con ambas rodillas en la pista, deslizándose, junto con su pareja unos centímetros, ambos tomados de un casco terminaron de forma impecable su baile, la pegaso cian, desde luego hizo un gesto de reto a su amiga amarilla y de momento su oponente.
Los aplausos no faltaron, Discord por su parte no se esperaba aquel tipo de caos, pero debía admitir que era muy divertido ver a Rainbow bailar, no tenía idea de que ella pudiera bailar tan bien; tampoco sabía la razón de tal multitud de ponis, cuando se acercó, vio cómo Fluttershy se encontraba en el centro de la pista, los reflectores ahora se habían centrado en ella.
Fluttershy no pudo tener una reacción menos cotidiana, puso uno de sus cascos sobre el lomo del que sería su compañero.
- No nos quedaremos atrás.
Afirmando con la cabeza, el corcel le dio a entender que daría lo mejor de sí. La música empezó, ahora Octavia ayudaba con un acordeón y tenía preparada una guitarra para después, Vinyl era quien dirigiría, Octavia se lo hizo saber guiñándole mientras situaba sus cascos en su instrumento.
La pista inició con unos cuantos sonidos electrónicos no muy llamativos, Octavia siguió de cerca a su socia con el acordeón, amenizando y dando cierta armonía a dichos sonidos, cuando de repente, Vinyl con un disco de un tema poco conocido, empezó a hacer una fusión impresionante.
Un tanto movida y al mismo tiempo con unas maracas, era parecida a un tema caribeño y junto con la cooperación de Octavia se formaba una pista bailable, movida, alegre y con tonos sutiles del característico acordeón de Octavia, que desprendían unas notas que a cualquiera le partirían el corazón.
Fluttershy inicio con unos pasos lentos, que empezaron a acelerar su ritmo, hasta concordar con el de la música, su acompañante no tardó en imitarla, juntos empezaban a alejarse centímetro a centímetro, estratégicamente, Flutershy se posicionó delante del reflector, puede que Rainbow Dash usara la luz para crear un efecto de arcoíris, pero no era la única con trucos bajo las herraduras.
Flutershy se sentó y bajó la cabeza, la luz ocultaba su rostro en la sombra y lentamente levantaba su rostro con un gesto de timidez y ternura, para después llevar uno de sus cascos a su pecho y moverlo lentamente enfrente suyo, en ningún momento perdió aquella mirada dulce y tierna.
Los pasos que ahora estaban totalmente sincronizados por la pareja, se vieron interrumpidos con los pasos de Flutershy, lentos hacia el corcel y mientras habría ambas alas, se acercaba aún, hasta quedar pocos centímetros cerca, desde ese momento, la actitud que había mantenido cambió, empezaba a alternar los movimientos que realizaba; movía sus cascos de lado a lado, moviendo levemente la cabeza y mientras su la sonrisa única distraía al público, ella y su pareja se levantaron en dos patas, entonces, al igual que Rainbow ella dio un giro mientras el casco de su compañero se unía con el de ella, aterrizando de nuevo en la pista, la tomó de ambos cascos y con toda su fuerza impulsó a su compañera en el aire.
La pegaso amarilla demostró un control de vuelo que Rainbow desconocía, bajando lentamente, mientras el corcel levantaba las patas frontales, haciendo una seña imperceptible, Fluttershy desde luego la vio y entendió lo que quería decirle, con las alas extendidas y mientras daba aleteos lentos y suaves, ambos juntaban los cascos, de las patas traseras en el caso de Fluttershy y delanteras en el del corcel, en tres pasos hacia adelante, ambos caminaron en dos patas, Fluttershy por supuesto se apoyaba en los cascos del corcel, moviéndose en total sincronía.
Los presentes ya se encontraban fascinados con el cambio en Fluttershy; sin embargo les aguardaba lo mejor, tomando fuerza, el poni bajo a Flutershy hasta cierta altura, sin dejar de mantenerla sobre sus cascos, y después, una seña de ella fue suficiente para que le diera cierto impulso, ella se elevó en el aire, extendiendo las alas y levantando sus cascos en alto; fue un momento exacto para que su amigo Discord la apoyara haciendo aparecer varias mariposas de color amarillo y celeste saliendo de su melena, la idea era causar un poco de caos, pero nadie se alarmó, quizás si hubiese usado abejas… pero no podía hacerle eso a Fluttershy.
Los aplausos, ovaciones y silbidos fueron repartidos, incluso algún poni había conseguido un ramo de flores y lo lanzó, Fluttershy solamente se dejó caer en las patas del corcel, quien la recibió.
Era evidente quien había ganado, Rainbow se lo hizo saber dejando la jarra de sidra y buscando a sus amigas, ella de la misma forma la siguió, Discord pudo perderlas de igual forma, por un segundo se sintió celoso del tipo, no obstante no pasaría mucho tiempo hasta que tomase el ponche, así que las cosas estaban bien.
Por su parte, el grupo de pequeñas potras se encontraba ya muy cansada, su energía se había retirado en la pista de baile, ni que decir de sus hermanas mayores, todas estaban ya exhaustas, entre las tres consideraron mejor irse con ellas.
A poca distancia se encontraban Fluttershy y Rainbow Dash sosteniendo una conversación efusiva.
- No puedo creer que supieras pasos tan increíbles, por qué no me lo dijiste antes.
- Ya lo sabes, soy un poco tímida.
- De todas formas, ya me quería ir, se está haciendo de noche y tengo que levantarme a primera hora para retirar unas nubes.
- Bueno, a ver si nos vemos para tomar un helado o algo.
- Es mejor si vamos todas ¿no?
- Claro, además, necesitarás algo para hacer pasar los efectos de la sidra.
Rainbow rio levemente, le gustaba esa Fluttershy, pero era un poco raro verla así.
- Rainbow, ¿Me llevas a casa? La poni que seguramente era su mayor admiradora y hermana adoptiva jaló su crin para llamar su atención.
- Por supuesto Scoots, dame un segundo y nos vamos.
De la misma forma, las integrantes de las CMC se dirigieron donde sus respectivas hermanas; teniendo la misma respuesta. Igualmente la fiesta estaba acabando, pues el auntamiento empezaba a vaciarse.
Discord por su parte sentía como si hubiese pasado una prueba de fuego, cuatro horas sin hacer ningún caos que estuviese dentro de su gusto, en otras palabras su diversión había sido casi nula, salvo cuando vio a sus amigas bailar.
Las calles de Ponyville se llenaban con los que se retiraban de la fiesta, Discord se disponía a volver a lo que podríamos llamar casa, sin embargo una voz muy conocida lo detuvo.
- Estoy muy feliz por ti, lograste quedarte tranquilo por mucho tiempo.
Su mejor amiga se encontraba cerca y un par de aleteos la pusieron a su lado, en aquel momento, no hubiera querido estar con nadie más que ella.
- No pude creerlo, bailaste como si no hubiera un mañana y le ganaste a Rainbow – decía mientras una figura hecha de nieve imitaba los movimientos que la pegaso había realizado en la competencia.
- Si, pero no me lo digas, creo que bebí mucha sidra, soy un poco menos tímida cuando bebo una cantidad de sidra, se me olvidaba, gracias – un abrazo fue suficiente para compensar a su amigo por su ayuda, por muy pequeña que esta hubiera sido era un buen avance en se reformación.
Por unos segundos Discord no supo contestar, no estaba acostumbrado a las muestras de afecto y de hecho el siempre solía ser quien los daba, bueno a su manera, ya saben a lo que me refiero.
- Por nada, eso es lo que hacen los amigos ¿no es cierto?
- Claro que sí, creo que aprendiste más rápido de lo que imaginé – Fluttershy soltó finalmente al señor del caos, los efectos de la sidra se mantenían vigentes en ella, sin embargo sus palabras no dejaban de ser sinceras.
- Gracias a ti, no recuerdo haber estado en un lugar por tanto tiempo sin aburrirme.
Fluttershy a veces no comprendía a Discord, al pasar tanto tiempo con él o al menos más que cualquier otro poni, sabía muy bien que el significado de las palabras del Draconequus tenía, en ocasiones, un significado oculto; al parecer le encantaba el misterio.
Después de aquella conversación, la caminata de ambos fue totalmente silenciosa; sin embargo obviando el hecho de que a su amigo le encantaba conversar, Fluttershy notaba la mirada de Discord perdida en una cavilación tan profunda que vio poco conveniente despertarlo, hasta que llegaron a su puerta, en aquel maravilloso jardín sobre la colina, Discord se acercó al barandal mientras observaba a la luna, llena sin duda, su luz era todo lo que necesitaban para observarse el uno al otro.
- Nunca vi que estuvieras callado por tanto tiempo.
- Jaja, es que no tengo nada interesante que hablar.
- Eso tampoco es común.
Discord observaba a su mejor amiga, la luz de la luna hacía que los rasgos más destacables de su rostro fuesen más notorios, sus ojos la reflejaban, aquellos ojos trataban de develar el misterio que Discord mantenía oculto.
- ¿Qué te pasó?
No podía dejar que ella supiera, no debía, era algo que simplemente no tendría caso y que no tendría el valor de decir; causarle dolor a ella era una de las cosas que se había prometido a si mismo.
- Ese poni, ¿lo conoces?
- No mucho, es un familiar lejano de Applejack, pero vaya que bailaba bien ¿Por qué lo preguntas?
- Nada en especial, solamente parecía que le estaba gustando bailar contigo.
- A mí también me gustó, pero era una competencia y gané, es bueno ganar en algo de vez en cuando.
- Si, ¿viste la cara de Rainbow cuando terminaste de bailar?
- Sí, fue genial, no recuerdo haberme divertido tanto haciendo algo que no me gusta tanto hacer.
Fluttershy comenzaba a bostezar, el cansancio se apoderaba de ella, gracias a la pegaso cian, Discord sabía que no tardaría en dormir, así que la hizo levitar mientras la puerta se abría, al mismo tiempo una manta con la imagen del mapa de Equestria.
- Hey, creo que puedo volar hasta mi cuarto sola.
- Un amigo está para ayudar ¿recuerdas?
- Entonces, gracias Discord, algún día te pagaré todos los favores y regalos que me hiciste.
Discord estaba cambiado, de eso no había duda, mientras llevaba a una adormilada Fluttershy escaleras arriba, Angel notó la presencia de ambos y los siguió de cerca.
- Muy bien, hogar dulce hogar. Mientras hacía levitar a la pegaso, esta se quedaba totalmente dormida, confiando en su amigo.
Discord en cambio se observó a la pegaso amarilla durmiendo con una reconfortante sonrisa, una que no veía muy seguido. Se acercó para hacer un puño y restregarlo por su melena, poco después la observó sintiendo cierta melancolía en algún lugar dentro suyo; a continuación la acostaba en la cama para después cubrirla con la manta que había hecho aparecer. Se veía tan dulce, tan apacible.
Un movimiento involuntario, hizo que uno de los mechones de su melena se despeinara, con una de sus garras movió al rebelde, la sensación se hacía más profunda e incómoda al mismo tiempo.
- No necesitas pagarme por nada, yo soy el que te debe y creo que no poder pagarte por todo.
Sin más, Discord desapareció del lugar, regresando al mismo lugar donde llevaba descansando desde hace días.
Varios de los estantes se detuvieron, unos anillos moviéndose en diferentes direcciones bajaban del techo; Discord observo con cierta sonrisa el objeto bajando, cuando este comenzó a despedir una luz, una sonrisa apareció en la cara del Draconequus, después de mucho tiempo no la había visto y ahora se encontraba a pocos metros de distancia.
- Hola Andreia…
/**** Una noche de descanso es lo que había en casi toda Equestria, en aquella época la paz y la tranquilidad reinaban con mayor intensidad en toda Equestria, de tal suerte que sus habitantes tenían sueños felices, ninguna pesadilla, solamente falta de sueño por algunos guardias o ponis con insomnio a causa de comer muchos dulces o estaban en el turno de noche en la guardia, ja, tipos con la mala suerte de haber sacado el palillo de mayor tamaño; en fin, dejando de lado a todos esos casos especiales no había nadie que no estuviera plácidamente dormido en una cómoda cama.
Sin embargo, no muy lejos de donde sería la noche de los corazones cálidos en el mismo castillo, una poni tenía un sueño turbio, pues dentro de ella, su cuerpo empezaba a tener una reacción por los bruscos cambios de temperatura, los primeros ronquidos, su garganta comenzaba a secarse. No existía duda alguna, el resfrío estaba llegando.****/
*** Al día siguiente (unas horas después del amanecer) ***
- Ya te lo dije, estoy bien, puedo cuidarme muy bien por mi misma.
- Lo sé princesa, es que una vez el me jugó una broma fingiendo un resfriado.
- Twilight, la venganza no es buena.
- Lo sé princesa, pero hágame este favor, Discord aprenderá algo, estoy segura.
- Enserio te importa tanto que el pase por lo que te hizo pasar.
- Princesa usted no estuvo cuando lo hizo, fue demasiado odioso como para olvidarlo.
Celestia se puso a considerar mejor la situación, así que, teniendo en cuenta que Twilight se lo pedía, que su resfriado tenía era en gran parte la culpa de Discord y que incluso ella quería que este tuviera algún tipo de castigo: tomó una decisión.
- Está bien Twilight, pero debe aprender algo, de lo contrario, esto será como darle de su propia medicina.
- Entiendo princesa, pero ¿acaso no crees que es lo que se merece?
- Dos problemas de un tiro, eso es lo que creo.
Twilight se quedaba parada mientras empezaba a realizar el hechizo de convocación para traer al Draconequus a la habitación, desde hace tiempo que bastaba con su magia para poder realizarlo; Celestia supervisaba el hechizo de cerca, aun no podía creer lo que su amiga le había convencido hacer.
Una descarga de luz en círculo develó donde sería transportado el señor del caos, dando un giro completo la luz desapareció gradualmente, dejando ver al mismísimo señor del caos, acostado en el piso, la princesa del sol esbozó una sonrisa; al parecer nada lograba despertarlo y su aspecto era gracioso, qué señor del caos duerme con una pijama con diferentes huellas estampadas en ella, además tenía un peluche de una cabra algo viejo en su brazo. Twilight, por supuesto no podía esperar para despertarlo y darle la noticia, así que se acercó con gran alegría, casi dando saltitos por cierto.
- Discord… - No pasaba nada.
- Discord… - El mismo resultado.
- Disc… -La boca de la alicornio desapareció.
El Draconequus dio vuelta, su descanso se veía interrumpido, otra vez no dormiría lo suficiente, un segundo, Celestia podía reconocer el peluche, acaso era…
- Ustedes no saben el tiempo que requiere un sueño reparador de belleza no es así, sus ojos seguían cerrados, como si se resistiesen a dejar de descansar.
- Discord, debes hacerte responsable por tus actos.
- Y que actos serían esos oh majestuosa y sabia Celestia, o debería decir molestia, algunos no conocen los sueños de belleza no es así. El señor del caos hablaba con los ojos cerrados y frunciendo el ceño, Twilight por otra parte no dejaba de emitir sonidos que no llegaban a ser comprensibles por la falta de su boca.
- Ayer cierto Draconequus provocó que el hielo sobre el que me encontraba colapsara, adivina que pasó.
- Jajajaj, las carcajadas de Discord no se hicieron esperar.
- Entonces, adivina quien tiene que reparar los daños.
Discord cambió de expresión, era más que notorio que Twilight se encontraba sonriendo, a pesar de que no tenía boca con la cual hacerlo.
- No lo creo Celestia, tú te caíste, no te empujé ni nada.
Twilight logró revertir el hechizo que Discord había hecho.
- Pero lo causaste, eres responsable directo y debes quedarte a hacerte responsable de tus actos. La alicornio ahora si podía mostrar su sonrisa de satisfacción.
- Estoy segura de que no necesitaré llamar a Fluttershy para convencerte. Agregó Celestia.
- Está bien, pero no esperes que te prepararé sopa. Discord había cedido fácilmente, dentro de él, planificaba una forma de devolverle a Twilight el favor, pero la descartó al instante, no tenía caso.
- Bien, princesa, Discord – al mencionar el nombre del señor del caos le dio un tono sarcástico – es mejor que regrese a Ponyville, vendré en la noche para ver la función.
- Bien Twilight, cuídate.
- No se olvide de lo que hablamos.
Extrañado y somnoliento, Discord aún no sabía que era lo que le esperaba, sin embargo, para cualquier tarea tendría una solución ligeramente caótica, Celestia podría atacarlo con lo mejor que tenía.
La princesa del día solamente esperó a que Twilight saliera del castillo, hasta que el sonido de sus cascos se hiciera inaudible, una vez que eso ocurrió, empezó a dirigirse a su habitación, Luna la cubriría en las pocas tareas que tenía por esas fechas.
- Bien Discord, puedes irte. Dijo evitando toser.
- ¿Es broma? Me traes aquí para pedir que me haga "responsable de mis acciones" y luego me dejas ir.
- Twilight te trajo, yo solamente le seguí el juego, creo que quiere hacerte pagar por la vez que te hiciste el enfermo o algo así.
Quizás fue psicología invertida o un simple desdén por el cuidado del Draconequus o incluso una independencia hacía el apoyo externo; pero las palabras de Celestia provocaron en él lo contrario a lo deseado.
- Lo que dices es que no crees que pueda encargarme de ti.
- No es eso, es solamente que no me gusta que cuiden de mí.
- Nononono nada de eso, acaso crees que no soy capaz de hacerlo.
- No, apuesto a que serías capaz. Pero como te dije, no me gusta que cuiden de mí, es solamente un pequeño resfriado.
- Nada de eso mocosa princesa, yo cuidaré de ti. Un termómetro gigante, unas pastillas para la tos y una gran cantidad de objetos medicamentos, incluso una caja de saborizante de sopa aparecieron.
El caos se avecinaba, Celestia lo podía percibir, rodaba los ojos, si no declinaba pronto las cosas se pondrían caóticas.
- Escucha, yo te agradezco… Discord se aproximó y cerro sus labios con un vaso lleno de leche chocolatada.
- No hay de que más hablar princesa, ahora, primero necesitamos unas pastillas para la tos, necesitamos "un vaso con agua"
En las afueras del castillo, Big Shield se encontraba haciendo guardia, cuando de repente las puertas se abrieron de forma violenta y después una gran cantidad de agua Salió de ellas, llenando los jardines y siendo absorbida por la tierra de los mismos.
- Discord, te dije que no era necesario. La princesa del día comenzó a toser por causa del agua, para su sorpresa, su garganta se despejaba.
Discord se encontraba con un respirador, un flotador en la cola y unos lentes para piscina.
- Perfecto, sigamos, nos queda inyección.
- Espera, creo que ya me mejoré, fingir haberse recuperado era lo único que podía hacer; pero por desgracia engañar al señor del caos era más difícil de lo que pensaba.
- Buen intento. Si no querías la inyección solo debías decírmelo. Acto seguido, un chasquido dirigió a ambos dentro de la habitación de Celestia.
- Discord enserio, enserio, no necesito que nadie me cuide, puedo hacerlo yo sola, solamente debo hacer una poción y eso es todo.
- La fórmula 25 de Von supongo.
- ¿La conoces?
- Sí, pero es muy aburrida, que de divertido tiene perderse estar en cama, comer lo que se te antoje y quejarte por todo.
- Esas son las razones por las que los resfriados no son considerados divertidos.
- Que locos están los ponis.
Acto seguido, Discord puso a Celestia en su cama, con un chasquido, ella por supuesto trató e levantarse, pero como si las sábanas tuviesen vida propia, la sujetaron contra su cama.
- Discord esto no se considera como cuidado de un enfermo.
- Y tú no eres exactamente alguien a quien cuidaría sin pedir nada a cambio, pero míranos aquí.
- ash… La furia que el Draconequus provocaba en la princesa se hacía evidente. En todo caso, cualquiera esperaría que usara un hechizo para librarse del agarre de sus propias sábanas; pero dejo de esforzarse y se acostó, era mejor si dejaba que Discord hiciese todo lo que estaba en su lista de cuidar enfermos.
- Haber, el penúltimo paso es… sopa – los ojos de Discord se centraron en la enferma y los dedos de sus extremidades superiores dibujaron un pequeño tazón en el aire.
- Ay… nooo.
Un chasquido fue suficiente para traer una cocina flotante y unas ollas, así como ingredientes distintos que el señor del caos mezclaba, picaba, condimentaba y en fin, la velocidad Celestia veía el desorden que hacía en su habitación, obviamente no se quedaría para limpiarlo.
Después de casi quince minutos y estar a punto de causar lo que se llamaría un tornado en un pequeño lugar de la habitación, el Draconequus terminó de preparar la dichosa sopa.
- Aquí tienes Celestia.
- Emmm, gracias, pero no debería estar ya sabes, ¿parada?
- Tienes razón – un chasquido la puso nuevamente sobre el piso de madera.
- Anda, toma algo de sopa.
Discord se quedaba observando atentamente a la princesa, quien se preparaba al sabor más extraño que se atrevería a probar, podía ver algo brillando en el fondo del tazón. Tomando aire para soportar lo que fuese que el señor del caos le hubiese dado, dio un sorbo al alimento.
Para sorpresa de su paladar, era exquisita.
- Deberías ver tu rostro, parece que te esperabas de todo menos esto.
- Está muy deliciosa, ¿cómo es que?
- Alguien que estuvo conmigo mucho tiempo, sabía preparar los platillos más deliciosos combinando las cosas con aspecto más feos. Aprendí algunas recetas de él.
- Bueno, ciertamente no fue Star Swirl, de solo recordar su ensalada de frutas se me quita el apetito.
- ¿La probaste? No puedo creerlo, ni siquiera con magia lograba hervir agua.
Las carcajadas de ambos se extendieron por unos segundos y por toda la habitación. Hasta que sus miradas se cruzaron, Discord se encontraba agotado, tres días sin dormir bien no eran exactamente el estilo de vida que llevaba. Pero en cierta medida, habían valido la pena cada una de las circunstancias en las cuales había decidido sacrificar su descanso.
En esta ocasión, las cosas eran confusas, dentro de él sabía que no valía la pena haber hecho tantas cosas por la princesa, no obstante, en otra zona algo le decía que sí. Pero no estaba para discutir cosas sin importancia como esa.
- ¿Cuál es la última?
- Una historia para dormir.
- Bien, ¿Cuál me contarás?
Varias líneas de color verde se aparecían, la habitación comenzaba a desvanecerse, Celestia, con la típica curiosidad que le provocaba observar la burbuja de realidad y las imágenes que generaba.
Bueno mis estimados lectores, espero que les haya gustado el capítulo y si no bueno, serán recompensados en los futuros capítulos.
Gracias por sus reviws, comentarios, como les digan y a propósito, respondiendo a una pregunta, lo que le pasará a Argos o lo que le paso (saben a lo que me refiero) será develado en los próximos capítulos (respuesta muy evidente, lo sé XD) bien, hasta el próximo capítulo.