Proyecto Salvación Planeta 72831
Chapter 13: Capitulo 11: Una misión peligrosa
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Capítulo 11.
Hola a todos los que aun leen esta historia. La verdad no sé si me tarde mucho en hacer esta parte o no, pero no importa, lo que sí es importante es que al fin termine el capítulo 11. Espero que les guste.
En este momento Tsuki y Alexander estaban en un serio problema. Lo que parecía ser una misión algo aburrida, se había convertido en una situación muy delicada. Un Extraño humo se había apoderado de helicóptero que se dirigía a un refugio a reabastecerlos de comida, y ahora estaban rodeados por cinco soldados que quien sabe si el humo había hecho un cambio en su cuerpo.
Lo primero que pensaron ambos soldados es alcanzar sus armas, pues era la única cosa a bordo que les podía ser de utilidad.
Los solados se lanzaron hacia el arma más cercana que pudieron encontrar, pero no habían podido correr mucho, pues los soldados poseídos se habían acercado de forma rápida a ambos soldados, dispuestos a no dejarlos ir.
Alexander había alcanzado a tomar una pistola, pues estaba más cerca del estante donde se encontraban las armas, pero el gusto no le duro mucho, pues en ese instante recibió un golpe en el estómago, propinado por Manuel, después llego Bob, de una forma inhumanamente rápida y le do un golpe en la cara, mandándolo a volar unos metros hacia el suelo.
A Tsuki no le iba mejor, pues en el momento que corrió hacia las armas fue sostenida del cuello por Carlos, quien comenzó a apretar lentamente su cuello mientras ella le daba patadas en el estómago, pero era inútil, el Piloto no la soltaba y lentamente comenzaba a asfixiarla.
Alexander, tirado en el suelo, logro ver a su compañera luchando para con el Piloto, así que hiso lo primero que se le ocurrió, apuntar su arma a la muñeca del soldado y disparar lo más rápido que puso, un segundo después de que Manuel se pusiera frente a él y pateara la arma. La bala había seguido su curso y le había dado en la muñeca, haciendo que el piloto la soltara y se hiciera hacia atrás.
Sin duda sería imposible vencerlos, y más con la tremenda fuerza y rapidez que tenían. Pero en ese momento se le ocurrió una idea, tan vez sería la única manera de vencer a sus compañeros.
Alexander – ¡Toma los controles! – Le grito a su compañera, mirándola a los ojos.
Tsuki ni se molestó en replicar, pues sabía la situación en la que estaban. La soldado miro la puerta del cuarto de control, para salir corriendo e introducirse en ella y sellara. Los poseídos Bob y Andrew se pusieron enfrente de la puerta y comenzaron a golpearla, pero era inútil, no tenían la fuerza para derribarla.
Manuel miro a Alexander a los ojos y lo tomo del cuello y comenzó a estrujarlo lentamente.
Manuel – Debería matarte… pero nos eres útil – Le dijo, con el mismo tono serio, lo tomo con más fuerza y lo lanzo unos metros hacia el suelo.
Alexander comenzó a toser mientras luchaba por recuperar el aliento, mientras intentaba pensar alguna forma rápida de eliminarlos, miro hacia arriba, y alado de él estaba el botón para abrir la compuerta del helicóptero.
Mientras tanto, en la cabina de control.
Tsuki apenas se había sentado enfrente de los controles del helicóptero y comenzó a dirigirse a cualquier lugar lejos del Área 51 y de cualquier bunker, pues, obviamente era peligroso llevar a soldados poseídos a un lugar lleno de civiles.
Tsuki Yami – ¿Qué hago?... no puedo quedarme aquí y esperar a que maten a Alexander… y si voy lo mataran y me mataran a mí –
La soldado intentaba buscar una forma de salvar a su compañero, pero no se le ocurría nada.
Tsuki miro un monitor, donde se veía a Alexander tirado, cerca de la compuerta principal del helicóptero, lo siguiente que vio fue a Alexander mirando la cámara mientras apuntaba hacia arriba.
Tsuki Yami - ¿Qué?... ¿Hacia arriba?... ohhh – Por fin logro entender el plan de su compañero.
Volviendo con Alexander.
Alexander se paró rápidamente, miro la cámara y apunto hacia el techo, Esperando a que su compañera le entendería. Alexander acerco rápidamente su mano al botón y lo presiono. La puerta principal comenzó a abrirse lentamente, acto seguido la hélice trasera del helicóptero se apagó, ocasionando que la parte inferior de la nave descendiera, llevándose con ella a los tres soldados infectados y al copiloto.
Alexander apenas se sostenía con una mano de una barra de metal, pero con el piloto Carlos sosteniéndolo de la pierna para evitar caerse a una muerte segura. A Alexander se le dificultaba mantener el agarre, y sus dedos lentamente comenzaban a ceder por el peso. El soldado pateaba la mano del piloto con mucha fuerza, esperando a que en cualquier momento se soltara, pero era inútil, entre más pateaba más apretaba el poseído piloto.
Mientras Alexander luchaba para no caerse.
En la cabina de control del helicóptero. Tsuki miraba a ambos soldados desde la pantalla de una cámara, con una gran preocupación, pues en cualquier momento su compañero y amigo podría soltarse, y sin duda no lo permitiría. Tsuki rápidamente hiso funcionar la hélice apagada, a la vez que cerraba la escotilla abierta. El helicóptero volviera a su posición normal, seguro de un gran estruendo, eso le había indicado que su compañero seguía en la nave… pero por poco.
Segundos antes.
Alexander se sostenía con todas sus fuerzas de una barra de metal, situada en un costado del helicóptero, pero ya no podía aguantar mucho más, era demasiado peso para que un solo hombre pudiera aguantar. El soldado cerró los ojos, sabiendo lo que tenía que hacer. No lo pensó dos veces y se soltó de la barra, viendo como caía lentamente, pues, ya saben lo que dicen, todo se ve lento cuando estas a punto de morir, tal vez eran cierto.
Pero antes de que callera caer a una muerte segura la escotilla se cerró, haciendo que él y el piloto chocaran en la gran puerta, pero el piloto no corrió con mucha suerte, pues Alexander lo había golpeado en el rostro por error, ya que, al caer su pie había chocado con él y había rompiendo el casco que le proporcionaba aire y golpeándolo.
El soldado se levantó del suelo agitado y con el corazón en la mano, y no era para menos, había estado a punto de morir.
Alexander – "Agitado" No puede ser… creí que moriría… – Susurro para sí mismo, posando su mano en su corazón.
En ese momento llego Tuki, obviamente preocupada por su compañero.
Tsuki Yami – Alexander, ¿Estas bien? – Le pregunto, con un tono de preocupación en su voz.
Alexander – Si, no te preocupes… aunque… no puedo decir lo mismo de el – Apunto al inconsciente Piloto.
Tsuki Yami – Si… será mejor que lo aseguremos… por si acaso – Le comento a su compañero, el cual estuvo de acuerdo.
Alexander saco de un costado de su traje un cilindro y se lo entrego a Tsuki. La soldado puso el cilindro en el pecho del inconsciente soldado y presiono un botón, al presionarlo el cilindro se abrió un poco y cuatro cables de acero lo rodearon.
Alexander – Y… ¿Ahora qué?... regresamos al Área 51 o dejamos las provisiones – Le planteo a su compañera.
Tsuki Yami – Buena pregunta… es peligroso ir al bunker con el piloto poseído… pero necesitan la comida… – Tsuki comenzó a morderse una uña mientras pensaba, era algo difícil de decidir - ¿Cómo está tu pierna? –
Alexander – Rota – Contesto, haciendo una pequeña mueca de dolor al tocarla un poco.
Tsuki Yami – Lo mejor sería ir al bunker, está mucho más cerca, además podremos aprovechar y curar tu pierna –
Alexander – En eso tienes razón – Concordó con ella, mientras lentamente se paraba y se sentaba.
Tsuki Yami – Tu relájate, yo piloteare – Le sugirió, después de dirigirse a pilotear el helicóptero.
El resto del viaje fue bastante tranquilo, el piloto siguió inconsciente mientras Alexander descansaba la pierna. Tsuki piloteo tranquilamente hacia el bunker.
Después de unos 20 minutos de pilotear, ya que, estaban relativamente cerca, llegaron al bunker donde necesitaban las provisione.
Tsuki comenzó a descender a varios metros de una montaña, al descender completamente el suelo debajo del helicóptero comenzó a descender. Luego de descender unos metros el techo se cerro y una serie de luces se encendieron, revelando una plataforma que descendía en diagonal. Cuando la plataforma termino de descender el helicóptero se encontraba en un cuarto totalmente blanco.
La abertura del túnel se cerró, haciendo que el cuarto se quedara herméticamente cerrada. Un líquido comenzó a salir de las paredes y baño totalmente el helicóptero. Cuando la esterilización termino la plataforma comenzó a moverse, al igual que el helicóptero.
Momentos después.
Almacén del Bunker No.7.
En el almacén de provisiones del bunker No.7 el helicóptero que transportaba la comida, el agua y lo demás, al fin había llegado… aunque solo tres miembros del equipo habían llegado.
La compuerta trasera del helicóptero comenzó a abrirse y de él salió Tsuki, la cual ayudaba a Alexander a caminar.
Encargado – Wow, wow, wow, ¿Qué les paso chicos? – Se notaba la preocupación que tenía el encargado.
Alexander – Un día muy duro, eso fue lo que paso – Le respondió al tipo, el cual no pasaba de los 40.
Tsuki Yami – Podrías ayudarme a llevarlo a la enfermería –
Encargado – Claro – Le respondió, mientras se ponía del lado contrario del que estaba Tsuki y lo ayudaba a caminar.
Una hora después.
Alexander y Tsuki estaban enfrente del helicóptero, apunto de regresar al Área 51. El soldado tenía la pierna enyesada, aunque no se le notaba mucho, ya que tenía el traje puesto. Tsuki lo sostenía del hombro.
Encargado – Gracias por las provisiones, oh y suerte con su viaje – Se despidió, con una sonrisa cálida.
Los soldados se despidieron del encargado, subieron al helicóptero y cerraron la puerta trasera. Unos segundos después la plataforma comenzó a retroceder, pasando por "El cuarto de esterilización" después subieron todo el trayecto hasta que la nave estaba afuera.
Tsuki Yami – Vigila al Piloto mientras yo controlo esta cosa – Hablo por un micrófono.
Alexander volteo a ver a la cámara y levanto su pulgar, en señal de aprobación.
Media hora después.
El helicóptero iba a mitad de camino cuando el piloto comenzó a despertar.
Piloto – "Quejido" ¿Dónde… dónde estoy?... ¿Alexander?... ¿Por qué estoy atado? – Apenas logro decir con el dolor de cabeza.
Alexander – ¡Ja! ¿Me crees estúpido? – Le dijo, con un tono de burla.
Piloto - ¿Qué?... no sé de qué hablas… Alexander sac... ¡Haaaa! – No pudo terminar la frase, pues comenzó a gritar de dolor mientras sus ojos se volvían totalmente negros.
Alexander – Wow, wow, wow, ¿Estas bien? – Le pregunto, con un tono de preocupación en su voz.
Piloto – Vaya que es resistente… pero no lo suficiente – Pronuncio, de forma seria mientras intentaba liberarse, pero en vez de aflojar el agarre, la extraña maquina comenzó a apretarlo aún más.
Alexander – Ya te diste cuenta que es inútil, entre más luches más te aprieta –
Piloto – Si… no te preocupes, no iré a ningún lado – Termino de decir y solo cerro los ojos, como si no le importara.
Esas palabras preocuparon mucho al soldado, y más porque parecía que no le importaba. Solo podía esperar a llegar al Área 51 y encerrarlo.
Lo que no sabían era que el poseído soldado quería eso, llegar al Área 51, pues todo era parte del plan… más o menos, el verdadero plan era poseer a todos los soldados a bordo de la nave para después dirigirse de vuelta, y así infectar a todos los soldados y científicos que Vivian ahí, y así usar la fuerza y el armamento de los humanos para atacar Equestria.
Veinte minutos después.
El helicóptero descendía rápidamente por un túnel, y Alexander parecía preocupado. Las palabras que había dicho el poseído soldado no se le borraban de la mente… parecía… que no le importaba… más bien, parecía que era exactamente lo que quería, y eso sin duda era algo muy extraño.
Tsuki Yami – Emm… Alexander… ¿Estas bien?... te vez algo preocupado – Le pregunto a su compañero, pues no sabía disimular su preocupación.
Alexander – Un poco… es que… me preocupa el piloto, pareciera que no le importa ser capturado… al contrario, parece que es lo que quería – Le confeso su preocupación.
Tsuki Yami – Si… te entiendo, entonces, ¿Crees que es ese su plan? Ser capturado –
Alexander – Algo así, es más como si lo que quería es infectarnos con ese humo… pero ¿Para qué? –
Tsuki Yami – Sea lo que sea, tenemos que encerarlo antes de que haga algo raro –
Alexander solo asintió, pues era lo único que podían hacer en ese momento, encerrarlo y esperar a que no hiciera nada malo o extraño.
Espero que les haya gustado este capítulo, les informo que de ahora en adelante comenzare a escribir dos historias a la vez, esta "Proyecto Salvación Planeta 72831" y uno que he ha estado en mi mente desde hace varios meses, y que está a medias, "El Legado de Star Swirl", y como es obvio, también escribiré más seguido, para que no me tarde el doble de tiempo en escribir los capítulos. ¿Qué les parecería? Por favor dejen sus Reviews diciéndome que les parece. Sin otra cosa que anunciar. Nos leemos luego.