Proyecto Salvación Planeta 72831.

Capítulo 8.

Hola usuarios y no usuarios de Fanfiction, aquí les tengo el capítulo 8 de este humilde Fanfic. La verdad no tengo idea si lo hice más rápido que los demás o no, pero el caso es que aquí esta. Espero que lo disfruten.

Una soldado caminaba por los pasillos del nivel –C del Área 51. Científicos vistiendo batas blancas pasaban alado de ella, cargando tubos burbujeantes y objetos extraños, mientras la soldado intentaba procesar lo que acababa de pasar. Una criatura de otra dimensión o planeta había logrado penetrado el portal, muchos soldados habían muerto intentando detenerla, otra creatura extraña, al parecer de la misma especie, había penetrado con intenciones de detenerla, pero los único que había logrado era distraer a la princesa mientras Alexander se encargaba de ella, el portal había recibido daños en la batalla, Twilight logro entrar dos segundos antes de que el portal se cerrara, pero lo más extraño es la escena del abrazo por parte del soldado.

Tsuki Yami – Jeje, ya me imagino, Alexander y Twilight besándose… pensándolo bien… hacen buena pareja… aunque ella es un cabaña con rostro extrañamente tierno –

Tsuki doblo a la derecha en un pasillo y en la puerta de la izquierda encontró la habitación del soldado, la Habitación 243, pero la puerta de la habitación estaba ligeramente abierta, lo cual era extraño, pues desde que Tsuki conocía a Alexander, el soldado era muy cuidadoso con sus cosas, tenía un extraño temor de que alguien se robaría sus cosas o algo así. Tsuki abrió lentamente la puerta de la habitación de Alexander, temiendo que un intruso se hubiera metido a fisgonear o algo por el estilo. El rostro de Tsuki denoto una gran sorpresa al ver esa melosa escena, frente a ella estaba Alexander, el cual estaba besando a Twilight, Twilight estaba sentada en sus piernas de una forma muy tierna, ambos se abrasaban fuertemente y tenían los ojos cerrados.

Alexander abrasaba de forma muy tierna a Twilight, su sentido del orden y la cordura se había tirado por la ventana… aunque no hubiera ventanas en esa habitación… mientras sus labios se negaban a separase de los labios de Twilight, la mente de la Alicornio estaba igual de confundida que la del soldado, pero al igual que él, tampoco quera romper ese beso, pero sus cuerpos necesitaban oxígeno para vivir, así que sus bocas se separaron y ambos se miraron a los ojos, Twilight desvió la mirada hacia la puerta y ahí vio a la compañera de Alexander.

Twilight – ¡¿Tsuki?! – Dijo, de forma muy alarmada al percatarse de que alguien los había visto.

Alexander volteo rápidamente, y lo que vio fue a Tsuki, con una ceja arqueada y una cara de "Whaaaat"

Tsuki Yami – Lo siento por arruinar el… hermoso momento… pero el jefe te busca… y también a ti – Dijo, apuntando a Twilight, que volteaba hacia el lado contrario, presa de la vergüenza.

Alexander – En un momento vamos… Tsuki – Finalizo y le hiso una señal para que se retirara.

Tsuki Yami – Oh… si, si, ya entendí, hago un mal tercio… bueno, no te tardes mucho – Finalizo y cerró la puerta.

Twilight – No puede ser… que vergüenza – Exclamo, tapándose la cara con sus cascos.

Alexander – Si… estuvo feo… – El soldado retiro gentilmente los cascos de la cara de Twilght y le dio un fugaz beso – No fue tan malo, mejor vamos, no quiero hacer esperar al Jefe –

Twilight asintió, aun apenada por lo que había pasado. Alexander se paró de la cama, se puso unos calcetines y unas botas y junto con Twilight salieron de la habitación de Alexander.

Ambos caminaron por un pasillo hasta que se encontraron con Tsuki al final del mismo, al encontrarse los tres caminaron hacia la Celda 0. Un pesado silencio reino en los dos soldados y la equina, todos sumergidos en sus propios pensamientos, Alexander pensando el porqué de la llamada del Jefe del proyecto, Tsuki sorprendida y feliz de la situación que había entre su compañero y Twilight, pues ambos hacían muy buena pareja, y Twilight muriéndose de la vergüenza, pues había sido su primer beso y alguien los había visto, sin duda quería que la tierra se la tragara.

Twilight – Emmm… Tsuki… lo que paso hace un momento… – Twilight no pudo terminar, pues Tsuki la interrumpió.

Tsuki Yami – Vamos Twilight, no me tienes que explicar nada, no es malo demostrarle a alguien que lo amas, además, hacen bonita pareja - Le dijo, con una sonrisa calida – Y tu Alexander – El soldado volteo a ver a su compañera, un poco confundido por haber interrumpido sus pensamientos – No sabía que te gustara la Zoofilia… pervertido – Le dijo, con una mirada picara.

Alexander – ¡Hey! Yo no soy Zoofilico… además… no cuenta si es una creatura inteligente –

Tsuki Yami – Si… Claro – Le contesto, con una mirada que decía "Si campeón, como digas"

Alexander – No me crees… ¿Verdad? –

Tsuki Yami – Claro que no… pero que importa, el amor no tiene edad… ni raza… u especie… sé que suena muy cursi pero en parte es verdad, si te gusta… te felicito, y no te aproveches de ella para hacer realidad tus pervertidas fantasías – Comento entre risas.

Alexander – ¡Tsuki! ¿Me vez cara de pervertido?... mejor no me respondas – Mientras ellos bromeaban, Twilight se sentía muy incómoda por la plática, el cual Alexander noto – Oh lo siento, te estoy poniendo incomoda, no te lo tomes a mal, solo son bromas –

Twilight – No hay problema… y… que paso con su portal, cuando entre vi que se había apagado – Intento cambiar de tema.

Tsuki Yami – Oh, eso, es que la tecnología que usamos para que ese portal funcione es muy delicada y por la batalla el portal sufrió daños, tuviste suerte de lograr entrar segundos antes de que se cerrara – Le explico Tsuki a Twilight.

Twilight – Ohh… y ¿Qué hubiera pasado si hubiera entrado exactamente cuando el portal se cerrara? –

Tsuki Yami – Mmm… tal vez… en el mejor de los casos habrías sido expulsada del portal, en el peor…. Tu cuerpo se hubiera partido por la mitad por lo rápido que el portal se cerró –

Twilight – Wow… que bueno que no paso – En ese momento un escalofrió recorrió la columna de la Alicornio al imaginarse a ella partida por la mitad.

Giraron a la izquierda y atravesaron una puerta, detrás de ella estaban muchas celdas, cada una con un numero en la parte superior, caminaron por un largo pasillo, lleno de puertas de acero hasta que llegaron a una que parecía más gruesa que las demás, algo parecido a un proyector apareció enfrente, detrás y a los costados de ellos y un láser verde los analizo de arriba hacia abajo, después de analizarlos por un momento una voz femenina dijo.

Sistema de Seguridad – Soldados Alexander Carnegie Young y Tsuki Yami… forma de vida no identificada… tiene veinte segundos para identificarse –

Twilight retrocedió un poco, al escuchar esa misteriosa voz, que parecía no tener dueño, Tsuki le puso la mano en la cabeza para tranquilizarla.

Tsuki Yami – Forma de vida no hostil, permitir acceso a la Celda 0 – Dijo, con una voz firme.

Sistema de Seguridad – Por favor identifíquese –

Twilight se estaba poniendo muy nerviosa al escuchar esa voz, pero esta vez Alexander la tranquilizo.

Alexander – "Susurro" Di tu nombre, tu edad y si te pregunta, tu raza – Le sugirió a Twilight, la cual asintió.

Twilight – Emm… Soy… Twilight Sparkle – Contesto, con voz temerosa.

Sistema de Seguridad – Por favor diga su edad y su raza –

Twilight – Tengo… 21 años… mi raza es Equina –

La máquina se quedó callada por unos momentos y finalizo diciendo "Datos guardados. Acceso concedido" y los seguros de la puerta se abrieron.

Twilight, Alexander y Tsuki entraron a la habitación, la cuan tenía un color blanco puro, las paredes y el techo tenían unos triángulos que sobresalían ligeramente. Al fondo de la habitación estaba el Jefe del Proyecto Salvación, y enfrente de este había una esfera de un tamaño considerable, la esfera irradiaba una luz color azul claro, en el interior estaba la princesa Celestia, la cual parecía dómida. El ambiente que había en esa habitación era extraño, se sentía una presencia sumamente maligna que rodeaba todo, pero también una energía que irradiaba bondad, que te tranquilizaba de solo sentirla, y todos pudieron notarla.

Jefe – Tsuki Yami, Alexander Carnegie, señorita Twilight acérquense por favor –

Los tres individuos se acercaron un poco confundidos por la actitud del Jefe.

Alexander – Señor, ya estoy aquí, ¿Para qué me necesitaba? –

Jefe – Necesitaba más a la Señorita Twilight, pero quiero que tú y Yami estén presentes –

Twilight – Emmm… Para que me necesita – Respondió, un poco nerviosa.

Jefe – Estoy al tanto de lo especial que es la princesa para usted, y al contrario de lo que le pudiera decir, nosotros no somos creaturas 100% hostiles, que matan a cuanta creatura que se ponga en su paso… lo admito… antes fuimos así, esa fue una era en la que la raza humana estaba muy, muy dividida, una era en la que no podíamos confiar en nadie, una era que duro siglos y en la que murió tanta gente inocente que sería casi imposible saber cuánta, pero ya no somos así, la gente cambia, y nosotros cambiamos para bien… pero en qué momento, nuestro planeta y todos los que lo habitan están en peligro. No somos animales salvajes Señorita Twilight, así que… si sabe de una forma en la que su mentora y gobernante de su mundo pueda liberarse de ese mal que la aprisiona, entonces tiene toda la libertad de hacerlo… si no… tendremos que tomar medidas drásticas… y tal vez crueles para usted y su raza –

En ese momento una de tención inundo la habitación y todos los ojos se posicionaron en la Alicornio. Lo que ese tipo había dicho…. Y la forma en la que lo dijo… era como si conociera el dolor que ella sentía al ver a su 2da madre encerrada en esa prisión, incapaz de salvarla, era como si le pusiera la mano en un hombro y le dijera que todo saldría bien…aunque no fuera verdad… pero ella no se rendiría, tal vez habría una forma… en la biblioteca del Imperio de Cristal, o tal vez la del viejo castillo de las princesas, pues ya se había leído los libros de la biblioteca de Canterlot, cada sección la había leído y la recordaba como si la hubiera acabado de leer, y no había algo para poder eliminar o al menos purificar a Celestia, pues con los Elementos de la Armonía en su respectivo árbol, tendría que recurrir a la magia tradicional… a la de sus amigas… todas, hasta Luna, Cadance y su hermano Shining.

Twilight – Tal vez haya una manera… en mi mundo, Equestria, hay innumerables libros con antiguos hechizos, tal vez haya uno que nos ayude… y si no… conozco a alguien que puede hacerlo – Le respondió, pensando en una sola persona que podría hace lo que quisiera con solo chasquear los dedos… Discord… pero tal vez se reusaría, prefería hacerlo sin su ayuda… pero si hacía faltas se lo pediría.

Jefe – Si ese es el caso entonces tienes el apoyo de la raza humana, pero debo recordarte de que tenemos los días contados, así que te pediremos que seas rápida en tu búsqueda –

Twilight – Claro, seré lo más rápida posible… pero… sería más rápido si el soldado Alexander me acompañara… además… el camino a mi hogar es muy peligroso… me sentiría más segura… si… si el me acompañar – Le sugirió al Jefe del proyecto, con una sonrisa nerviosa.

En ese momento Tsuki le dio un golpecito con el codo a Alexander, mientras le dirigía una mirada picara, lo cual fue devuelta por una mirada que decía "¿Terminaste de burlarte?".

Jefe – Si Alexander está de acuerdo… entonces no veo porque no ponerlo a su disposición.

Y así todas las miradas se posaron en Alexander, esperando su respuesta, y la verdad no tenía mucha opción, si decía que no quedaría como un egoísta ante su superior, además de verse muy mal al negarse.

Alexander – Claro señor, será un placer acompañarla – Respondió, dedicándole una cálida sonrisa a Twilight.

Tsuki Yami – Pero… hay un problema señor… el portal se dañó en la batalla, los científicos tardaran un tiempo en repararla –

Jefe – Uhhh… eso es un problema… Supongo que no le molesta quedarse en La Tierra hasta qué la maquina esta reparada… ¿O sí? –

Twilight – No… no se preocupe – Respondió, con una ligera sonrisa en el rostro, estaría con Alexander por un tiempo indefinido además del tiempo que pasarían en Everfree… lo que no la tenía muy contenta… ya que… es EverFree, ¿A quién le gustaría estar ahí? Pero valdrá la pena… o al menos es lo que Twilight esperaba.

Jefe – No se preocupe Señorita Twilight, en unos momentos le asignaremos una habitación para que se quede en estas instalaciones – Le informo a la Alicornio, con la voz seria que usaba habitualmente.

Twilight – Emm… si no le molesta… podría… quédame en la misma habitación que Alexander – Le pregunto al Jefe, un poco avergonzada por la petición.

Jefe – Mmm… con que de eso se trata (N.A – No es lo que ustedes piensan… ¡Pervertidos!) – Dijo, embonando una pequeña sonrisa, pues sabía por qué… y la verdad… era un poco obvio – Eso le tendría que preguntar a Alexander Señorita - Le respondió con una divertida sonrisa – Muy bien… pueden retirarse –

Los soldados respondieron con un "Si Señor" y se fueron de la Celda 0 junto con Twilight.

Los soldados y la Alicornio salieron de la Celda 0 y comenzaron a caminar por los pacillos de las instalaciones, sumergidos en sus propios asuntos, Tsuki preguntándose como estarían sus padres, si la extrañan y cosas por el estilo, Alexander intentando lidiar con esa voz que le decía "Lo que hiciste con Twilight está muy mal… ¡es un caballo con alas y cuerno!" mientras se respondía a si mismo que solo había sido un beso… no era algo malo… ¿O acaso lo era? Y Twilight estaba un poco apenada por lo que había dicho… ¿Qué le estaba pasando?, ella definitivamente no era así, siempre pensaba dos veces antes de decir las cosas, pero en esta ocasión, su mente era un completo caos, no lograba pensar las palabras correctas, así que decía lo primero que se le venía a la mente, y lo peor… es que ella sabía por qué su mente no podía encontrar la paz… o más bien… por quien.

No podía dejar de estar nerviosa, desde que había tenido ese arranque de histeria y había ido corriendo a los brazos de Alexander, como una potrilla asustada, su mente no dejaba de darle vueltas al asunto, pero no encontraba lógica, ella era una yegua calculadora y fría en situaciones de suma emergencia, pero esta vez no era así, era como si no fuera ella, en vez de ser "Twilight, la líder nata, la que podía arreglar cualquier cosa"… ya no existía y ahora estaba "Twilight, la yegua temerosa, que necesitaba resguardarse en los brazos de alguien para estar bien" y a ella no le agradaba mucho… bueno… tal vez le gustaba un poco… sentir el calor del soldado, si respiración en su cuello y escuchar esas hermosas palabras que hacían que su corazón se derritiera y su alma encontrara la paz… a quien podía engañar, le gustaba todo eso, no solo un poco, le encantaba sentir que había un hombro que podía usar para desahogarse… pero no solo le gustaba eso, el reciente beso que se habían dado… había sido otra cosa, había sido magnifico, era como si el tiempo se hubiera detenido a su alrededor y solo existieran ellos dos. Haber sentido los sabios de Alexander rosar contra los suyos… simplemente no la dejo pensar con claridad… y algo era seguro, los días que Twilight pasar ahí… seguiría sin pensar con claridad, y sus sentimientos tomarían control de su cuerpo.

Alexander, Tsuki y Twilight seguían caminando con los pacillos del Área 51, pensando en cosas personales, pero una en especial estaba armándose de valor para preguntarle algo bastante penoso, que muy difícilmente tendrá una excusa medianamente creíble. Twilight inhalo profundo y se decidió a preguntar.

Twilight – Emm… Alexander… – Llamo al soldado, intentando alejar los nervios de ella, pero sin mucho éxito.

Alexander – ¿Si Twilight? – Le contesto a Twilight, con una dulce sonrisa.

Twilight – Podría… ¿Podría dormir en tu habitación… hasta que pueda volver a Equestria?... digo… si no te molesta – Logro preguntar, pero sus mejillas se tornaron de un rojo intenso, que se podía notar aunque tuviera pelaje.

Alexander arqueo una ceja, ¿Acaso era en serio lo que la Alicornio le estaba preguntando?, le estaba pidiendo permiso para dormir en su habitación hasta que pudiera regresar… su mente ya estaba muy confundida, y si ella dormía en su mismo cuarto… entonces su mente explotaría, y "Eso" que le impedía rodear a la Alicornio y besarla simplemente cedería, y eso sería muy malo… ¿No?, ¿O seria todo lo contrario?

Twilight noto que Alexander se había quedado callado y una profunda tristeza la inundo, se dio cuenta de que había sido una terrible idea haberle preguntado algo tan penoso.

Alexander noto la profunda tristeza que Twilight tenía, la cual se le notaba en los ojos, y supo que se había quedado callado mucho tiempo, ella debió haber traducido su silencio cono un "Claro que no" o un "Acaso estás loca", sin duda solo podía hacer una cosa para arreglarlo.

Alexander – Claro… no me molesta para nada… puedes dormir en mi habitación – Le respondió, dándole una cálida sonrisa, pero al ver que no había funcionado mucho opto por algo más, el soldado se acercó a ella y le dio un fugaz beso en los labios, provocando que la Alicornio se sonrojara aún más, pero una sonrisa se dibujó en sus labios.

Mientras tanto, Tsuki estaba ahí, en una de las situaciones más incomodas que podía experimentar, solo podía quedarse parada, y esperar a que terminaran.

Tsuki Yami – Emm… creo que mejor me voy y los dejos solo… o y Alexander – Llamo la atención del soldado.

Alexander – ¿Si? - Le respondió, con intriga y rogando que no fuera una broma.

Tsuki Yami – Se gentil con ella – Le contesto, con una sonrisa pervertida – Si sabes a lo que me refiero… Pervertido – Finalizo con una divertida risa y se fue alejo de la pareja.

Alexander – Como te gusta molestar, he Tsuki – Le contesto antes de que se alejara.

Tsuki Yami – Ya me conoces – Fue lo único que dijo y se fue con dirección a la habitación del portal.

Mientras esa escena había transcurrido, Twilight se había puesto más avergonzada, pues se había hecho una imagen mental muy… adecente, y apenas podía mantenerse relajada alado de Alexander.

Alexander – Lo siento Twilight, desde que la conozco ella siempre hace ese tipo de bromas, supongo que le divierte poner nervioso a las personas – Le comento a Twilight, intentando crear una conversación.

Twilight – No te preocupes… pero cuéntame, ¿Tienes familia? – Le pregunto al soldado, para continuar con la conversación.

Alexander – Si, mis padres y una hermana, Alexa, tiene 14 años –

Twilight – ¿En serio?, que bien –

Alexander – Si, ella siempre ha sido muy unida a mí, desde que entro a la primaria me pedía que la llevara y la trajinera, le ayudaba con todos sus problemas y la defendía de los que la molestaba, con el tiempo nos volvimos muy unidos – Le contó a Twilight con una sonrisa en el rostro.

Twilight – Ohh que tierno, ¿Y cómo ha estado ella? –

Alexander – No sé, apenas y logro hablar con ella una o dos veces a la semana, a veces ni eso – Respondió, con un tono de tristeza en su voz.

Twilight – Oh que pena, ¿Por qué no puedes hablar con ella más seguido? –

Alexander – Es que, aquí hay reglas muy estrictas, no podemos tener contacto con nadie del exterior, por eso es difícil burlar la seguridad de aquí, pero cada vez que hablo con ella lo aprovechamos, hablamos largo tiempo, de lo nuevo que pasa en su vida, y todo eso –

Twilight – Al menos estas en contacto con ella –

Alexander – Si… supongo que si –

Ambos habían charlado tanto que habían llegado a la habitación de Alexander y después de ingresar la contraseña ambos entraron al cuarto.

Twilight – Oh, una duda, ¿Se supone que esta es una instalación subterránea? –

Alexander – Eso es correcto, si estuviera en la superficie, los químicos que aquí se usan se calentarían rápidamente y podrían estallar, por eso es subterránea – Le explico a la Alicornio.

Twilight – Mmm… ya veo… pero, ¿Cómo saben si es de día o de noche? –

Alexander – las instalaciones tienen un Toque de Queda, nos dice cuando es el tiempo para dormir, el cual es a las 10:30 PM –

Twilight – Oh… ya entiendo –

Alexander – Si… de hecho son las 3:46 PM, así que todavía falta para eso – Le explico a Twilght mientras se sentaba en la cama.

La Alicornio hiso lo mismo y se sentó a lado del soldado… demasiado cerca de él, lo cual fue notado por el soldad.

En ese momento un silencio inundo la habitación, ninguno sabia de que hablar. El soldado comenzó a ponerse nervioso, su cuerpo y su mente no le respondían bien… otra vez, aun seguía pensando que estaba más, pero se estaba comenzando a cansar de todo eso, de sentirse como un niño con su primera novia, ¿Por qué no simplemente se dejaba llevar?, nunca le había importado lo que la gente pudiera decir de él, porque le tendría que importar ahora.

Alexander decidió ignorar por completo esa voz que le decía que estaba mal, que era antinatural etc, etc,

Alexander – Emm… ¿Twilight? – Llamo la atención de la Alicornio.

Twilight – Emm… si Alexander – Le respondió, con un tono de nerviosismo en su voz.

Alexander no respondió, no hubo necesidad de hacerlo, solo se acercó a ella y presiono sus labios contra los suaves y cálidos labios de Twilight. La Alicorio abrió los ojos como dos enormes platos por la impresión, pero lentamente cerro los ojos y se fue dejando llevar por ese tierno momento.

Se notaba que ambos se habían rendido con el tema de "¿Estará bien lo que estoy haciendo?" Y solo se dejarían llevar a lo largo de la estancia de Twilight en la tierra.

Espero que haya sido de su agrado, estos capítulos los siento más cursis :P y siento que acabo de alargar la historia… y como siempre… ni me di cuenta, pero bueno… espero sus Reviews. Nos leemos luego.