En marcha!...

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-Hellcat, yo sé que amas a doña white Winter, ignoro si tanto como yo, pero la amas. Puesto que un duelo entre nosotros es imposible, resolvámonos a encomendar nuestra suerte en sus manos. Vamos en su busca, que ella decida con libre albedrío cuál ha de ser el dichoso, cuál el infeliz. Su decisión será respetada por ambos, y el que no merezca sus favores, mañana saldrá con el Alicornio, e irá a buscar el consuelo del olvido en la agitación de la guerra.

-Pues que tú lo quieres, sea – contestó, Y los dos amigos se dirigieron hacia la catedral, en cuya plaza, y en un palacio habitaba doña white Winter, La pony terrestre causante del duelo, Estaba a punto de rayar el alba, y como los hermanos marchaban al otro día con el ejército real, no era imposible que en las primeras horas de la mañana pudiesen penetrar en su palacio.

Animados con esta esperanza, llegaron, en fin, al pie de la gótica torre del templo; mas al llegar a aquel punto un ruido particular llamó su atención, y deteniéndose en uno de los ángulos, ocultos entre la sombra de los altos machones que flaquean los muros, vieron, no sin grande asombro, abrirse el balcón del palacio de su dama, aparecer en él un hombre que se deslizó hasta el suelo, al parecer con la ayuda de una cuerda, y, por último, una forma blanca, white winter, sin duda, que, inclinándose sobre el calado antepecho, cambió algunas tiernas frases de despedida con su misterioso galán.

El primer movimiento de los dos jóvenes fue llevar sus pezuñas al puño de sus espadas, pero, deteniéndose como heridos de una idea súbita, volvieron los ojos a mirarse, y se hubieron de encontrar con una cara de asombro, tan cómica, que ambos prorrumpieron en una ruidosa carcajada, carcajada que, repitiéndose de eco en eco en el silencio de la noche, resonó en toda la plaza y llegó hasta el palacio

-no es posible

-y por esto estábamos por matarnos hace unas horas – Al oírla, la forma blanca desapareció del balcón, se escuchó el ruido de las puertas, que se cerraron con violencia, y todo volvió a quedar en silencio.

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Al día siguiente, Todos permanecieron en la plaza esperando al Alicornio que no tardaba en venir en su busca para cabalgar al horizonte en busca de la gloriosa victoria, pero Aragorn estaba en otro asunto aún más importante para él, al final de una pérgola* Esperaba pacientemente vestido con su capucha bajada

-¿estás seguro de esto Aragorn? – expreso Faramir, pero Aragorn no respondió, viendo a lo lejos a Celestia acompañada por Candace, y Silverware, portando un sencillo vestido blanco, a la vez que Serena arrojaba pétalos de rosas delante de ella, camino con decisión hasta quedar uno al lado del otro, frente a ellos un anciano pony azul claro de crin verde agua hablo

-queridos hermano estamos aquí para unir en sagrado matrimonio a estos dos jóvenes ponys, que ante la vista del creador han decidido compartir toda su vida bajo libre decisión – los dos asintieron – Aragorn, ¿aceptas a Celestia para cuidarla, y procurarla en la salud y la enfermedad hasta que la muerte los separe?

-Me entrego a ti este día, para compartir mi vida contigo. Puedes confiar en mi amor, porque es real. Prometo serte fiel, compartir y apoyarte en tus esperanzas, sueños y metas. Mi voto estará contigo para siempre. Cuando caigas, te levantaré, cuando llores te confortaré, cuando rías compartiré contigo tu gozo. Todo lo que soy y todo lo que tengo es tuyo desde este momento hasta la eternidad

-Celestia, ¿aceptas a Aragorn para cuidarlo, y procurarlo en la salud y la enfermedad hasta que la muerte los separe?

-No es casualidad que nos hayamos conocido, no es casualidad que nos hayamos amado, creo que este gran amor que siento tampoco es casual, es más bien, fruto de nuestra amistad, de las ganas de vivir, de querer compartirlo todo juntos. Aragorn, ahora que estamos aquí, quiero ante Dios comprometerme a ser tu compañera fiel, tu amiga incondicional, y tu amante eterna, atrévete a construir nuestro destino, porque sé que tanto tú como yo, estamos convencidos que juntos somos mejor que separados.

-quien tenga alguna objeción para que no se realice esta boda que hable a hora o calle para siempre –no muy lejos de ellos, escondido, Onix estaba por lanzarse a grita a todo pulmón cuando sintió en su hombro la pezuña de Éowyn que acompañada por Asuna lo detuvieron –en ese caso, lo que hoy se ha unido, no lo deshaga ni dios, ahora los anillos

-¿anillos, que anillos? –todo se quedaron a la pequeña Serena que junto con el resto buscaban entre sus ropas los anillos –no tengo anillos, nadie me dijo que debía traerlos – el silencio se dio mientras un pony rojo vestido de finos linajes llego a un lado de Aragorn, incomodándolo

-aquí están los anillos – Arathorn acompañado por Asuna, Éowyn, y de mala gana Onix, entrego un par de anillo de oro a Serena que se los entrego al pony que presidia la ceremonia –son los mismos anillos con los que tu madre y yo nos casamos, sé que ella hubiera querido que tú los usaras –el pony el coloco los anillos, ante los gritos de júbilo de los presentes

-siento interrumpir –dijo Onix con desdén – pero creo que este seudo-principe tiene una guerra que librar

-Faramir, te la dejo, cuídala por favor, que es mi razón para vivir –el dio un beso en los labios a Celestia y se marchó acompañado por Gandalf, y Arathorn, mas no noto que Asuna y Celestia se guiñaban un ojo, cómplices de alguna travesura, Aragorn corrió hacia la armería siguiendo a Gandalf, donde ya los herreros le tenía una armadura

-Aragorn espera –exclamo el pony rojo –sé que no me vez con buenos ojos, y que aunque no me odies, aun guardas rencor, pero hay algo que deseo darte –de entre las telas de su traje saco una espada envuelta en tela roja – es mi regalo,

-si piensas que con esto olvido todo –Arathorn se la extendió

-no lo pienso, sé que pasara mucho para que me veas como tu padre, y mucho más para que me veas como tu amigo, pero ahora te pertenece – Aragron la sostuvo con su pesuña, midiéndola

-tiene buen equilibrio –tomo la vaina – supongo que….gracias…creo –fueron interrumpidos por Gandalf que los motivo seguir

-Aragorn, deseo presentarle a Iron hoover, el maestro herrero del rey

-es un placer mi señor

-bien, muéstrenla–dijo Gandalf, al instante se apartó descubriendo una fina armadura de acero, con austeras decoraciones de plata y oro

-los mejores herreros reales trabajaron toda la noche – mas Aragon solo inclino la cabeza un momento saludando para después tomar al armadura con delicadeza – espero este satisfecho con el trabajo

-para ser una armadura hecha precipitadamente, no deja de ser bueno –se colocó el peto, las hombreras, y musleras, y finalmente el yermo – bástate ligera

-pero resiste bastante – dijo una voz acercándose al grupo, era Xerneas portando su armadura del mismo tono que la de Aragorn , en su espalda descansaba una espada que al Alicornio le extraño – Xerneas ¿desde cuándo tiene esa espada?

-fui por ella en la noche –saco la espada con rapidez dándole la empuñadura –adelante tómala,

-es bastante decente – dijo al sostenerla – pero le hace falta algo de filo ¿hace mucho que no la usas?

-seré sincero es la primera vez que la empuño

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Las princesas Asuna Y ahora Serena, colocadas en un estrado lujosísimo, veían desfilar las huestes que marchaban a la guerra, teniendo a su lado a las damas más principales de Lauren. Entre ellas estaba white winter, en la que aquel día, como siempre, se fijaban todos los ojos, Pero, según a ella le parecía advertir, con diversa expresión de la costumbre. Diríase que en todas las curiosas miradas que a ella se volvían retozaba una sonrisa burlona.

Este descubrimiento no dejaba de inquietarla algo, sobre todo teniendo en cuenta las ruidosas carcajadas que la noche anterior había creído percibir a lo lejos y en uno de los ángulos de la plaza, cuando cerraba el balcón y despedía a su amante; pero al mirar aparecer entre las filas de los combatientes, que pasaban por debajo del estrado lanzando chispas de fuego de sus brillantes armaduras y envueltos en una nube de polvo los pendones reunidos a dos ponys, y ver la significativa sonrisa que al saludar a la princesa le dirigieron los dos antiguos rivales, que cabalgaban juntos, todo lo adivinó, y la púrpura de la vergüenza enrojeció su frente y brilló en sus ojos una lágrima de despecho.

-¡soldados! – Hablo Aragorn al frente de las legiones – ¡no les mentiré, marchamos sin saber nuestra suerte, solo con una cuestión en nuestra mente ¿volveremos? No les puedo prometer ni la victoria y que regresaran, lo único que puedo decirles es que no los dejare solos, todos unidos contra la jauría de lobos que se adentra para destruir lo que con tanto esfuerzo ustedes y sus ancestros edificaron! – Se dio la media vuelta contemplando las montañas – ¡avancen!

Las tropas tomaron ritmo de trote a la vez que acercaban bosque, algunos dudaron siquiera entrar en el mismo, pero ninguno se atrevía a preguntar, excepto uno

-señor, deberías evitar el bosque, las bestia s nos diezmarían antes de llegar – exclamo uno de los capitanes junto a Aragorn – debería pensarlo señor

-y lo hago – con total tranquilidad – estamos a finales del otoño, los animales ya se están preparando para el invierno, las manticoras por estas fechas esta migrando siguiendo a sus presas al sur, no tienen tiempo para desperdiciar tiempo y energía con nosotros

-está seguro señor – expreso otro capitán – ¿Cómo lo sabe?

-viví en este bosque casi toda mi infancia, para sobrevivir mi madre y yo tuvimos que aprender a la fuerza – apretó los dientes levemente – tantas penurias…. – el soldado solo alentó el paso retrasándose ligeramente, dejando que otro avanzara sorprendiéndolo

-y ¿Cuál es el plan? –Dijo una voz detrás de Aragorn – ¿ir a través del bosque?

-así es – respondido sin fijarse – el paso por el bosque nos ahorrara día y medio de viaje, eso nos dará la ventaja en la batalla ya que las tropas e Dragonia estarán exhaustas por el viaje en barco

-aparte de que no esperaran que tomemos por el bosque

-exacto…. – se giró para quedar paralizado –pero….pero….pero…pero que estás haciendo aquí – junto a él estaba Celestia portando una armadura

-te sorprendí –dijo con total inocencia, Pero Para Aragorn no era cosa de risa, se alejó de la fila que era guiada por Xerneas –si, sé que vas a decirme, pero no pienso dejarte ir a esa lucha tu solo

-Celestia te pido por favor que vuelvas con Faramir, Candace y Serena

-no podrá ser –respondió ella señalando a la fila donde nerviosamente Faramir y Candace los saludaban vestidos como arqueros normales –y a Serena, le pedí a Gandalf que la cuidara, y aunque tú no confíes en ellos, yo si lo hago por que se reconocer su buen corazón

-Celestia, no sé cómo lo hicieron pero ahora mismo se volverán, y ni una palabra más….entiende, no puedo protegerte a ti, y a los demás, y al mismo tiempo liderar a estas tropas –pero ella lo miro con total calma – recuerda el sitio a donde deseas volver, a esa Eee….ecuestria

-escúchame ahora mismo Aragorn –respondio –si tengo deseos de volver a Equestria, pero no puedo dejar que ponys inocentes sean lastimados mientras me quedo de patas cruzadas, y aunque me duela decirlo, yo nunca he estado en una guerra, jamás, reconozco muy a mi pesar cuando no hay otra salida más que esa

-lamento decirlo mi señor – exclamo Laststar – pero ya cruzamos el punto sin retorno, me temo que ya no es posible para nadie poder regresar – eso no le gusto a Aragorn que con la mirada le pidió no intervenir

-además – continuo ella – se defenderme yo solita –concentro su magia lanzando un poderoso rayo dorado a unas piedras cercanas que fueron destruidas por acción del ataque, eso dejo al resto de los espectadores totalmente pasmados – lo vez, no tienes por qué preocuparte por mí, y para que lo sepas, Candace es casi tan hábil como yo en los hechizos ofensivos –siguió su andar detrás de Xerneas que se había detenido momentáneamente a esperarlos

-si yo fuera tu –dijo Candace llegando junto a Faramir – no haría enojar a mi tía – con su pesuña cerro al boca de Aragorn que paralizado no respondió, corrió para alcanzar a Celestia en lo que Faramir solo comenzó a reírse por lo bajo

-vaya Aragorn, ya vez por casarte jajjajajjjajajajajaja – repentinamente Aragorn lo encaro con la mirada – a mí ni me veas, no fue mi idea, fue de Celestia –el negó con la cabeza ya asumiendo al situación –no tenemos de otra

-te he dicho cuanto odio que tengas razón

-326

-pues ahora son 327 –dijo para después ambos correr hacia la multitud de soldados, llegando poco después con Xerneas y Celestia –no me queda de otra, pero si las cosas se ponen feas, Faramir prométeme que te las llevaras lejos –el asintió, dejando que la pareja caminara juntos pal interior del arbolado

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*Una pérgola es un elemento arquitectónico y estructural, conformado por un corredor flanqueado por columnas verticales (denominadas pilares) que soportan vigas longitudinales (durmientes) que unen las columnas de cada lado, y otras transversales apoyadas en las anteriores ( cabios ) a una altura igual o superior uniendo ambos lados y que conforman un enrejado abierto, donde usualmente se desarrollan plantas trepadoras. La pérgola puede ser independiente o adosada a un edificio u otra estructura en cuyo caso suelen eliminarse los pilares y sujetarse las durmientes de dicho lado a la estructura ya existente. El uso más común es la protección de zonas de paso de una zona ajardinada, pero pueden también formar parte de un edificio como protección de zonas peatonales

ahora les informo que hasta resolver ciertos detalles con el autor del siguiente personaje que entrar en la historia, no subire por un tiempo, ademas como ya entre a la escuela el 200114 no tengo mucho tiempo, pero gracias a todos los que leen esta historia