Los Amigos del Antiguo Divine

En un cielo azul, con algunas pequeña nubes blancas, se abrió lo que parecía un portal dimensional en dicho cielo.

Por ella surgió una nave matriz, solo que diferente a los que usan habitualmente las Guardia Celeste del imperio. La principal diferencia de dicha nave es estaba como enjoyada. En vez de metal, era como una joya morada con la punta del final como un gran rubí. Sus alas de matriz eran de color azul suave.

Dicha nave surcaba por el cielo, siendo vista por un humano pastor de ovejas con su rebaño y su perro pastor, que miró sorprendido dicha nave, ya que nunca había visto nada igual en toda su vida.

Dicha nave se dirigía hacia una hermosa mansión que estaba cerca de una gran ciudad. En dicha puerta había un cartel que ponía "Casa Rouser".

Fuera de la puerta de la mansión estaba una hermosa mujer refinada de cabello dorado corto hasta sus hombros, usaba unos pequeños y estéticos anteojos, usaba un vestido ceñido de color verde con tacones y guantes largos con encaje, a su lado estaba un gato gigante de pelaje azul con una cicatriz en su ojo izquierdo y una buena parte de su oreja derecha estaba desaparecida. Encima del gato estaban dos fénix, uno de plumaje blanco con azul, mientras que las partes de las plumas alargadas de sus alas y cola eran de hielo. El otro fénix parecía un híbrido entre dragón y ave de plumaje oscuro como la noche y rojo sangre.

La mujer observando como se iba acercando la nave, se ajustó las gafas mientras decía.

Mujer: Ya están aquí.

Gato desorejado: Normal. Nos avisaron con tiempo.

Completó el gato con cierto tono de sarcasmo. La fénix blanca le llamó la atención al gato.

Fénix blanca: No seas desagradable. Al fin y al cabo, son unos amigos. Nada menos que Darkwing y los otros.

Le decía a modo de regaño la fénix, aunque el gato pasaba de ella e iba a su bola.

La nave matriz se detuvo en el aire y ahí se puso en vertical, abriendo sus alas a modo que pareciera una hermosa flor violeta que giraba a su alrededor a la vez que generaba un especie de campo de energía a un gran radio alrededor de esta. La mujer observando la nave así de abierta, no podía evitar admirar la belleza que mostraba dicha nave abierta.

Mujer: Como una hermosa flor nocturna a la luz de la luna...Si fuera de noche, claro je, je, je.

Se rió levemente la mujer. En el campo generado por la nave matriz, se formaron unos haces de luces, donde se suponían que tenían que aparecer Darkwing como compañía y finalmente lo hicieron, pero no como ponis sino como humanos.

Darkwing apareció como una mujer de piel blanca tirando a oscura. Con su largo pelo marrón oscuro haciendo que luciera hermosa. Un busto bien desarrollado. Llevando una camisa marrón de manga corta y una minifalda marrón, con botas marrones. Conservaba sus alas de murciélago. Su fénix Dark Cloud estaba sobre el hombro de la mujer.

Junto a ella estaba su marido Onyx Moon. Ahora era un humano de piel oscura. Pelo azul corto que le llegaba a los hombros. Conservando sus ojos y alas de murciélago. Portando una armadura de guardia real nocturna.

Red Fire era una hermosa mujer de piel tirando a rojo. Su larga crin que era como el fuego la llegaba casi hasta la cintura. Conservaba sus alas de alicornio. Portaba una armadura tecnológica color ámbar con rojo tipo valkiria, con falda roja la cual la hace lucir muy hermosa.

Ocelot era un humano de piel ligeramente marrón, con su pelo corto por encima del cuello. Llevaba un traje tipo vaquero, con pantalones y botas con espuelas, una tela a modo de capa como los vaqueros de época y por supuesto su inseparable sombrero vaquero.

Vulcania era una mujer de piel morena. Con una larga cabellera que estaba algo por debajo de la altura de los hombros. Portando una armadura azul al cuerpo que en cierto modo la hacia algo corpulenta, pero a la vez realzaba su figura, con turbinas sobre los hombros de la armadura y un símbolo nuclear en la espalda.

Eye Falcon era un hombre de piel blanca casi pálido. Con pelo corto. Portaba una abrigo negro largo que le tapaba casi por completo por atrás y una capucha donde esta última no la llevaba puesta, permitiendo así verle la cara. Su rifle de francotirador lo tenía colgando por la espalda.

Y finalmente Mistic. Una mujer de piel completamente negra, con su largo pelo verde que la llegaba casi a la cintura, sus ojos verdes oscuros apenas se la distinguían las pupilas. Portaba un top verde corto y que se le veía el ombligo. Unos guantes verdes que dejaban libres los dedos. Unos pantalones cortos que la cubrían hasta las rodillas y botas verdes.

Darkwing mirando a la mujer y animales, la sonrió mientras la saludaba a esta.

Dark: Hola Rebeca, hola Sherrys, Anivia y Night Terror. Nos alegramos de veros a todos.

Rebeca: Igualmente amiga.

Respondió la mujer que era nada menos que Rebeca y ambas amigas se abrazaron la una a la otra bastante contentas de verse la una a la otra.

Rebeca: Cuando vi tu mensaje sobre que veníais tú y los otros, preparé la mansión para el tiempo que paséis aquí.

Comentaba esta mientras rompía el abrazo con Darkwing.

Onyx: No tenías que haberte molestado, Rebeca. Nosotros podemos dormir perfectamente en el Filo Nocturno, la nave de los Cazadores de Sombras que tenemos como cuartel general.

Respondía Onyx con una sonrisa al igual que su vieja amiga.

Rebeca: De eso nada. No vais a pasaros las noches dentro de una enorme y fría nave. Nada como dormir en una cama en medio del hogar para sentirse como en casa. Pasareis las noches en la causa Rouser y no se hable mas.

Decía con fingida autoridad la mujer aunque en el fondo solo bromeaba, haciendo reír a sus amigos.

Red: Bueno. Si eso significa dormir en una cómoda cama, me apunto.

Decía alegremente la mujer de fuego, mientras se atusaba el pelo.

Red: Y si hay baño, mejor. Una necesita mantener bien su crin.

Seguía diciendo la mujer ahora con un leve tono presumida.

Ocelot: Mientras pueda dejar las botas en algún sitio, me vale. Y una buena bebida.

Comentaba Ocelot sacándose una botella de cristal de su traje, echarse un trago hasta vaciar la botella. Una vez vacía, la lanzó lejos por el aire, rápidamente sacó la pistola de uno de sus antebrazos y con un disparo certero rompió la botella en pedazos.

Rebeca: Ocelot. Te agradecería que no hicieras esas cosas, al menos en mi casa.

Le decía a modo de regaño la mujer, aunque en parte la hizo gracia el gesto del vaquero. Ocelot encogiéndose de hombros y con una leve sonrisa, la contestó.

Ocelot: ¿Qué se va a hacer? Me gusta lucirme.

El grupo se rió por el comentario el vaquero.

Rebeca: Bueno amigos ¿Qué tal si vamos dentro y charlamos?

Les decía la mujer ofreciendo entrar en su casa a sus amigos. Estos aceptaron con gusto.

Dark: Será un placer, Rebeca. Pero antes...¡Silver Lion, Sun, Moon!

Convocó a sus compañeros espirituales la mujer de piel morena, y acto seguido aparecieron el pequeño Silver Lion, como los lobos Sun y Moon.

Silver Lion: ¡Hola a todos!

Saludó el pequeño león, antes de irse corriendo hacia donde estaba Sherrys y saltar para quedarse encima de este y comenzar a jugar con sus dientes con la oreja sana de Sherrys.

Sherrys: Como no, la pequeña bola de pelo plateada, ataca de nuevo.

Decía el gato con cierto sarcasmo, mientras el pequeño león seguía jugando con su oreja, le decía a este.

Silver Lion: Me alegro de volverte a verte, Sherrys.

Sherrys: Si. Igual que yo como el mal de barriga.

Respondió con sarcasmo el gato, mientras los presentes se reían de la divertida escena del pequeño cachorro de león plateado con el gran gato.

Mas tarde en el interior de la casa Rouser. Rouser había servido un poco de té a sus invitados, que estaban todos en el comedor principal en una amplia mesa hecha de caoba de calidad.

Red: Bueno Rebeca ¿Cómo han ido las cosas por aquí?

Preguntaba la mujer de fuego mientras probaba el te que la había traído Rebeca. La mujer sentándose en su sitio, se puso a contarles las nuevas, nuevas.

Rebeca: ¿Qué os puedo contar ya? Actualmente Jack y Gifka son ahora héroes retirados del ejercito celestial, que junto con su hija Selene viven tranquilamente como granjeros en el rancho de Wyverns.

Ocelot: Jack y Gifka como granjeros. Quién lo diría.

Respondió tranquilamente el vaquero mientras ponía sus piernas cruzadas encima de la mesa, así hasta que Sherrys que estaba con Silver Lion aun jugando con su oreja el pequeño cachorro, cambió de afinidad naturaleza y sacando un látigo cepa, golpeó las piernas de Ocelot haciendo que se apartaran de la mesa.

Sherrys: Las patas fuera de la mesa. Que luego el servicio me echan la culpa a mi de ensuciar los muebles.

Anivia: ¿Aun más, gato tonto?

Bromeaba la fénix blanca que estaba junto con los otros fénix Dark Cloud y Night Terror, donde estos se rieron levemente del comentario hecho por la fénix. El gato simplemente bufo.

Mistic: ¿Y tú Rebeca? ¿Cómo te van las cosas?

Preguntaba la mujer cambiante. Rebeca encogiéndose de hombros, la respondió tranquilamente.

Rebeca: Ya veis. Dejé de lado la simple y aburrida vida de aventurera donde ahora me dedico a ser una mujer de rica familia, que vive con su familia, mientras mi marido Jhosua es el jefe de la familia, trabajamos en la alta cámara parlamentaria, aunque también tenemos trabajo aquí educando a los niños.

Comentaba Rebeca bromeando en algunas partes sin contarles que Jhosua realmente se dedica a eliminar a los enemigos y traidores del nuevo gobierno y ahí siguió hablando.

Rebeca: Y mis hijos Marcos y Jaqueline van a la academia junto con su prima de cuatro años mayor que ellos. Y por supuesto mis hijos van acompañados de sus gatos guardianes Sofi y Blacky donde estos ahora poseen 6 formas elementales diferentes.

Sherrys: Hablando de gatos elementales ¿Cómo le va a mi hija Feli? Espero que esté tomando en serio sus entrenamientos y dominé ya varias formas elementales. Como me entere que esta haciendo la vaga, ya la daré yo un buen rapapolvos.

Preguntaba el gato sacudiéndose un poco la cabeza para quitarse de encima al cachorro de león, haciendo que este se cayera de espaldas y quedando boca arriba en el suelo, pero lejos de molestarse, el cachorro se rió divertido.

Vulcania: Por si te interesa, saco de pulgas. Ella ya domina varias formas elementales de interés. Si lo sabré yo...

Contestaba la mujer artillera, donde esta estaba revisando su torreta portátil que suele emplear en las batallas.

Anivia: Oye ¿Es seguro que urges con esa cosa aquí?

Preguntaba la fénix blanca, no sintiéndose muy seguro ante la torreta que estaba revisando la yegua. Ella conocía muy bien la torreta automática que solía usar Vulcania en batallas, capaz de lanzar infinidad de balas con que acribillar al enemigo.

Vulcania: Tranquila, plumifera. Tiene puesto el seguro. Además, está programado para atacar a enemigos y no aliados.

Sun: Aun así no me siento tranquilo con esa cosa.

Moon: Si. Especialmente por el hecho de que te puede coser a balazos en cuestión de segundos.

Comentaban ambos lobos que estaban tumbados junto a la chimenea. Vulcania rotando los ojos, comentó para si.

Vulcania: Los ingenieros somos siempre tan poco valorados...

Ignorando eso, Darkwing la preguntó a Rebeca.

Dark: Bueno ¿Y los demás?

Rebeca: Bueno. Canas como ya sabéis, murió hace años.

Red: Canas...Si.

Ocelot: Desde luego, pobre viejo. Era algo gruñón, pero en el fondo era un buen hombre.

Comentaban estos últimos con cierta tristeza en sus voces, los demás también estaba algo tristes, recordando el día en que recibieron la noticia del que el viejo Canas murió hace tiempo.

Eye Falcon: ¿Y la academia donde antes lo dirigía él? ¿Ahora no lo dirige Danna Blade junto con su marido?

Preguntaba el francotirador donde este ya había terminado de ajustar su rifle y se lo colocó de nuevo a la espalda. Rebeca asintiendo le respondió.

Rebeca: Así es. Cuando el viejo Canas murió, Danna Blade ocupó su lugar como nueva directora de la academia, junto con su marido Michael que es ahora profesor de artes, aunque ella siempre debió hacerlo, debido a que su familia era quienes manejan todo lo relacionado con la educación.

Dark: ¿Y Rafael? Pensé que tu hermano estaría aquí en casa.

Rebeca: Mi hermano se fue unos días por una investigación en un templo antiguo recientemente descubierto, pero hace poco recibí una carta suya diciendo que volvería pronto. Así que en un día u otro debería volver ya.

Dark: Ya veo que muchas cosas han pasado desde entonces.

Rebeca: Ya lo creo, amiga ¿Y vosotros que contáis? En vuestro mensaje decía que han pasado varias cosas en vuestra dimensión.

Dark Cloud: No tienes ni idea, muñeca.

El grupo les explicó todo. Desde el primer movimiento de Arek, como la patrulla decidió pasar de la defensa al ataque, reactivar la antigua tecnología de los Purificadores, y como optaron en dividirse en equipos y ejércitos para ir de dimensión a dimensión para destruir las instalaciones donde creaban a los híbridos. Rebeca escuchó todo el relato con suma atención, al igual que hicieron el gato Sherrys y la fénix Anivia.

Rebeca: Ya veo. Parece que os espera un largo camino.

Comentaba la mujer tras escuchar el relato de sus amigos.

Onyx: Si. Un largo camino si queremos salvar el multiuniverso del malvado Arek.

Contestaba el novio de Darkwing, mencionando la importancia de su misión.

Sherrys: Ya veo ¿Y creéis que hay alguna instalaciones de híbridos por aquí?

Preguntó el gato mientras Silver Lion de pie a un lado de este, le iba tirando de la oreja con los dientes, logrando poner a prueba la infinita paciencia del gato.

Red: Es lo que Nova y los agentes fantasma pudieron confirmarnos, ya que se registró actividad de híbridos en el lugar.

Rebeca: Ahora que lo mencionáis. Desde hace tiempo, se han registrado avistamientos de extrañas criaturas desconocidas merodeando por el reino.

Comentaba ahora Rebeca, recordando ciertos registros en la academia.

Dark: La matriarca Raszagal envió a sus mejoras cazadores de sombras para ver si lograban encontrar las instalaciones.

Eye Falcon: Cosa que no será fácil, ya que suelen estar bien escondidos los malditos.

Completaba Eye Falcon con cierto tono molesto.

Rebeca: Híbridos. Aun recuerdo cuando nos enfrentábamos a los primeros híbridos hace años.

Sherrys: Auténticos hijos de ...

Dark: ¡Dark Cloud!

Dark Cloud: ¡Porras! ¡Que no soy yo!

Se quejó el fénix oscuro mientras los otros fénix se reían. Darkwing ahí se disculpó.

Dark: Perdona, Dark Cloud. Es la costumbre.

Los demás se rieron levemente por ello. Rebeca tras reírse un poco levemente, les comentó al grupo.

Rebeca: Bueno ¿Qué tal si vamos a visitar a nuestros amigos para así ponernos al día un poco?

Dark: Me parece una buena idea. Así sabremos como les van a los otros.

Todos estaban de acuerdo. Tras prepararse un poco, todos salieron de la mansión y se dispusieron a marcharse, salvó Rebeca que se quedó por un momento enfrente de la casa, mientras realizaba un hechizo.

Rebeca: ¡Arte de Luz! ¡Templo de Luz Sagrada!

Una especie de columna de luz rodeó por toda la superficie de la casa hasta luego desaparecer y quedar como si nada.

Onyx: ¿Qué ha sido eso?

Preguntó hombre de alas de murciélago. Rebeca ajustándose las gafas, le respondió.

Rebeca: Es un hechizo de protección que sirve para evitar que cualquier intruso que no sea amigo nuestro, pueda colarse en la casa.

Explicaba la mujer a sus amigos.

Eye Falcon: ¿No te sería más cómodo una alarma antirrobo?

Rebeca: Pse...Prefiero mi propio toque personal.

Respondió con una leve sonrisa la mujer. Finalmente estos comenzaron a caminar tomando como primer destino la granja donde trabajaban Jack y Gifka.

Mientras caminaban, Red Fire le preguntó a Vulcania.

Red: Vulcania ¿Dónde has dejado tu torreta?

Vulcania: Lo dejé encima de la mesa del comedor. No creo que moleste ahí.

Sherrys: ¿Seguro qué es buena idea que lo hayas dejado ahí? Rafael o Jhosua podrían entrar en casa ignorando eso, y podrían ser acribillados sin remedio.

Vulcania: Tranquilo pulgoso. Tiene un sistema de identificación de enemigos, y Rafael y Jhosua no son enemigos, al menos que yo sepa.

Respondía esta con una leve sonrisa al final. Sherrys no muy convencido, comentó.

Sherrys: Más te vale eso. O nos tocará organizar un entierro doble donde en su lápida ponga "aquí yacen dos idiotas que fueron acribillados por una torreta, dejada por una ingeniera loca y poco valorada".

Vulcania: ¡Ehh!

Se quejó la mujer artillera por el comentario del gato, mientras el resto del grupo se rió por su reacción.

El grupo iba caminando por un sendero que les llevó hasta un pedestal de teletransporte. El grupo aprovechó el paseo para ponerse al día de sus cosas, al mismo tiempo que el grupo de Darkwing y equipo podían apreciar el paisaje tranquilo y agradable de las islas flotantes. El paseo los llevó hasta la granja de Jack y Gifka.

Como les había explicado antes Rebeca, era una granja donde se criaban y cuidaban Wyverns. Podían ver a dichas criaturas parecidas a dragones pero con alas en vez de brazos, en cierto modo pastando o volando por el aire.

Rebeca se acercó a la puerta de madera que dividía el rancho con el exterior. Al abrir la puerta y pasar por ella, alzó la voz para llamar.

Rebeca: ¡Jack! ¡Gifka! ¿Estáis en casa?

No hubo respuesta de inmediato. El grupo miraba de reojo a los Wyverns del lugar donde algunos los miraban, cosa que a algunos los ponían un tanto nerviosos temiendo algún ataque de estos. Dark Cloud recibió un latigazo húmedo el cual lo asusto y se escondío entre los pechos de Darkwing quien lo tomó del cuello mientras lo miraba de manera enfurecida.

Onyx: ¿No hay nadie en casa acaso?

Preguntó este al ver que no había respuesta. Rebeca estuvo a punto de alzar su voz, hasta que vio que la puerta de la granja se abrió.

Jack: ¡Si, Rebeca! ¡Estamos en casa!

Surgía por la puerta un hombre mayor de pelo blanco con mechones negros. Ojos grises. Algo de barba. Llevaba un traje de granjero como un bastón que usaba para caminar. Aquel hombre era nada menos que Jack Evans. Antiguo guerrero retirado.

Jack: Hola Rebeca ¿A qué viene tu visita?

Saludaba alegremente al hombre a la joven Rouser mientras se iba acercando a esta. Rebeca sonriendo, le abrazó mientras le decía.

Rebeca: ¿Acaso necesito una razón para visitar a mi hermano y a su esposa o a mi sobrina favorita?

Respondía la chica sin soltar el abrazo con su hermano, donde este se la devolvió y con una sonrisa la contestaba.

Jack: Para nada, pequeñaja. Me alegro de verte aquí. Seguro que Gifka y Selene estarán contentas de verte.

Rebeca: No vine yo sola, junto con Sherrys y Anivia. Varios amigos vinieron también.

Decía la mujer soltando el abrazo con su hermano y mostrando a Darkwing y los otros. Jack se quedó mirando un momento a Darkwing y ahí dijo.

Jack: ¿Danna?

Sherrys: Casi. Pero no. Es su malvada hermana gemela del otro mundo.

Bromeaba el gato. Jack mirando mejor al grupo y observando los físicos de cada uno, logró reconocerlos a todos.

Jack: Darkwing, Onyx, Red Fire, Ocelot, Eye Falcon, Vulcania, Mistic. Que agradable sorpresa veros a todos aquí.

Decía alegremente el hombre de ver a sus viejos amigos de la Patrulla Harmony.

Red: Lo mismo decimos nosotros, Jack.

Respondió con una sonrisa la mujer pelirroja. Ocelot mirando a Jack le comentó con una sonrisa.

Ocelot: ¿Qué pasa, viejo? ¿Aun sigues vivo? Pensé que ahora mismo estabas criando malvas a estar alturas, pero no. Ahora resulta que eres un granjero que andando con un bastón, tiene que cuidar de dragones en miniatura.

Bromeaba Ocelot con el granjero. Jack fingiendo molestarse, le respondió al vaquero.

Jack: Cuidado vaquero, que aun podría estamparte contra el suelo si quisiera.

Decía esto el hombre fingiendo molestia, haciendo reír a todos. Jack mirando hacia la casa, gritó.

Jack: ¡Gifka! ¡Tenemos visita! ¡Sal, querida!

Gifka: ¡Voy!

Se escuchó la voz de Gifka en el interior de la casa. Finalmente apareció por la puerta una mujer mayor de cuerpo bien formado y busto bastante desarrollado, de pelo corto un poco por debajo del cuello de colores violeta y rosa. Con un traje de granjera compuesta por unos pantalones vaqueros ajustados de granjera y una camisa blanca de manga corta. Portaba en su cinturón un látigo recogido.

La mujer vio primero a Rebeca donde se alegró de alegró bastante verla y dijo.

Gifka: ¡Rebeca! Me alegro de verte, querida.

Rebeca: Igualmente, Gifka.

Respondió esta al saludo, abrazando a la mujer siendo correspondida por esta. La mujer observó a Darkwing donde esta dijo.

Gifka: ¿Danna?

Preguntó esta confundiendo a Darkwing con Danna. Rebeca al oír eso, comentó.

Rebeca: Ehh...No exactamente. Ella es...

Antes de que tuviera tiempo de contestar, apareció volando un Wyverns aterrizando al lado de estos, dicho animal llevaba una silla de montar como unas riendas y siendo llevada por una joven adolescente de piel blanca y ojos bicolor, que son verde y morado, un cabello platinado brillante corto suelto y de las puntas está teñido en rojo, un cuerpo de envidia, con buenos atributos físicos, llevando un traje de jinete. Tenía varias perforaciones en el rostro como una en la ceja derecha y uno en la lengua, la oreja izquierda tiene cinco perforaciones y una más en el ombligo.

Adolescente: Hola mamá, hola papá, hola tía Rouser. Soy yo, Selene.

Decía con una alegre sonrisa la chica y luego mirando al grupo de Darkwing y compañía, sonrió algo más y dijo.

Selene: Y hola a vosotros también, "ponis".

Dijo la joven de repente, sorprendiendo en parte al grupo, en especial a Gifka que no pudo evitar exclamar.

Gifka: ¿Ponis?

Mas tarde, el grupo estaba dentro de la casa, salvo Red Fire y Mistic donde estas junto con Selene, estaban volando por el cielo montados en unos Wyverns.

En el cuarto principal, el grupo estaba charlando tranquilamente.

Gifka: Debí haberlo sospechado que erais de Equestria en cuanto Selene os llamó ponis.

Comentaba divertida la mujer estando esta sentada en un sofá, mientras el resto estaban sentados también en unos sillones o sofás de dicho cuarto. Darkwing con una leve sonrisa, la dio la razón.

Dark: Si je, je, je. De todos modos es sorprendente las habilidades de esa niña para ver la realidad de las cosas.

Jack: Si. Sin duda nuestra hija es bastante especial.

Comentaba con orgullo Jack al mencionar a su hija. Gifka le tuvo que darle la razón a su marido.

Gifka: Si. La verdad es que el día que llegó a nuestras vidas, fue lo mejor que nos pudo pasar.

Selene: Basta, que me avergüenzan.

Dark Cloud quien tenía varios chichones en la cabeza, estaba apoyado en el sofá cerca de su dueña, la dijo a esta.

Dark Cloud: Si. Y me alegra ver que la vida de granjera no te ha afectado negativamente. Aun sigues siendo la misma pedazo de tía buena con unos buenos "misiles" equipados. Je, je, je.

Comentaba el fénix marrón sin apartar la vista del bien formado busto de Gifka. Así hasta que Darkwing le dio un golpe de sus alas a Dark Cloud y molesta le dijo a este.

Dark: No seas pervertido, Dark Cloud.

Lejos de molestarse, Gifka se rió con ganas mientras comentaba.

Gifka: Ja, ja, ja. No pasa nada. Pese a que mi marido y yo somos guerreros retirados, eso no ha impedido que cuide mi imagen.

Jack: Cierto. Mi esposa sigue estando tan buena desde el día que la conocí ¿No crees querida?

La decía de forma dulce y encantador el hombre, mientras la abrazaba por detrás a su esposa y apoyaba su rostro con el de ella donde esta con una sonrisa y un leve rubor en el rostro, le decía a su marido.

Gifka: Ja, ja, ja. Por favor Jack, no exageres. Además, nos conocimos cuando éramos niños y si bien me acuerdo, eras un grandísimo llorón.

Comentaba la mujer con una sonrisa algo sádica, cosa que intimidó al resto incluso a su marido.

Dark Cloud: Y menuda imagen. Cualquier se choca con esos "misiles" y sale rebotando bastante lejos je, je, je..

Dark: Dark Cloud...Que te la ganas de nuevo.

Amenazó la mujer al fénix marrón para que este se callara. Ahí Jack les comentó a estos.

Jack: Bueno amigos ¿Qué os trajo aquí? Algo me dice que no estáis solo de visita.

Vulcan: En eso tienes razón, amigo.

Respondió Vulcania. El grupo se puso a explicar el por qué de su llegada. Jack y Gifka escucharon con suma atención las explicaciones del grupo, escuchando atentamente a la vez que lo entendían.

Jack: Ya veo. Así que el gemelo bueno de Michael como vosotros, habéis decidido pasar de la defensa a la ofensiva. Una jugada un tanto arriesgada.

Comentaba Jack con expresión seria. Ocelot ahí le respondió.

Ocelot: Así es, amigo. Arek últimamente le ha dado por hurgar por demasiado tiempo el avispero, y ya ha molestado demasiado a las avispas hasta el límite

Comentaba medio divertido el vaquero.

Gifka: La verdad, no me resultaría raro que hubiera alguna fábrica de híbridos por aquí. Muchos querrían hacerse con un poder así.

Vulcania: Por esa razón debemos encontrar todas sus fábricas y destruirlas, o al menos las que podamos.

Completaba Vulcania. Jack y Gifka asentían.

Jack: Pues os deseo suerte con ello.

Dark: Gracias.

Onyx: A todo esto ¿Cómo os va la vida de granja? Quiero decir, desde que sois héroes retirados.

Preguntó el novio de Darkwing. Jack encogiéndose de hombros, le respondió.

Jack: No nos podemos quejar. Tenemos una vida tranquila en nuestra humilde y pequeña granja de nuestros pequeños y adorables wyverns.

Dark Cloud: ¿Pequeños y adorables? Una de esas bestias me lamio el trasero y creo que le guste como aperitivo.

Preguntaba el fénix mirando de reojo por la ventana, donde por ella se veía asomarse un wyvern relamiéndose la boca. Gifka levantándose de donde estaba sentada, se acercó a dicho wyverns y le fue acariciando la cabeza mientras comentaba.

Gifka: Si. Al contrario de lo que muchos piensan, lo wyverns no son tan violentos y salvajes como piensan muchos. Al menos los que están domesticados, claro.

Comentaba tranquilamente la mujer mientras el wyverns la lamió un poco la mano con que era acariciado. Darkwing animándose un poco, se acercó a dicho wyvern y le acarició esta también la cabeza, donde el reptil lo aceptaba con gusto.

Dark: ¿Tenéis muchos por aquí?

Gifka: El reino siempre necesita wyverns para sus caballeros wyverns, ya que son guerreros muy fuertes. Por esa razón mi marido y yo procuramos criar bien a estas linduras para que sean sanas y fuertes. Así podrán servir mejor al reino en caso de batalla.

Explicaba con orgullo la mujer, mientras le daba un pequeño aperitivo al wyverns donde lo aceptó con gusto. Rebeca uniéndose a estas para acariciar al reptil, comentó con una alegre sonrisa.

Rebeca: Si. Y sin duda mi hermano y Gifka saben como criar los más sanos y fuertes wyverns del reino.

Gifka: Gracias Rebeca.

Agradeció la mujer mayor con una sonrisa ante el cumplido de Rebeca.

Rebeca: Bueno Gifka. Ha sido un placer veros. Ahora tengo que llevar a mis amigos a la ciudad para que vean a Michael y a Danna como de paso visitar la academia donde ahora dirigen ambos, o al menos Danna lo dirige ya que Michael es profesor de artes allí.

La decía Rebeca ya que había quedado con llevar a sus amigos para que pudieran ver como les iba a Danna y Michael. Gifka sonrió y luego la dijo.

Gifka: Muy bien. Creo que iré con vosotros. Tengo que comprar cosas en la ciudad ¿Os importa?

Dark: Para nada, amiga. Se bienvenida.

Respondió Darkwing con una sonrisa, alegrándose que su vieja amiga Gifka los acompañasen a estos.

"Mas tarde"

Gifka: Cuidad la granja mientras estoy fuera.

Les decía la mujer a su marido y a su hija enfrente de la puerta. Jack rodeando con un brazo los hombros de su hija donde ahora estaba vestida con una camisa de cuadros que lleva amarrado en su cintura con una blusa de tirantes negra con un estampado del esqueleto humano, guantes negros sin dedos, pantalones cortos hasta la rodilla y botas militares, la respondió a su mujer.

Jack: No te preocupes, querida. Todo irá bien.

Selene: Si, mamá. Cuidaremos bien la granja.

Completaba también la pequeña. Gifka sonriendo, se despidió de ellos.

Gifka: Muy bien. No creo que vuelva hasta la hora de cenar. Portaos bien.

Ambos: Lo haremos.

Gifka finalmente se marchó para reunirse con el grupo e irse a la ciudad en un carro tirado por un par de wyverns que normalmente usaba dicho carro para cargar mercancías.

Una vez solos, el hombre mirando a la pequeña la dijo.

Jack: Bueno. Solos tú y yo.

Selene: Si, papá.

Jack: Y mamá no volverá hasta algo tarde.

Selene: Si, papá.

Jack: ¿Te parece una pizza?

Selene: Je, je, je. Si, papá.

Respondió la risa riéndose un poco al igual que el padre.

El viaje duró un buen tiempo de la isla flotante la reino. Así hasta que el grupo llegó finalmente a la ciudad, una gran ciudad enorme con sus grandes edificios.

Gifka: Ya llevamos.

Decía la mujer sin soltar las riendas. El grupo miraba la gran ciudad que era tan grande como la recordaban estos.

Dark: Ya casi había olvidado lo grande que era la ciudad.

Comentaba la mujer de alas de murciélago. Gifka parando el carro, dijo.

Gifka: Ya llegamos. Todos abajo.

El grupo que estaba subido en el carro, bajaron de él. Ahí pudieron ver montones de tiendas, lugares de interés como algunas estatuas. Puestos de comida. También había un espectáculo de marionetas donde muchos niños y mayores admiraban el espectáculo.

El grupo no pudo evitar acercarse al espectáculo de marionetas y sobraba decir que les gustaba la obra que representaba a Caperucita Roja y el lobo.

Todo el mundo se divertía del espectáculo, tanto que nadie observaba como un ratero intentaba robar en el bolso de una señora que estaba completamente centrada en el acto para darse cuenta de ello, nadie salvo Vulcania que estaba al lado de la señora. Sin mirar siquiera y con una sonrisa en la boca, Vulcanía introdujo su mano también en el bolso y ahí agarró la mano del ratero.

Se escuchó el sonido como el crujir de huesos y la expresión del ratero pasó de una sonrisa confiada, a una de sufrir un intenso dolor.

Vulcanía retiro su mano del bolso al igual que el ratero que no había cogido nada, donde este abandonando el lugar mientras se sujetaba su mano que estaba fuertemente adolorida.

El grupo volvió a caminar, esta vez dirección a la academia.

En el interior de un despacho, estaba una mujer que era casi idéntica a Darkwing, solo que con el cabello algo mas corto. Con un uniforme marrón de directora de escuela con el escudo de la escuela estampado en ella.

Aquella mujer era Danna, la nueva directora de la academia. Esta revisaba las fichas para admitir nuevos alumnos en dicha academia. Estaba tras su escritorio concentrada en ello, hasta que llamaron a la puerta.

Danna: Adelante.

La puerta se abrió y por ella entro un hombre que era casi idéntico a Mike Bluer si fuese humano. Solo que este tenía el pelo corto a la altura de los hombros y algo de barba. Llevaba un traje rojo con detalles dorados de profesor, con el escudo de la escuela estampado en dicho traje. Aquel hombre era Michael, profesor de artes en la academia y actual marido de Danna.

Michael: Buenos días, Danna.

Danna: Buenos días, querido.

Se saludaron alegremente el uno al otro.

Danna: ¿Qué te trae por aquí, querido? ¿Otra vez tus alumnos te traen problemas?

Preguntaba medio divertida la mujer, ya que desde hace tiempo su marido tiene que lidiar con algunos problemas relacionados con unos jóvenes alumnos un tanto rebeldes. Michael echando su mano tras la cabeza, la respondió.

Michael: Ehh...No...Todavía. En realidad venía a decirte que tenemos visita.

Danna: ¿Visita?

Preguntó curiosa la mujer. Michael sonriendo ante la expresión de intriga, se apartó para dejar paso a Darkwing y su fénix. Sobraba decir que Danna se sorprendió al ver a nada menos que a su homologa de Equestria.

Danna: ¿Darkwing?

Preguntó esta ante la mujer que entró en el despacho. La eludida con una sonrisa la respondió.

Dark: La misma.

Danna: Darkwing, amiga. Me alegro de verte.

Decía la mujer con una sonrisa, levantándose del escritorio para acercarse a su amiga y darla un abrazo.

Danna: Me alegro de volverte a verte, Darkwing.

Decía la mujer mientras Darkwing devolviéndola el abrazo, la respondió.

Dark: Igualmente amiga.

Ambas mujeres rompieron el abrazo y ambas alegremente comentaron la una con la otra.

Dark: ¿Cómo esta mi malvada hermana gemela?

Bromeaba esta con su homologa humana. Danna riéndose un poco, la contestó.

Danna: No. Se supone que la hermana gemela malvada eras tú, y yo era la buena.

Dark: Para nada. Yo soy la buena y tú la mala.

Danna: Yo. Tú eres la mala y yo la buena.

Dark: No. Tú.

Danna: No tú.

Dark: Tú.

Danna: Tú.

Comenzaron a jugar la una con la otra con ello, no era la primera vez que ambas mujeres jugaban a ver quien era la gemela mala y quien la buena. Michael no pudo evitar sonreír ante el juego de ambas amigas y tampoco pudo evitar comentar.

Michael: No se quien es la buena o la mala. Pero las dos estáis igual de buenas.

Ambas: ¡Eh!

Se quejaron las dos fingiendo enfadarse y cada una le dio con su puño en los hombros del chico donde este último se rió al igual que las dos mujeres.

Danna: ¿Qué te trae por aquí, amiga?

Dark: Es una historia algo larga. Si dispones de tiempo.

"Mas tarde".

Darkwing había terminado de contar su historia a sus amigos, donde estos la escucharon con suma atención todo.

Danna: ¿En serio pasó todo eso?

Dark: Así es.

Michael: Lo que más me sorprendió es todo ese royo sobre los Purificadores. Parece de ciencia ficción eso.

Danna: Si. Robots con datos de personalidad de antiguas personas, convertidas en IA. No me imagino a nadie haciendo algo semejante. Ni siquiera Rafael pese a lo que le gusta mucho ese tipo de cosas.

Comentaban ambos. Darkwing asintiendo les dijo a estos.

Dark: Es la verdad. Ahora mismo estamos en una importante misión y creemos que por aquí podría haber híbridos y similares.

Danna: Ya veo. Bueno. Si necesitas ayuda, no dudes en pedírnosla.

Dark: Gracias amiga.

Dark Cloud: Muy bien preciosa. Antes que nada unas cuantas preguntas. Primero ¿Cómo van las cosas por aquí? Segundo ¿Os adaptáis a vuestra nueva vida como siendo Michael profesor y tú como directora? Y tercero ¿Qué talla se sujetador usas? Porque al igual que mi Darkwing como humana, también tienes buenos "misiles".

Preguntaba esto último sin apartar la vista de Danna con cierta mirada pervertida. Así hasta que Darkwing le dio con la palma de la mano en la cara para que se callara.

Dark: ¡Cállate, Dark Cloud! ¡No seas pervertido!

Michael y Danna se rieron un poco por los comentarios del fénix y la reacción de su amiga. Ahí Danna comentó.

Danna: Bueno. Sobre lo primero, no nos quejamos. La academia vienen buenos alumnos aunque de vez en cuando suelen venir alguno problemático. Lo segundo, a Michael y a mi nos viene bien los nuevos roles que nos ocupamos ahora. Y lo tercero, imagínate je, je, je.

Michael: ¿Y Rebeca donde está? Pensé que vendría contigo.

Dark: Ha venido. Solo que ella y su marido han querido ir primero a ver a sus hijos

Danna: Claro. Por algo estudian también en la academia.

Danna se pasó la mano en su hombro mientras estiraba un poco el cuello hacia un lado.

Dark: ¿Estas bien?

Danna: Si. Solo estoy algo cansada. Menos mal que ya llega la hora del descanso. Oye Darkwing...

Dark: ¿Sí?

Danna: ¿A tus compañeras y a tí os gustaría probar una de las nuevas instalaciones que tenemos en la academia?

En otro lugar de la academia, para ser mas concreto en una zona descubierta de dicha academia que era donde los estudiantes practicaban diversas actividades deportivas, estaban Ocelot y Eye Falcon practicando su puntería con unas dianas. Onyx estaba sentado en un banco observando a los dos practicando su puntería

Ocelot estaba en posición como si se disputara un duelo, mirando fijamente a las dianas. Acto seguido sacó la pistola del brazo derecho y en cuestión de segundos disparó con dicha arma, acertando en el centro de todas las dianas con una precisión total.

Ocelot: Nada mal.

Comentaba el vaquero con una sonrisa. Luego se puso a disparar desde diversas posiciones, una de espaldas, una con los ojos cerrados, otro teniendo la pistola por encima del hombro, otra donde saltó en el aire y disparó de nuevo, todas acertando en el centro de las dianas.

Los estudiantes donde todos llevaban el mismo uniforme, miraban sorprendidos la increíble puntería del vaquero. Y si aquello no fue suficiente, lo siguiente que iba a hacer Ocelot los iba a dejar impresionados de verdad.

Ocelot agarró unas manzanas de una cesta que tenía cerca, las lanzó al aire a gran altura todas estas.

Luego Ocelot volvió a ponerse en posición de duelo.

Ocelot: "Solo ante el peligro".

Decía Ocelot como si en una película del oeste estuviera. Una bola de heno pasaba rodando detrás de él. Las manzanas iban cayendo lentamente delante del vaquero donde este estaba inmóvil en el sitio.

Poco a poco las manzanas se estaban alineando hacia delante. Cuando finalmente dibujaron una línea recta, rápidamente Ocelot sacó su pistola y disparó. La bala de energía iba lentamente hacia las manzanas donde las atravesó todas estas y una vez hecho eso, acertó en la diana del blanco.

Luego de su hazaña, Ocelot haciendo girar la pistola desde varias posiciones, finalmente guardó el arma y se puso en posición relajada. Los estudiantes miraron sorprendidos la escena, pero enseguida comenzaron a aplaudir de admiración mientras Ocelot aceptaba con gusto los aplausos.

Ocelot: Gracias querido público, muchas gracias a todos.

Agradecía el vaquero mientras hacía una leve reverencia mientras los alumnos seguían aplaudiendo. Eye Falcon que estaba ajustando su rifle, rotó los ojos mientras decía.

Eye Falcon: "Presumido"

Ocelot: Je, je, je. Cuando alguien tiene talento, es una perdida de tiempo guardarlo.

Contestó Ocelot con su típico buen humor. Eye Falcon terminando de ajustar su rifle, apuntó con su rifle a una diana que estaba a una gran distancia en lo alto de una torre. Sin pensárselo más, disparó acertando a la gran diana.

Ocelot: ¿Ahora quién presume?

Preguntaba Ocelot con buen humor, Eye Falcon no respondió, simplemente sonrió.

Eye Falcon: A todo esto ¿Donde están las chicas?

Preguntaba el francotirador. Ocelot ajustando el sombrero con la punta de su arma y con gesto pensativo, le contestó.

Ocelot: Creo que se fueron a relajarse un poco. Solo que ni idea de a donde.

En otro lugar, para ser mas exactos en unas aguas termales de interior. Estaban Darkwing, Rebeca, Gifka, Danna, Red Fire, Vulcania y Mistic, las siete chicas con toallas cubriendo sus cuerpos, disfrutando del baño caliente de las termas.

Dark: Lo reconozco...Esto que habéis puesto en la academia es una maravilla.

Comentaba Darkwing sentada al borde del baño, con sus piernas metidas en el agua. Rebeca estando a su lado sentada de igual forma, la dio la razón.

Rebeca: Si. La verdad es que fue muy acertado que ordenaras construir unas aguas termales en el academia, Danna.

Danna: ¿Verdad qué si, chicas?

Preguntaba esta divertida estando esta sumergida en el agua al igual que Gifka. Darkwing observando la espalda de Rebeca, pudo ver el tatuaje de una calavera con dos fénix a sus lados posando en enredaderas

Dark: Veo que aun conservas el tatuaje.

Rebeca: Pues si. Es algo que llevaré toda la vida.

Respondió con una leve sonrisa la mujer.

Red Fire que estaba sentada al borde del otro lado del baño lavándose su pelo, iba comentando.

Red: No me gusta estar en el agua porque no puedo prender mi fuego, pero eso no significa que no puedo disfrutar de un buen baño caliente.

Vulcania: Si...Con esto te olvidas de todos tus problemas.

Mistic: Y solo importa que te relajes...

Respondía ambas chicas sumergidas en el agua y lavándose el pelo.

Dark: Me resulta raro que Dark Cloud no haya intentado espiarnos.

Preguntaba la mujer teniendo en cuenta la actitud de su fénix. Sherrys que estaba sumergido en el agua junto con Anivia, les explicó lo siguiente.

Sherrys: No creo que pueda ¿Verdad Anivia?

Anivia: Ya lo creo que no podrá, je, je, je.

En otro parte.

Dark Cloud: ¡Vamos! ¡Sacadme de aquí!

Gritaba el fénix encerrado como estatua de hielo salvo la cabeza, impidiendo moverse y con aspecto de estar batiendo sus alas. Todo ello dentro de un especie de almacén.

Dark Cloud: ¡No fastidiéis! ¡¿Al gato pulgoso le permiten estar con un montón de chicas desnudas de cuerpo diez y a mi me dejan fuera?! ¡No es justo! ¡Y encima me estoy congelando!

Gritaba fastidiado el fénix por el hecho de no poder moverse en absoluto ni de espiar a las chicas en las aguas termales.

Volviendo a las termas, las chicas seguían disfrutando de su baño. Rebeca se quedó mirando por un momento a su compañera Darkwing, cosa que esta la notó.

Dark: ¿Pasa algo, Rebeca?

Preguntaba la mujer de alas de murciélago. Rebeca ante la pregunta, la respondió.

Rebeca: Nada. Que tienes un busto bien desarrollado.

Darkwing la extrañó un poco la respuesta de su amiga.

Dark: ¿Y qué? Tú también las tienes bien desarrolladas.

Ante la respuesta de Darkwing, Rebeca se puso a reírse un poco, cosa que la llamó la atención de su amiga.

Dark: ¿Y ahora de qué te ríes?

Rebeca: Je, je, je. Perdona. No me estoy riendo de ti. Es que me acabo de acordar que cuando era una niña pequeña, y una vez que me quedé a solas con Samanta, Gifka y Luna donde estas al desvestirse, pude apreciar sus atributos y lo inferior que me sentía a ellas*.

*Ver "capítulo 21: Colada y Regañada" del fanfic "Búsqueda por la Verdad" de "S.W.A.T. or Team Wild".

Le explicaba la mujer rubia a su amiga al recordar aquel gracioso capítulo de su vida.

Dark: Pero Rebeca, puede que yo no sepa mucho sobre humanos. Pero piensa que para entonces tú solo eras una potrilla...una niña y claro, no las podías tenerlas desarrolladas del todo.

Ante el comentario de su amiga, Rebeca dejó de reírse y soltando un suspiro, comentó.

Rebeca: Lo se. Pero ya sabes, cuando somos pequeñas y nos ponemos a comparar con nuestros mayores, haciéndonos preguntas si de mayores seremos como ellas o no.

Darkwing al notar el desánimo de su amiga, quiso animarla diciéndola.

Dark: Bueno. Pero ahora eres toda una mujer con un busto bien desarrollado.

Rebeca: Cierto. Eso es verdad.

Respondió Rebeca sonriendo por fin. Así hasta que Darkwing con actitud presumida, la comenzó a decirla.

Dark: Aunque claro. Yo las tengo más grandes. Ja, ja, ja.

Rebeca: ¿Qué? De eso nada, las mías son más grandes.

Dark: Ni mucho menos. Las mías son mejores y mas grandes.

Ambas chicas se levantaron y se quitaron las toallas quedando ambas expuestas y mirándose retadoras la una a la otra.

Dark: Las mías son las más grandes.

Rebeca: Para nada. Más mías son mayores.

Y ahí ocurrió la siguiente escena donde cualquier macho sangraría por la nariz en grandes cantidades. Ambas chicas frente a la otra, con sus brazos en posición en jarras, muy cerca de la otra hasta el punto que sus respectivos bustos se aplastaban contra la otra.

Red: Como no. Algunas cosas nunca cambian.

Decía con cierto sarcasmo la chica de fuego, recordando como Darkwing y Rebeca solían discutir y competir la una contra la otra en todo cuando era más jóvenes. Pero al crecer, aunque seguían teniendo cierta rivalidad, ahora se llevaban mucho mejor las dos. Pero algunas cosas nunca cambiarían entre las dos.

Dark: ¡Las mías son más grandes!

Rebeca: ¡Para nada! ¡Son las mías!

Dark: ¡Las mías!

Rebeca: ¡Las mías!

Seguían discutiendo ambas mujeres sin abandonar su posición, cada vez aplastando más y más sus bustos contra la otra. Ahí Danna las llamó la atención a ambas.

Danna: Chicas. Basta. No tiene sentido que las dos discutáis.

Ambas mujeres sin abandonar su posición, miraron a Danna.

Danna: Además. Al fin y al cabo...

Danna emergió del agua para ponerse de pie y sin ponerse la toalla, quedando esta expuesta del todo.

Danna: Las mías son las más grandes por excelencia.

Dijo de forma presumida la mujer, mientras se sujetaba con las manos su busto para exponerlas mejor.

Darkwing y Rebeca: ¿Queee?

Dark: ¡No es cierto! ¡Las mías son mayores!

Rebeca: Para nada, las mías son sin duda las más grandes.

Danna: Os equivocáis las dos. Las mías son las grandes de verdad.

Gifka: Chicas. Callaos.

Las llamó la atención la mujer mayor, haciendo que las otras tres mujeres las mirasen a esta.

Gifka: Discutir no tiene sentido. Desde aquí puedo ver que todas las tenéis igual de grandes y bien maduras.

Dark: Si...

Rebeca: Supongo que tienes razón, Gifka.

Danna: No tiene sentido discutir por ello.

Comentaron las tres mujeres dándose cuenta que lo que estaban haciendo antes, era una tontería. Gifka sonriendo, las dijo a las tres.

Gifka: Me alegro. Además, si alguien las tiene bien grandes, son las mías por excelencia.

Dijo esto la mujer levantándose del agua sin ponerse la toalla, exponiendo su gran busto que era verdaderamente destacable. Ganándose la atención de las tres mujeres que miraron pasmadas a esta última.

Las tres: ¿Queee?

Gifka sonreía triunfante mientras poniéndose sus manos detrás de la cabeza, movía de forma provocativa su busto.

Gifka: Moríos de envidia, diosas divinas...

Decía de forma presumida la mujer, así hasta que las tres mujeres se miraron las unas a las otras de forma de complicidad, y entre las tres la tiraron agua a Gifka. Esta última miró molesta a las tres y gritó.

Gifka: ¡Esto es Esparta!

Gritó la mujer lanzándose hacia las tres mujeres, comenzando una batalla campal de salpicar agua unas a otras, donde al final las demás se unieron al juego y todas se divirtieron de lo lindo en las aguas termales.

Horas más tarde. Onxy seguía sentado en el banco, hasta que apareció Michael junto con Night Terror y un descongelado Dark Cloud donde este último tuvo que usar su fuego sagrado para derretir el hielo, pero no impidió que el fénix aun siguiera teniendo frío.

Ambos fénix se pararon en el banco, mientras Michael sentándose al lado de Onyx, lo saludo.

Michael: Hola Onyx.

Onyx: Hola Michael.

Michael: ¿Cómo va todo, amigo?

Preguntaba alegremente el hombre a Onyx. El humano sin apartar la vista de las prácticas de Ocelot y Eye Falcon, le respondió.

Onyx: Bien.

Ambos amigos estuvieron en silencio por unos minutos, hasta que Michael finalmente le preguntó a Onyx.

Michael: ¿Ya te has declarado a Darkwing en matrimonio?

Onyx ante la pregunta, desvió la mirada a otro lado y trató de responder como pudo.

Onyx: Eh...Más o menos...

Michael: En otras palabras, que no, vamos. je, je, je.

Se rió levemente en la última parte, molestando en parte a Onyx donde este puso una expresión molesta.

Michael: No entiendo como es que a estas alturas aun no te has declarado a Darkwing.

Onyx: Tuve...Contratiempos...

Dark Cloud que ya estaba mejor de la congelación, miró a Onyx y le preguntó a este.

Dark Cloud: ¿Contratiempos? Amigo. Llevas años intentando declararte a Darkwing, pero al final siempre pasa algo que arruina el momento. Amigo, debes ya aparecer en los record Guinness de ser el pony que más veces a intentado declararse a la misma persona, y nunca lograrlo.

Le comentaba el fénix a su amigo, haciendo reír en parte a Michael y a Night Terror.

Onyx: Muchas gracias por los ánimos, Dark Cloud.

Le decía de forma sarcástica Onyx al fénix negro. Dark Cloud bromeando con este, le contestó.

Dark Cloud: De nada...je, je, je.

Michael: Veo que tienes complicaciones para declararte.

Onyx ante el comentario de su amigo, se apoyó la cabeza en sus manos mientras aburrido le respondió.

Onyx: No tienes ni idea. Cada vez que tengo la oportunidad de declararme, ocurre algo que arruina el momento. Como si hubiera una maldición que tratara de impedirme que me declare a Darkwing.

Night Terror: Tal vez el "Ex" de Darkwing te haya lanzado esa maldición para que no te puedas declararte a ella.

Comentaba el fénix dragón.

Onyx: Quizás sea eso.

Michael se coloco en el banco de forma pensativa con la mano en la barbilla y luego le comentó a Onyx.

Michael: Oye ¿Y por qué no lo intentas ahora?

Onyx: ¿Ahora?

Michael: Si. Ahora mismo todo parece en calma y no creo que ahora mismo ocurra algo que arruine el momento. Yo creo que sería un buen momento para declararte a Darkwing.

Trataba de animar Michael a su amigo. Onyx pensando por un momento, le dio la razón.

Onyx: Tienes razón. Debo hacerlo ahora que parece que nada lo puede arruinar ahora.

Decía ya algo mas animado Onyx. Sus amigos sonrieron ante los ánimos renovados del guardia real nocturno.

Night Terror: Así se habla, compañero. Adelante y conquista a tu chica.

Dark Cloud: Hablando de la diosa del amor. Por ahí llega ella junta con las demás.

Decía el fénix señalando con su ala, al grupo de Darkwing y demás chicas. Onyx no quería perder más tiempo y se dispuso a ir hacia su novia.

Onyx: Ahora o nunca.

El guardia real nocturno fue hacia la posición de Darkwing y ahí la saludo.

Onyx: Darkwing.

Dark: ¿Si, Onyx?

Onyx trató de armarse de valor, rogando a los dioses que esta vez lograra su objetivo. Michael, Dark Cloud, Night Terror e incluso Ocelot y Eye Falcon, se quedaron mirando a la pareja esperando que por fin Onyx se declare a Darkwing.

Onyx: Darkwing. Lo que quiero decirte es si tú...

Onyx estuvo a punto de sacar de su armadura, la caja con el anillo que llevaba dentro. Pero justo cuando lo iba a sacar, apareció por la entrada del patio un guardia dando la alarma.

Guardia: ¡Alarma! ¡Una fuerza desconocida está atacando la ciudad!

Gritaba el guardia estropeando el momento en que Onyx por fin se iba a declararse a Darkwing.

Dark: Si atacan la ciudad, debemos protegerla.

Red: No se hable más ¡Vamos chicas!

El grupo de las chicas se fueron corriendo el patio, dejando a un Onyx completamente estático y con una expresión de "no puedo creerlo". Los chicos hicieron un "facepalm" y en sus mentes se les cruzó la misma idea de que Onxy realmente sufría una maldición. El gato Sherrys acercándose a este antes de irse con su dueña, le dijo con una leve sonrisa.

Sherrys: Ánimo amigo. Lo importante es nunca desistir en tus intentos.

Danna y Michael se quedaron para poner a salvo a los cadetes para que no sufrieran daño de los misteriosos atacantes. El resto del grupo fue hacia la entrada norte de la ciudad que era donde estaban atacando. Rebeca y Gifka cambiaron su indumentaria a ropa más cómoda para pelear, compuesto por unos pantalones y una camisa con cazadora con ambiente militar.

Dark: Oye Rebeca ¿Quién crees que está atacando la ciudad?

Preguntaba Darkwing portando esta ahora la armadura Bankai. Rebeca que se había fusionado con Anivia para obtener su armadura Bankai que consistía en una armadura de energía helada con casco en forma de fénix y con el símbolo de la familia Rouser en el pecho, la respondió un tanto dudosa.

Rebeca: La verdad, no lo se. La ciudad nunca ha sufrido un ataque que se pudiera considerar importante o que alarmase la ciudad. Quienes lo hayan hecho, o están muy seguros de si mismo o son idiotas perdidos.

Gifka: Yo considero lo segundo. Porque hay que ser idiota para atacar la ciudad estando yo presente.

Decía con tono amenazante la mujer, invocando una guadaña con calavera en la parte superior y un texto escrito en la hoja que ponía "poner aquí la cabeza". Vulcanía ahí la preguntó.

Vulcania: Pero ¿No te habías retirado de la lucha al igual que Jack?

Gifka: Quizás. Pero eso no significa que haya perdido el toque. Los viejos soldados nunca mueren, pero tampoco desaparecen.

Mientras tanto al norte de la ciudad. Varios soldados armados con fusiles de combate avanzado y otros con escudos mágicos, trataban de repeler al enemigo, pero unos potentes disparos como de ametralladora los hacían retroceder.

Los misteriosos atacantes eran unos robots de aspecto humanoide armados con una ametralladora montada en su brazo derecho, con una cabeza rectangular con un visor rojo en vertical. Con una especie de ametralladora de tambor giratorio en la espalda. De metal naranja (al estilo Bastión de Overwatch con Skin Crisis omnics).

Aquellos extraños robots atacaban sin piedad a todo lo que se movía, obligando a los guardias a retroceder y a poner a salvo a los civiles. Algunos de los robots se transformaban en torretas fijas con ametralladora y miles de balas surgían de dichas armas.

Unos de los guardias le alcanzó una bala en la pierna haciendo que se cayera al suelo y su compañero trató de rescatarlo, quedando ambos a merced de los robots asesinos que no dudaron en disparar contra ellos.

Pero antes de que dichas balas llegaran hacia ellos, una pared de un edificio se derrumbó donde por ella surgió nada menos que Vulcania interponiéndose entre los guardias y los robots. La mujer de la armadura sin dudarlo, activó un escudo protector frontal que era proyectado desde su brazo, deteniendo los disparos que iban hacia los guardias.

Los robots seguían disparando mientras Vulcanía trataba de mantener el escudo para proteger a los guardias. Red Fire que apareció volando por encima de ella, gritó.

Red: ¡Río de Lava!

Gritó Red Fire lanzando un rayo al suelo y de ella surgió un río de lava que fue directo hacia los robots, convirtiendo a la mayoría de ellos en metal fundido. Darkwing y las otras llegaron para reunirse con Vulcania y Red Fire. Darkwing y las chicas de la patrulla vieron la clase de robots que estaban atacando la ciudad, se sorprendieron enormemente al reconocer al tipo de robot que eran.

Mistic: Espera ¿No son esas cosas qué nos enfrentamos la primera vez cuando rescatamos a las princesas hace años*?

* Ver "Cap 25 Misión Rescate" de mi fanfic "El Retorno de la Patrulla Harmony".

Preguntaba la mujer con un disfraz de hechicera y creando un campo mágico para proteger al grupo de ataques. Darkwing la dio la razón.

Dark: Cierto. Me preguntó que harán aquí esas cosas.

Rebeca: Se supone que desde que derrotamos a Legión, estas cosas deberían haber desaparecido ¿Cómo es que los tenemos precisamente aquí en este mundo?

Vulcania: No lo se, pero una cosa es segura...

Vulcanía sin deshacer el escudo, convocó un enorme martillo tan grande como ella, donde ahí lo agarró con una mano y lo movía como si no pesara nada.

Vulcan: ¡Van a ser ahora mismo chatarra!

Gritó la mujer cargando contra el enemigo, dispuesta a aplastar a tantos robots como se encontrasen. Darkwing y las demás se unieron a ella para no dejarla expuesta al peligro.

Ajeno a todo eso, un cuervo negro observaba la escena. A simple vista parecía un simple cuervo normal y corriente sin nada en especial, si no fuera porque sus ojos en realidad eran cámaras que lo estaban observándolo todo.

Continuara.

No olvidéis comentar.

Nota autor: Mi amiga de S.W.A.T. or Team Wild me ayudó a corregir algunos aspectos del capítulo y se lo agradezco.