Capítulo 17

"La Segunda Batalla de Ponyville"

- ¡Preparen las tropas! ¡Marchamos a Ponyville!

La orden de Cadence, fue clara, y nadie en el campamento se atrevió a contradecirla. De inmediato todos los changlings del campamento vistieron sus armaduras, tomaron sus armas, y bajo las órdenes de Sunset, se alineaban en manípulos de ciento veinte guerreros. Los ponys supervivientes a la masacre que perpetró Twilight en el castillo de las dos hermanas también se dispusieron a volver a su hogar para la venganza, por lo que Starlight y Cadence, comenzaron a moldear rocas con su magia hasta darles forma de armaduras y las repartieron entre ellos. Sunset tomó la Espada de la Armonía y se la guardó en un cinturón que ató en su lomo, posteriormente tomó una diminuta piedra y la transformó en una armadura dorada y grabó en la pechera, la Cutie-Mark de Celestia. Vengaría su muerte, ella se sacrificó por sus amigas y por Equestria, era hora de hacer justicia.

Una vez que el ejército de changlings estuvo listo, al igual que los ponys, comenzaron la marcha hacia el pueblo, los potrillos y las versiones equestres de las amigas de Sunset que seguían en trance, se quedarían en el campamento junto a los señores Cake.

No eran muchos, apenas unos pocos millares, pero eso era lo de menos, tres alicornios poderosas y preparadas para luchar los iban dirigiendo, la victoria era una posibilidad, si pelearan contra Chrysalis o Sombra. Pero se enfrentarían a un demonio, cuyos poderes eran sumamente superiores al de los alicornios, además se enfrentarían a los changlings corrompidos por su magia, lo que era sin duda una gran desventaja, pero poseían un arma capaz de neutralizar a Drashneek y destruir a todas sus creaciones. Un arma de gran poder y que ya se había cobrado una vida.

Una vez que todos hubiesen estado listos, partieron hacia Ponyville, Derpy llevaba sobre su lomo tenía un porta estandarte con la bandera de Equestria, mientras el pequeño ejército se marchaba, los potrillos y los Cake, los despedían deseándoles la mejor de las suertes.

Al salir del Bosque Everfree llegaron a Ponyville o lo que quedaba de él. Solo había ruinas, pero aún se podía sentir la intensidad de la batalla, ya que aún había armas en el suelo y no solo eso, también había una peste horrible lo que indicaba que los cadáveres de los caídos seguían en el pueblo, pudriéndose lentamente a la intemperie.

- Esperamos órdenes princesas. – Le habló Blorgx a Cadence y a Sunset.

- Sepulten a esos ponys muertos, después quiero que busquen todos los materiales que sean útiles para construir defensas. – Les ordenó Cadence.

Los changlings se dividieron en dos grupos, uno para enterrar los cadáveres y otro para buscar el material para construir las defensas, no debían cometer los errores durante la batalla anterior. Al poco rato varios de los changlings llegaron con ladrillos, varillas y algunos troncos. De inmediato, los troncos fueron convertidos en afiladas estacas que se clavaron en las calzadas por dónde deberían cruzar sus enemigos, Cadence removió la tierra en algunas calles y clavó las estacas más pequeñas al fondo, usando un hechizo de sensibilidad y ocultación había creado letales trampas. Con los ladrillos y varillas, los changlings construyeron barricadas y algunas sorpresas más. En suma, Cadence y Sunset, hicieron de las ruinas, una fortaleza diseñada para matar a tantos enemigos como fuese posible. Al anochecer, los trabajos terminaron y el ejército se dispuso a descansar en las ruinas del castillo de la Amistad, que aún mostraba los daños ocasionados durante el asedio, los espías afirmaban que las tropas enemigas llegarían al día siguiente. Todos estaban asustados y nerviosos, sobre todo los ponys que acompañaban a sus princesas, ya habían estado en la batalla anterior y vieron la crueldad que podían tener los changlings bajo el mando de su reina, además fue el castillo donde la última guarnición de Ponyville luchó hasta la muerte. Ahora que Chrysalis estaba muerta, ¿Qué clase de barbarie podrían esperar de Drashneek?

La noche transcurrió sin ninguna perturbación, varios changlings bien armados hacían guardia y se asegurarían de que su enemigo no intentará ningún truco durante la noche.

Finalmente, Sunset levantó el sol, el cual tenía un extraño brillo color rojo, Sunset había aprendido que a veces el sol anunciaba un día sangriento de acuerdo al color de su luz. Por ello, Sunset pudo suponer que la batalla de este día sería sumamente sangrienta y que muchas vidas serían cegadas para siempre.

Las tropas se levantaron con el sol, y se unieron en la plaza central del pueblo junto a Cadence que los esperaba. Allí la princesa del amor, los formó en batallones y una vez que la plaza estuvo llena les dio a todos sus guerreros un vaso de sidra de manzana, y brindó por ellos, deseándoles suerte y pidiendo a su tía que les ayudase a obtener la victoria.

En cuánto Cadence dejó su vaso de sidra, el suelo comenzó a vibrar, los cielos comenzaron a oscurecerse, nubes negras aparecieron sobre ellos y el sol se ocultó tras ellas. Los tambores de guerra comenzaron a sonar, la marcha de ese ejército gigantesco era imposible de no escuchar, Cadence se elevó junto con Sunset, Twilight y Rainbow, para tener una mejor vista de lo que estaban por enfrentar, y al llegar a una buena altitud contemplaron a su enemigo.

Drashneek, conducía al menos, diez legiones de guerreros changlings, cada una compuesta por más de cinco mil soldados, detrás de los guerreros había monstruos y engendros de distintas formas y tamaños, al final estaba Drashneek igual de grande que la última vez, pero no venía solo, detrás de él había otra legión de guerreros, pero estos eran ponys. Drashneek estaba decidido a obtener la victoria sin importarle nada en lo absoluto.

- ¡Rápido Sunset! ¡Prepara a las tropas! ¡Debemos preparar la emboscada!

De repente el ejército enemigo se detuvo, Drashneek elevó su espada maldita al cielo y comenzó a lanzar un rayo dorado hacia arriba y su voz se oyó de forma atronadora y terrorífica.

- ¡Traidores! ¡Princesas! ¡Escúchenme! ¡Antes de empezar con este inútil derramamiento de sangre quiero hablar con ustedes en suelo neutral! ¡Tienen diez minutos!

Sunset y Twilight se miraron y fueron de inmediato hacia Cadence que seguía viendo el ejército de Drashneek.

- Cadence ¿Qué hacemos?

- Iremos a ver que quiere, solo para retrasar un poco el combate. Sunset trae a Blorgx. Él también debe asistir.

- Está bien Cadence.

Cadence salió de los límites de Ponyville y pudo ver al horrible demonio que se acercaba a ella, posteriormente se le unió Sunset, Twilight. Blorgx y Starlight.

- ¡Starlight! ¿Qué haces aquí?

- ¡Voy a estar presente aquí!

- Está bien, no hagas ningún acto imprudente.

Finalmente Drashneek llegó hasta ellas, igual de grande y aterrador que la vez pasada, el ser dejó su espada en el suelo para darles a entender que venía en paz, pero Sunset no caería en ese viejo juego y se ajustó aún más la funda de la Espada de la Armonía. Cuando la enorme entidad demoníaca llegó hasta ellas, les dedicó una burda reverencia y comenzó a hablar.

- Princesa Cadence, ¿Dónde están sus tías?

- Muertas, por tu culpa, ¡Monstruo!

- Princesa, le recomiendo que deje de hablar de esa forma, de lo contrario ordenaré el ataque ahora.

Cadence, que quería retrasar lo más posible la batalla se quedó callada pero seguía viendo con odio a Drashneek.

- Así me gusta, solo vengo a hacerles una propuesta de paz.

- ¡¿Qué?!

- Así es, usted puede detener la matanza princesa. Sólo ríndanse ante mí y nadie sufrirá castigo. Les daré libertad, riqueza, regresaré de la muerte a todos los que han muerto, en suma será una vida perfecta, y si se unen a mí les daré mi don. Serán más poderosas que nunca, nada podrá detenernos, todos los mundos y las dimensiones serán nuestros. ¡Las haré más poderosas que un mismo dios!

Nadie pudo darle crédito a esas palabras, el demonio que había tratado de matarlas hace unos días, ahora quería perdonarles la vida y no sólo eso, quería convertirlas en sus aliadas y regresar a sus amigos y familiares a la vida. Cadence estaba ilusionada, pero trataba de recordarse a lo que habían venido, pero la tentación la invadía.

- ¡Muéstrame que dices la verdad!

- Con gusto.

Drashneek extendió su garra hacia su espada y de una de las runas, un aura de color rosa salió de ella, se puso frente a las ponys y tomó la forma de un espejo, al otro lado había una espesa neblina azulada.

- Observen con atención.

Cadence seguía mirando la neblina y de repente cuatro figuras comenzaron a tomar forma de entre la oscuridad.

- ¿Shinning Armor?

- ¿Princesa Celestia?

- ¿Trixie?

- ¿Reina Chrysalis?

No estaban soñando, estaban justo frente a los seres más queridos de sus vidas, sonriéndoles desde el otro lado del espejo. Si Cadence aceptaba los términos de Drashneek, su esposo volvería con ella y la vida que tenía antes con él y su hija sería la misma.

- ¡Despierten! ¡No es lo que parece!

- ¡¿Qué?!

- Princesa Cadence, Sunset, Starlight, Blorgx. No es esto lo que ellos querían, se sacrificaron por ustedes, dieron sus vidas por algún motivo, bueno o malo, eso ya no importa, pero aceptar esto no es lo correcto, haríamos que su sacrificio hubiese sido inútil.

- Pe… Pero volverán, mi amiga volverá. Twilight, entiéndelo.

- ¡Ellos murieron! ¡Déjalos descansar en paz!

Cadence, seguía viendo fijamente la figura de Shinning quién puso su casco frente a ella. Cadence, comenzó a llorar y colocó su casco frente al suyo, cerró sus ojos y cuándo los abrió, gritó.

- ¡No nos rendiremos!

De repente, las figuras del espejo comenzaron a temblar y experimentar terribles cambios, el cuerno de Shinning Armor fue reemplazado por un agujero en su cabeza que estaba en carne viva y su lomo se abrió dando paso a sus pulmones bajo un mar de sangre, la imagen de Trixie comenzó a flotar y de pronto su cuello se quebró, la imagen de Chrysalis se partió en dos, dando paso a sangre y vísceras verdes y la de Celestia comenzó a gritar mientras un fuego invisible le calcinaba su ala y su cuerpo, después el espejo se resquebrajó y se rompió en mil pedazos. Y cuándo los pedazos desaparecieron, Drashneek rugió de cólera, sin duda estaba furioso.

- ¡Maldita seas Twilight! ¡Voy a matarlos, a todos ustedes!

- ¡Alto! ¡Déjame hablar con Twilight antes! – Le gritó Starlight a Drashneek.

- ¿Quieres hablar con ella?

- Sí, sé que está atrapada en tu interior.

- De acuerdo Starlight Glimmer.

Drashneek creó una bola de fuego desde su mano y el fuego tomó la forma de la princesa Twilight.

- ¡Starlight! ¡Ayúdame por favor! ¡Me hace sufrir mucho! ¡No quise lastimar a nadie! ¡Lo juro! ¡Me estaba controlando! ¡Ayúdame!

- ¡Twilight resiste un poco más!

Drashneek cerró la palma de su mano e hizo desaparecer la imagen de Twilight.

- ¡¿Qué le hiciste?!

- Está atrapada en un limbo, yo tengo el control sobre su alma, yo decidiré si la dejo descansar en paz o la convierto en un demonio. Sólo si llegan a vencerme, podrá descansar en paz, ya no tiene esperanzas de sobrevivir. Su única salida es la muerte. Pero eso es lo de menos, al rechazar mi oferta, han decidido unirse a ella, así que les daré lo que vinieron a buscar. Guerra y muerte.

Drashneek tomó su espada rúnica del suelo y la descargó contra Sunset quién sacó la Espada de la Armonía y lo bloqueó, rápidamente Starlight lanzó un rayo contra Drashneek, mientras Cadence y Twilight los sacaban mediante un hechizo hacia Ponyville.

Al llegar hasta el pueblo, vieron que las chicas así como el resto de las tropas estaban posicionadas en el pueblo, listas para pelear. Sunset volvió a elevarse con sus alas y se fijó en Drashneek quién levantó su espada una vez más y apuntó con ella al pueblo. A la señal de su señor, todo su ejército lanzó su grito de guerra y corrieron hacia la batalla.

La Segunda Batalla de Ponyville había comenzado.