Hola a todos, jeje, perdón si les hice pensar que no continuaría esta historia. Lo siento mucho, he estado escribiendo dos historias a la vez, así que estuve muy ocupada.

La historia continuará, pero algo lento. Pensar que pasará en los nuevos capítulos no será muy fácil.

Continuemos…

El día tan esperado por Celestia y Discord estaba tan cerca. Ambos estaban ansiosos, pues ese día sus destinos quedarían sellados y unidos por las sólidas cadenas del matrimonio.

La hermana de Celestia, Luna, se había encargado de planear con ayuda de la mejor organizadora de eventos de todo Canterlot, Miss Pinkamena Diane Pie. Se encontraba en su casa, planeando el maravilloso día.

-Todo esta quedando maravilloso, Miss Pie- decía Luna, observando a la organizadora que escribía en un papel.

-Que puedo decir, señora Luna, soy buena en lo que hago- respondio Miss Pie- y por favor, agradecería que no me siga llamando Miss Pie, solo dígame Pinkie.

-Oh, bueno, Pinkie. Me acabas de decir que ya tienes todo preparado- pregunto Luna.

-Mmm, bueno, usted se ofreció a celebrar el matrimonio en su casa, pues me dijo que había espacio- dijo Pinkie.

-No vendrán muchos invitados. Principalmente nuestro primo Sombra y nuestra sobrina Cadence, quien vendrá acompañada de su esposo, su hija y su cuñada- dijo Luna.

-Ah, muy bien. Le aseguro que el servicio de banquete ya esta listo. Los señores Cake nunca rompen sus promesas- dijo Pinkie, leyendo el papel.

-¿Y el vestido de mi hermana? ¿Y el traje de su prometido?- pregunto Luna.

-Esa fue una parte un poco difícil. Las diseñadoras Sassy Saddles y Rarity discutieron entre ellas porque cada una quería diseñar los atuendos. Pero logré tomar una decisión justa, Miss Rarity se encargará de diseñar el vestido y el traje, no se preocupe- dijo Pinkie.

-Uff, me alegra de que todo esta saliendo bien para ese día. Quiero que el día de mi hermana sea inolvidable- dijo Luna.

-Sin duda, todo será perfecto- dijo Pinkie, quién empezó a cantar un poco:

"Día perfecto debe ser,

día perfecto debe ser.

La novia como princesa lucirá,

aunque el novio no se queda atrás.

Todo perfecto resultará,

sin duda todo hermoso quedará…"

Pinkie tarareo un poco más de la melodía, mientras Luna movía rítmicamente la cabeza por la canción.

-Admirable canción, Pinkie. Sino es mucha molestia, me gustaría que usted animara la fiesta de la boda- dijo Luna.

-¿Yo, animar la fiesta? ¡Sería un gran honor!- exclamo Pinkie.

-¿Entonces, aceptas?- pregunto Luna- Sería encantador que cantarás esa canción en la fiesta.

-¡Por supuesto! ¡Se lo agradezco tanto, señora Luna!- exclamo Pinkie, casi besándole el casco.

-No es nada, Pinkie. Te veré el día de la boda- dijo Luna, poniéndose el abrigo.

-Esperaré con ansias- dijo Pinkie, acompañándola a la puerta y abriéndola.

-Hasta luego, Pinkie- se despidió Luna, saliendo.

-Hasta luego, señora- se despidió Pinkie, cerrando después la puerta.

Pinkie se sentó en su sofá y miro de nuevo la lista de los preparativos.

-Va a ser muy divertido- sonrió, feliz.

En eso apareció una joven yegua de piel gris, melena gris más oscuro y ojos violeta. Caminaba de puntillas, tratando de no hacer ruido mientras se dirigía hacia la puerta.

-¿Marble? ¿Vas a salir? Casi anochece- dijo Pinkie mirándola.

Marble se sobresalto al escucharla. Se volteo muy asustada y susurró:

-Por favor, Pinkie. No digas nada, por favor. Solo, será por esta vez porque…

-¿Iras a ver a ese tal Big Mac de nuevo?- pregunto Pinkie- Pero nuestro padre te prohibió que se vean a escondidas.

-Padre no lo entiende. Yo lo amo- dijo Marble, escondiendo su rostro en su melena.

-Oh, Marble, sabes que yo siempre te apoyaré en lo que te diga el corazón. Lo que me preocupa es que Limestone se de cuenta- dijo Pinkie.

-¿Qué me dé cuenta de qué?- pregunto otra yegua, apareciendo. Tenia la piel violeta grisáceo, la melena muy corta color gris claro y ojos mostaza.

-Oh, eh, hola Limestone ¿Despertaste de tu siesta?- pregunto Pinkie, sonriendo nerviosamente.

-Me desperté en cuanto oí los ruiditos de los cascos de Marble ¿Así que planeas salir, eh?- pregunto, mirando a Marble.

-Eh… Limey, por favor. Yo… yo- tartamudeo Marble.

-Iras con ese Big Mac de nuevo. Creí que nuestros padres ya te habían sermoneado suficiente- refunfuño Limestone- y ahora, aprovecharás que ellos están de viaje para correr a sus cascos.

-Limestone, yo lo amo- dijo Marble.

-No importa. Yo soy tu hermana mayor y te digo que no irás- dijo Limestone, cortante.

-Pero yo soy la mayor de todas- dijo otra yegua apareciendo, casi de la nada. Tenía la piel color gris, la melena violeta y los ojos celestes.

-Hola Maud- saludo Pinkie.

-¿Qué esta pasando?- pregunto Maud.

-¡Yo te diré lo que esta pasando! ¡Nuestra querida hermanita enamorada quiere salir para encontrarse con su novio secreto!- exclamo Limestone.

-¿Y?- pregunto Maud.

-¿Cómo qué y? ¿No te das cuenta que esta desobedeciendo las órdenes de nuestros padres?- respondio Limestone.

-Marble ya no es ninguna potranca. Es una perfecta yegua adulta. Esta pasando por la fase de sentir afecto por un corcel. No tiene nada de malo querer interactuar con el género opuesto- dijo Maud.

-¿Interactuar? ¡Maud, se supone que antes debemos estar comprometidas para poder salir con nuestros novios! ¡No antes! Si Marble sale con ese tipo sin que estén comprometidos, será como si solo fuera una vulgar… ¡Amante!- exclamo Limestone.

-Si esperamos a comprometernos, tal vez sea muy tarde para encontrar el amor verdadero. Marble ya parece haberlo encontrado- dijo Maud- dime, hermanita ¿Tu relación con Big Mac es porque tienen un mutuo interés romántico?

-Eh… sí- contesto Marble.

-¿Y él te trata como un corcel verdadero debe tratar a una dama?- pregunto Maud.

-Mucho más que eso, hermana. Soy… su reina- sonrió Marble, mostrando un collar en que colgaba una pequeña piedra preciosa color gris que tenia oculto en su vestido.

-Mmm, ya veo. Bien, mientras se amen mucho y él te respete, tienes mi permiso de verte con él- dijo Maud, sonriendo un poco.

-¿En serio? ¡Oh, hermana, muchas gracias!- exclamo Marble, muy feliz y dándole un abrazo.

-Pero no vuelvan muy tarde- dijo Maud.

-No lo haremos. Gracias- dijo Marble. Luego se dirigió hacia la puerta y salió.

Limestone seguía enfadada.

-¿Por qué le das tantas libertades a esa pequeña ingenua?- pregunto.

-Marble debe aprender a ser independiente. Nada mejor que un primer amor para comenzar a serlo, Limey- dijo Maud.

-¡Ash!- exclamo Limestone, derrotada- Mejor me regreso a dormir.

Limestone fue a su habitación y cerro la puerta.

-No esta de buen humor- dijo Pinkie.

-Ya se le pasará. Boulder me espera, toda esta discusión interrumpió nuestra lectura de cuentos- dijo Maud, avanzando a su habitación.

-Oh, bueno. Revisaré la lista una vez más y me preparare algo para cenar- dijo Pinkie, leyendo la lista de nuevo.

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Mientras tanto, Marble había llegado a la casa de Big Mac, que era muy pequeña y de un piso y quedaba cerca de un campo de manzanas que al frente tenía una enorme y magnífica mansión. La luz se encontraba encendida.

-Big…- lo llamo suavemente, junto a una ventana.

El corcel asomo su cabeza por la ventana. Sonrió al ver a Marble.

-Mi querida Marble, viniste- sonrió.

-Atravesaría montañas con tal de verte, amor mío- respondio Marble.

Big Mac salió de la casa y corrió a abrazar a Marble. En su boca sujetaba un girasol, que coloco en el cabello de la yegua.

-Una flor solar, para el sol de mi vida- dijo.

-Oh, Big. Me siento tan feliz de verte- dijo Marble, dándole un beso.

-Mi Marble. Solo con oír tu voz y ver tus bellos ojos, me olvido de mi situación económica- dijo Big Mac, regresándole los besos.

-Me enteré de que no es muy estable ¿El salario que ganan tú y tu hermana Applejack no es suficiente?- pregunto Marble.

-Apenas nos alcanza para comprar leña. Los señores Flim y Flam rechazaron mi solicitud para aumentar nuestro salario, pues aún les debemos dinero por el préstamo que me dieron para... - dijo Big Mac, interrumpiéndose.

-¿Para que pudieras regalarme esto, verdad?- pregunto Marble, sujetando su collar con tristeza.

-Eso no importa. No pude comprar una sortija para poder pedir ti casco frente a tus padres, pero al menos ese collar puede simbolizar el amor que sentimos uno por el otro- dijo Big Mac.

-Mi padre puede ayudar. No somos ricos, pero vivimos bien- dijo Marble.

-Mi abuela es muy orgullosa. No aceptará más prestamos de dinero- dijo Big Mac- mi hermana ha pensado casarse con el señor Silver Shill, quien podrá ayudar un poco nuestra situación.

-Pero el señor Silver es algo mayor para Applejack- dijo Marble.

-Ella lo ha decidido. Además, Applejack ha tenido mucho afecto por él desde antes- dijo Big Mac.

-Quisiera poder ayudarte en algo- dijo Marble- a mi hermana Pinkie no le importaría darte algo del dinero que gana como organizadora de eventos. Justo esta tarde, acaba de cerrar un trato con la señora Luna, quien le pidió que organizara la boda de su hermana Celestia con el señor Discord.

Big Mac se sorprendió. Recordó las palabras de Sombra, su plan para deshacerse de Discord y quedarse con Celestia. Algo le decía que dijera todo, que salvara al novio, pero recordó que era participante del plan para poder mejorar su situación y ayudar a su familia.

-¿Big, estás bien?- pregunto Marble.

-Eh… sí. Estoy bien. Te lo juro, querida Marble, no descansare hasta que nuestro amor este consolidado por las cadenas del matrimonio- dijo Big Mac, poniendo el casco de Marble sobre su pecho.

-Big, te amo- susurro Marble.

-Yo también- respondio Big Mac, abrazándola muy feliz, pero muy preocupado por lo que pasaría ese día de la boda.

NOTA DE LA AUTORA

Espero que les halla gustado.

Muy bien, regresaré a completar esta historia. Pero, empezarán mis clases y no tendré tanto tiempo, ténganme paciencia.

He visto la película del Conde de Montecristo. Me decepciono bastante, he leído resúmenes de la historia y en ninguna parte dice que Edmundo logra recuperar a Mercedes.

Luna planea la boda ayudada por Pinkie Pie.

Perdón si este capítulo tuvo más a las hermanas Pie, solo fue esta vez.

A Maud le corresponde el personaje de Herminie Danglars, la esposa de Danglars.