Canción de intro: Downplay-Save me

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De vuelta a las raíces.

La luz de parte de la ciudad se había ido y la causante no era más que el deseo de una chica por regresar a su lugar de origen. Sunset Shimmer cruzo el portal hacia Equestria y mientras lo hacía sentía una presión en el cuerpo, como si algo la empujara contra una pared y lo único que veía era una especie de túnel de fuego rosa que se expandía y parecía no detenerse, hasta que una luz al final de esta apareció y una vez llego a ella, solo sintió como su cuerpo se iba hacia adelante, apareciendo en una especie de bodega algo polvorienta entre un montón de cajas, pero Sunset dejo de prestarle atención una vez que miro abajo, con unos cuantos tambaleos dio unos pasos hacia adelante en cuatro patas.

-Por fin, estoy aquí-dijo en voz baja con ganas de gritar de felicidad de saber que después de tanto tiempo volvía a ser un poni, observaba que sus pies fueron remplazados por cuatro cascos y que en la parte de su cabeza tenía su crin como ella lo recordaba, tenía ganas de ver todo lo demás de ella, pero recordó que no había llegado hasta aquí sola-¿Criss?-pregunto en voz baja, ya que ella sabía que estaba en el imperio de cristal, hubiera sido muy tonto no tener eso en cuenta, pero la repentina aparición de Criss cambio un poco los planes-Criss-dijo preocupada, pero con la voz baja para no llamar la atención de los guardias.

-¡Sunset! ¿Tú también te transformaste? Qué raro, yo me sorprendí un poco cuando me vi en el reflejo de la ventana-dijo un poni de piel celeste con cabello negro de punta y con un tono alegre y una pequeña mochila en el lado derecho de su cuerpo.

-Shh no tan alto-dijo en voz baja

-¿Por qué?-dijo imitándola

-Ya te lo dije, este mundo es muy diferente al humano, y justo en el castillo en el que estamos no es muy conveniente que llamemos la atención-

-¿Estamos en un castillo?-dijo con entusiasmo.

-¡Si!-respondió en tono lo mas bajo posible, tratando de calmarlo-tratemos de salir de aquí sin llamar la atención, hay que ir a otro lugar-dijo dando la vuelta y asomándose por la puerta que daba a un pasillo con una larga alfombra-ahí están los guardias-empezó a analizar el lugar en busca de alguna salida-debe de haber alguna forma de salir-

-¿Que te parece por la ventana?-dijo Criss abriendo una ventana que llevaba a unos patios totalmente a oscuras.

-Creí que estaban aseguradas-

-Lo estaban, ahora ya no-revisaron por afuera de la ventana para ver a unos cuantos guardias que pasaban por ahí.

-Bien, pasan cada 4 segundos, podemos lograrlo-

-¿Ya has hecho esto antes?-preguntó Criss extrañado.

-Si, pero no recuerdo que aquella vez pareciera tan complicado-entonces salieron con cautela por uno de los tejados del castillo, bajando por cada uno que se encontraban, entrando y saliendo a travez de ventanas alasar y retrocediendo cada vez que veían un guardia. Conforme iban avanzando, mas complicado era pasar desapercibidos, se iban turnando para escabullirse cada vez que alguno notaba que alguien se acercaba, por lo que se mantenían en movimiento constante y apenas podían cuidarse las espaldas.

-¿Porque, de todos los posibles lugares que había teníamos que aparecer aquí?-preguntó Criss.

-Es una historia complicada, solo concéntrate-

-Y ¿Que paso con mi ropa?-

-¡Concéntrate!-

-¿Escuchaste eso?-dijo uno de los guardias poniéndose alerta, los dos ponis se ocultaron rápidamente detrás de una de las paredes del castillo, tratando de no hacer ningún ruido, casi conteniendo la respiración-Estoy seguro que escuche algo-

-¿Por donde?-preguntó su compañero, Criss y Sunset empezaron a pensar rápidamente en cómo escapar.

-Y ¿Ahora que?-susurro Sunset desesperada.

-¡Ahh! No tengo invisibilidad-dijo Criss mirando su teléfono y luego asomando un poco la cabeza por la pared-Pero, tal vez pueda distraerlos-entonces con el teléfono apunto hacia una puerta rápidamente y esta se asoto provocando mucho ruido.

-¡Por ahí!-

-Vamos-los guardias hecharon a correr hacia la puerta que se había cerrado a lo que Sunset y Criss aprovecharon para salir disparados hacia la puerta principal que daba a los jardines, ya una vez ahí se aseguraron que estuviera vacío.

-Que extraño, pensé que esto iba a estar infestado de guardias-

-Sssi, moví mas de una puerta del castillo-y continuaron corriendo por todo el camino de cristal hasta una puerta de barras enorme.

-¡Rayos! ¿Cómo vamos a abrir eso?-dijo Sunset preocupada.

-Ya esta abierto-

-¿Como sabes?-pero para sorpresa de la poni ,Criss se adelantó y dio un empujón rápido a la puerta.

-Adiviné-y sin perder tiempo, salieron cerrando la puerta enorme detrás suyo a toda prisa, hasta quedar fuera de la vista del castillo. Ya una vez estaban lo suficientemente lejos, ambos tomaron un respiro en medio de una de las relusientes calles de la zona.

-Ja ja ja que divertido-dijo Criss con una gran sonrisa-por un momento pensé que...WOOW mira este lugar-Criss se distrajo un poco al ver el enorme castillo y el pueblo deslumbrante-Ja sabia que tenía que venir, por un momento dude si debía hacerlo o no-empezó a corretear alrededor mirando con admiración todo lo que se encontraba, luego se dirigió rápidamente a Sunset-y mírame, nunca había visto que un cuerpo se pudiera transformar así-luego volteo hacia una vitrina de un local cercano-y los...ponis de aquí, son un tanto diferentes a los de mi mundo-dijo mirándose en el reflejo.

-Te lo estas tomando con demasiada calma-dijo Sunset aun jadeando del cansancio.

-¡Valla! Tienes un cuerno, se te ve bien-Sunset reaccionó a eso y se miro rápidamente en uno de los reflejos de la calle y efectivamente, ese cuerno se encontraba en su cabeza, ese cuerno que la había acompañado desde el día que nació hasta que decidió partir de allí, la unicornio no pudo evitar sentirse sumamente feliz, pues después de todo esa era ella y volvía a ser ella misma.

-Olle me podrías prestar tu teléfono-dijo volteando a ver al poni celeste. Criss alzo la ceja al escuchar eso-es que, quiero probar algo-Criss con algunas dificultades le entrego el aparato a Sunset y ella lo colocó en el suelo-me pregunto si aun puedo...-entonces puso concentración absoluta en el aparato, su cuerno empezó a brillar al igual que el teléfono, haciendo que este levitara a unos centímetros del suelo.

-Ooooh, telequinesis, impresionante-

-Si, tan sencillo como siempre-Sunset dirigió el teléfono hacia la mochila que Criss había tomado del almacén.

-Que suerte que encontré una de estas allí dentro, es muy complicado llevarlo teniendo estas cosas-dijo apuntando al frente con los cascos, Sunset redondeo los ojos pensando, "como si fuera tan fácil hacerlo con las manos" volvió a mirar hacia arriba, luego a el camino y a la arquitectura del lugar.

-No ha cambiado nada-dijo mirando el paisaje nocturno-sigue siendo el mismo imperio de cristal, sigue siendo la misma Equestria de siempre-se quedo sonriendo melancólicamente a la luna sin percatarse de que una figura poni con capucha, de estatura media los estaba observando.

-Olle, que hora será, no preste atención a eso cuando salimos-el encapuchado se escondió al oír la voz de Criss.

-Las 3:07 am-Criss se le quedo mirando a Sunset.

-¿Como lo supiste?-

-Mirando la luna-dijo caminando hacia su lado izquierdo.

-Claro-se quedo mirando la luna entrecerrando los ojos, tratando de entender lo que decía Sunset-¿No hay algún lugar donde pasar la noche?-

-¿Como que?-

-No lo se, algún hotel, una casa para alquilar, un puente donde se pueda estar bajo techo-dijo sin quitar la mirada de la luna

-Si, sígueme, conozco uno-

-Vale-siguió a Sunset sin apartar la mirada de la luna, hasta una pequeña choza que decía "casa habitación" cerca de donde estaban, ambos se fueron a sus respectivas habitaciones para descansar, tenían muchas cosas que hacer en la mañana, pero justo afuera de aquel local el poni encapuchado de piel morado oscuro con un mechón castaño saliendo por la capucha se perdió entre los árboles del bosque dirigiéndose al castillo de Cristal.

(...)

Ya era de mañana y en el mundo humano el sol se asomaba por encima de los campos de una granja en las afueras de una ciudad.

En una pequeña casa de por ahí, dos chicas dormían plácidamente mientras una de ellas estaba de pie caminando de un lado a otro, preocupada y sosteniendo su teléfono, marcando una y otra vez. La rubia recién empezaba a abrir los ojos y a estirarse, cuando vio a Rarity ir de un lado a otro con cara preocupada y teléfono en mano.

-Rarity ¿Que te sucede?-dijo algo soñolienta

-¡No responde!-

-¿Que?-

-Sunset, no responde mis llamadas-dijo en tono dramático y preocupada.

-¿Sunset, Sunset Shimmer?-

-¿Que es todo ese ruido?-la chica de cabello multicolor despeinado, se levanto de la bolsa de dormir, dando un vostezo largo.

-¡Rainbow! Es horrible-dijo tomando a la chica por los hombros.

-¿Se te rompió otra uña?-

-No, mucho peor, llevo casi una hora marcando y Sunset no responde-

-Tranquila dulzura, aún es muy temprano, quizá esté dormida-trato de razonar la campirana.

-Applejack, estamos hablando de Sunset Shimmer, casi siempre llega antes que nosotras a la escuela, despertar tarde no es algo que ella haga-trataba de mantener la compostura, pero su preocupación era algo que no se podía ocultar.

-Y si se le acabo la batería-respondió Rainbow.

-También le envié mensaje y dice que esta conectada y ni siquiera los a visto-dijo marcando y poniendo el teléfono en su oreja.

-Tal vez deberíamos ir a buscarla y...hablar con ella-propuso la rubia.

-Si, creo que es tiempo de arreglar las cosas, después de todo, prometimos cuidarla-dijo Rainbow tratando de sonar indiferente. Rarity solo acepto moviendo la cabeza y guardando el celular en el bolso.

-De acuerdo, mañana llamare a Fluttershy y a Pinkie-la campirana bajo de la cama-mejor que estemos todas juntas-una vez Applejack dijo eso las chicas se prepararon para irse cada una a su casa ya que tenían algunas cosas que hacer pero por alguna extraña razón, todas no pudieron sacarse a Sunset de la cabeza, realmente sentían que algo no cuadraba y no podían esperar a verla, deseando que estuviera bien.

(...)

Mientras tanto en Equestria, una poni de piel anaranjada y crin rojo con amarillo, se levantaba mirando el techo de la habitación, temiendo que eso fuese un sueño y que en cualquier momento se fuese a despertar, pero dio una gran sonrisa al percatarse de que no era un sueño, era real y por primera vez en mucho tiempo, ella se levantaba de la cama con gran alegría y con mucha energía, una vez se dio una ducha, salió de el cuarto para irse a desayunar, pensó en ir por Criss pero cuando abrió su habitación el no estaba, pero esto no la preocupo, por lo regular aparecía siempre en el momento menos esperado.

El desayuno fue excelente para Sunset, si en el mundo humano la comida estaba bien, no se comparaba a lo que podían llegar a hacer en este lugar, cereal, jugo exprimido a la perfección y pankeques, ella no había tenido un desayuno tan placentero en mucho tiempo, realmente era bueno volver a casa.

Una vez termino de desayunar se dispuso a salir de la pequeña choza.

-¡Olle! Perdona, pero hay que pagar-se oyó la voz de una poni joven.

"ah es verdad" pensó Sunset dándose un golpe en la frente-Perdona se me había olvidado-

-Olvidado que cosa-

-¡Criss!-exclamo Sunset al escucharlavoz alegre del poni celeste-me alegra que estés aquí, necesito que te quedes un rato en lo que voy a por algo de dinero-

-De acuerdo-respondiodespreocupado, apenas dijo eso, Sunset concentro magia en su cuerno y desapareció en una chispa-impresionante-dijo calmado, volteo encontrandose con la poni de piel morada cristalina y crin blanca risado, mirándolo fijamente-¿Que pasa me manche con algo?-dijo revisándose el cuerpo.

-Eres nuevo aquí verdad-

-Si, yo diría que demasiado-miro hacia atrás donde estaba el castillo.

-¿De donde vienes?-

-Lejos-contestó rápidamente-muy lejos...no sabría decirte exactamente donde-

-¿Viajas mucho?-

-Si señora, normalmente viajo solo pero tenía que conocer este lugar y ella me trajo aquí-

-¿Que lugares conoces?-preguntó con curiosidad.

-Créeme si te lo dijera no me creerías-dijo con esa sonrisa alegre-de hecho he escuchado leyendas muy buenas sobre esos lugares-

-¿Enserio? ¿Que clase de leyendas?-

Asi siguieron durante un rato hasta que se escucho un destello detrás de Criss y al voltear se encontró con Sunset con un pequeño bolso, jadeando un poco cansada.

-¡Llegaste!-

-Aquí tiene, gracias por dejarnos quedar-dijo poniendo unas monedas en la mesa y ambos partieron hacia la salida.

-De nada, vengan cuando quieran-dijo moviendo la pesuña de un lado a otro y dandole una mirada coqueta a Criss.

-Puedo saber de donde sacaste ese dinero-

-Fui rápido a mi casa y saque un poco de mi caja fuerte-

-¿Podías tele-transportarte a tu casa y nos quedamos a dormir aquí-

-¿Acaso tu podías tele-transportarte también?-

-Dame un segundo-de la mochila que tenía saco su teléfono con ciertas dificultades y lo reviso-no, no podía-dijo decepcionado-de cualquier forma a ¿donde vamos?-

-A la estación de tren, tenemos uno que tomar-

-Genial, amo los trenes-dijo Criss radiante de alegría.

-¿Y tu que tanto le decías a la poni de la choza?-

-Las historias de los lugares que visite-

-¿Y son verdad?-

-Si, solo que no lo sabe-Sunset alzo la ceja al escuchar eso-le dije que eran leyendas-dijo con algo de nerviosismo.

A Sunset siempre se le activaba un tic nervioso cada vez que el decía algo como eso, por alguna razón sentía que ocultaba algo, el hecho que fuera tan misterioso la hacía pensar mas en quien era realmente.

Una vez llegaron a la estación de tren, Sunset pago los boletos y partieron a medio día hacia aquel mítico lugar que Sunset había anhelado desde hace ya un tiempo y siempre pensaba en regresar allí, el viaje fue bastante tranquilo, Sunset mataba el tiempo con un libro que saco de su casa, mientras Criss revisaba de arriba ha abajo el tren, mirando a los pasajeros y la estructura del mismo, hasta que se quedo dormido de lo cómodo que resultaba aquel tren y de lo placentero que resulto el viaje.

Despues de un viaje de dos horas, el tren se detuvo.

-llegamos-Sunset despertó a Criss para luego bajar a la estación, ya en la parada se encaminaron hacia la salida.

-¿Donde estamos?-

-En Canterlot, cerca de donde yo estudiaba-

-Que ciudad tan chula-

-Si y tenemos que hacer una visita al castillo de Canterlot-

-¡Otro castillo, genial!-

-Si pero-Sunset se puso a pensar por un momento-escucha, será mejor que me dejes hablar a mi, realmente no se como vallan a reaccionar si nos ven a ambos entrar-

-¿Por qué lo dices?-Sunset se quedo un rato en silencio, pensando en como iba a ser su visita y en como iba a actuar Celestia al verla.

-Te dije que tenía algunas cosas que resolver y estoy algo nerviosa-

-Ah es cierto y te yo dije que no me entrometería, no hay problema-siguieron el camino hasta llegar a las puertas del imponente castillo de Canterlot, era tan majestuoso que Criss casi se va de espaldas de tan solo observarlo-este lugar es increíble-dijo sorprendido y con esa sonrisa, Sunset se acercó a los guardias que vigilaban la entrada.

-Hola, vengo a ver a la princesa Celestia-

-¿Para que asunto?-preguntó el guardia con autoridad.

-Solo quiero hablar con ella-los guardias cruzaron las miradas un tanto extrañados.

-Lo sentimos, pero la princesa Celestia esta muy ocupada y no puede atenderlos por ahora-

-Por favor-

-Lo sentimos-Sunset trataba de convencerlos pero no conseguía pasar y decirles que ella fue alguna vez la alumna estrella de Celestia no le ayudaría en nada.

-¿Que ocurre?-se oyó una voz femenina.

-Esto ponis dicen que tienen que hablar con la prin...-el guardia se detuvo en seco al ver a una pegaso de gran estatura color azul oscuro y crin cristalina ondeándose con elegancia-Princesa Luna-los guardias hicieron una reverencia seguidos de Sunset y luego Criss.

-¿Por qué me estoy inclinando?-preguntó este confundido pero Sunset le puso el casco en la nuca manteniéndolo con la cabeza baja.

-¿Que la hace aparecer en medio del día?-preguntó nerviosamente uno de los guardias mientras se enderezaba.

-Estaba en el castillo, pero me llamo la atención...-entonces volteo a ver a a la poni de crin rojo y amarillo como el fuego-tu eres Sunset Shimmer ¿No es verdad?-

-¿Me conoce?-dijo poniéndose roja del nerviosismo.

-Por supuesto, dime ¿Que te trajo de regreso?-

-Bueno yo...-a Sunset no le salían las palabras, durante todo el viaje se había mentalisado para el momento en el que estuviera en el castillo, pero todo eso se evaporo en un momento-yo...-

-Ella vino en busca de...la Princesa Celestia ¿Me habias dicho?-continuó Criss a lo que Sunset solo respondió sí con la cabeza.

-Ya veo,supongo que si solo serás tu, puedes pasar-le hizo una seña a los guardias y estos abrieron la puerta.

-Bien yo haré un poco de turismo y también me llevare algunas monedas para el camino-dijo Criss tomando un pequeño puñado de monedas del bolso de Sunset y saliendo disparado a inspeccionar el pueblo.

Sunset entro lentamente hacia el castillo, no hacia falta decir que el miedo la invadió, camino en silencio a lado de la Princesa Luna, ella la miraba con curiosidad, si las historias que había oído de ella eran ciertas, no parecía ser la misma de la que le habían contado.

-Estas nerviosa-

-Si, demasiado, en realidad, no estoy segura de como valla a resultar esto-

-Depende de como quieres que termine-

-Quiero que termine bien, aunque, no se que es terminar bien-dijo Sunset bajando la mirada.

-Sabes algo, no somos tan diferentes-

-Claro que si, usted ayudo a Celestia a defender el Reino, tiene la habilidad de controlar la luna y es adorada por toda Equestria-

-Tal vez, pero yo también he hecho cosas de las que no estoy orgullosa-se detuvo para concentrar su atención en Sunset y la tomo por encima de la pesuña-y hasta ahora sigo en deuda, pero si ella me perdono, estoy segura que hará lo mismo contigo-la despeino amistosamente y siguieron caminando, Sunset entendía porque Luna era Princesa, ella bien podría ser tan sabia como su hermana.

Al llegar a la puerta por donde estaba el trono, Sunset se dio un respiro antes de abrirla.

-¿Estas lista?-la poni anaranjada inhalo y exhalo hasta calmarse y asintió con la cabeza-no te preocupes, estaré a tu lado en todo momento-entonces las dos abrieron la puerta y justo enfrente suya se encontraba una Pegaso blanca con cabellera de colores claros ondeándose con elegancia, parecía que estaba haciendo alguna especie de papeleo, levantando un puñado de hojas y una pluma a base de telequinesia-hermana hay algo que tengo que decirte-

-Si-

-Pero antes tienes que bajar el papeleo-

-Claro-Celestia puso la pluma y el tomo de papeles alado del trono-bien ¿Que es lo que querías?-pero una vez Celestia alzo la vista, se encontró con la poni anaranjada-santo cielo-dijo levantándose del trono y caminando lentamente hacia ella-¿Sunset?-

-Princesa...-a Sunset se le hizo un nudo a la garganta, a pesar de que se estuviera preparando, justo en el momento de la verdad se quedó completamente muda.

-Realmente eres tu-

-Princesa...yo sole he venido...bueno...estoy aquí por...-pero no pudo terminar la frase, ya que solo sintió un cálido abrazo por parte de la Princesa, quien estaba sonriendo y entrelazando los brazos con fuerza.

-Que bien que estés aquí, me preocupaste por un largo tiempo-Sunset no se esperaba eso, lo único que hizo fue devolver el abrazo.

-Me alegra volver-se quedaron en el abrazo por un largo rato, haciendo que Luna se le salieran las lagrimas de tan conmovedora escena.

(...)

El sol se ocultó y en el mundo humano, un hombre iba caminando sigsaguando por una calle a oscuras, era obvio que había salido de alguna taberna, el tipo vigilaba el lugar sombrío, el solitario iba con ombros caídos y mirada muerta, como si estuviese sumamente cansado, solo deseando regresar a su asqueroso departamento para poder dormir al fin.

¡CLAP!

Escucho una lata callando cerca de unos botes de basura, pero no le presto atención y siguio su camino, unas gotas de lluvia empezaron a caer empapando al extraño.

-Maldita época de lluvias, solo esto me faltaba-el hombre se quejó con una voz que parecía no tener ganas de caminar, una sensación de escalofríos le recorrió el cuerpo y constantemente miraba hacia atrás, casi perdiendo el equilibrio a causa de los efectos de la bebida, en una de esas, camino de espaldas para ver si no lo seguían-no seas estupido no hay nadie hay-se dijo a si mismo, volteo de nuevo y doblo en una esquina, atravesando varios callejones, el hombre seguía teniendo aquella sensación de ser seguido y constantemente volteaba-¡DEJA DE SEGUIRME QUIEN QUIERA QUE SEAS!-se tambaleaba cada vez que hablaba-¡SI SERA MEJOR QUE TE ALEJES MALDITO BASTARDO-

-Tu no estas en posición de exigir nada-Se hizo presente una voz macabra haciendo que al borracho se lee helara la sangre-así que será mejor que te cierre esa puta bocado una vez-

-¡AAAH!-el hombre sintió un ardor tremendo en la espalda provocando que este diera un grito desgarrador-AHHH-el dolor se hacia cada vez mas intenso hasta que de un zarpazo, la mano del extraño que estaba detrás suyo atravesó su pecho violentamente salpicando el suelo de sangre y provocando que este bajara la cabeza muerto en un instante.

El asesino era de piel grisácea con algunos tatuajes rojos y un mechón plata salía por el gorro del impermeable. El tipo hizo brillar sus manos y sus tatuajes que estaban dentro del cadáver y esto provocó que las pupilas del mismo muerto se desvanecieran.

-Que buen bocadillo-entonces soltó el cuerpo en un bote de basura como si se tratase de un desperdicio y camino hasta desvanecerse y aparecer en una cabaña cerca del bosque y abrio la puerta.

Una vez dentro, se acercó a una habitación al fondo de la sala, y al entrar se encontró con un montón de papeles y recortes pegados en las paredes, dejando un enorme hueco en la pared de en medio.

El extraño tomo papel y tinta y dibujo un símbolo de una V con una cruz invertida en medio, para luego hacer brillar sus tatuajes de nuevo y posteriormente en la pared aparecieron unas letras rojas.

"Tic tac...Tic tac hace el reloj, y el tiempo avanza, la historia puede tomar rumbos distintos, pero para eso se necesita de un escritor y ese escritor ya tiene el final hecho"

El texto desapareció dejando otro en su lugar.

"El equilibrio y orden de las cosas están en juego, la anarquía se levantara y con el ocurrirán muchas perdidas"

El texto volvió a ser reemplazado.

"El soldado, también llamado maestro, será vital en la historia en la lucha contra los enemigos presentes, el tiene muy en claro su destino y su pasado lo perjudicará con el tiempo"

"Un ángel regresará a su hogar para nunca volver, su despedida será un evento trágico, seguido de secuelas"

El texto se iba reemplazando por otro muy distinto.

"La guerra de los mundos provocará la caída de un imperio y esto no hará mas que el tuersimiento de la realidad"

"La caída del soldado será inminente y el orden o el colapso de la realidad, dependerá de eso"

"La historia ya esta hecha y cualquier intento de cambiarla solo provocará graves consecuencias, Tic tac, el tiempo se acaba y el final, depende del escritor"

Tras eso último, el tatuado dio una risa psicopata a la pared, extendiendo los brazos como si ese, ubiese sido el presajio de una victoria inminente.

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Nota:Hasta aquí el capítulo de la semana a partir de ahora se empezaran a mostrar el lado un tanto crudo de este universo y el comienzo de los problemas posteriores.

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