Luz de Luna.

Capítulo 9. Escultura.

Así como llego la tormenta de origen desconocido seso, Celestia junto a varios de los pegasos encargados del clima investigaron el origen de dicha tormenta, pero, no pudieron saber que o quien la provoco, cosa que solo genero muchas dudas y ninguna respuesta.

Cuando Celestia y los demás ponis se retiraron de la zona del bosque, Ángela se dirigió para allá para ella hacer su propia investigación, ella salió con su traje puesto, en caso de que alguien la viera. Cuando ella llego pudo presenciar un claro escenario de combate, árboles derribados por donde fuera, marcas de garras, y muchas huellas de patas de alguna vestía y cascos de ponis. Ángela empezó a revisar detenidamente cada una de las huellas, evaluándolas en su mente.

-estas marcas… no recuerdo haber visto algún animal como este, ni siquiera en el bosque negro, y ¿quiénes serán los ponis que lo perseguían?... sean quienes sean ellos, debieron ser muy avilés, para poder derrotar a una criatura de semejante tamaño- piensa Ángela mientras observaba una pisada del tamaño de una tapa de basura.

-¿esto es algo de lo que deba preocuparme? Aún recuerdo esa noche, la noche en lo que esos ponis extraños se llevaron a Lucian… esos ponis también eran muy avilés, ¿Quiénes sean ellos?- piensa mientras miraba las pisadas de ponis, Ángela empieza a sentir algo de preocupación por lo que paso aquí, ella tiene una ligera idea de quienes pueden ser, dado a que Lucian (un poni que conoció hace muchos años cuando huyó de casa) le conto un poco de ellos, Ángela siguió merodeando por el bosque un tiempo cuando decide que es hora de irse.

-Bueno, sean quienes sean, ya se fueron... Tengo que regresar a casa, con esto de la tormenta y este nuevo incidente del bosque mi madre no ha de tardar en buscarme en mi cuarto, ella cree que estoy encerrada esculpiendo algo con cajas de cartón- piensa Ángela mientras abría un portal frente a ella y lo atravesaba para retornar a su escondite y dejar sus cosas de Mare Do Well.

Pero en todo el momento que ella estaba investigando la escena del crimen, no se percató que estaba siendo observada desde las sombras por un poni encapuchado, una vez que Ángela abandono la escena este salió de su escondite.

-jeje, creo que te encontré, reconocería el aroma del asimilador en cualquier sitio- piensa el poni encapuchado y una sonrisa se marca en su cara mientras observaba la zapatilla que encontró en la noche, este le echa un último vistazo a la zapatilla- en definitiva es de ella-

Mientras tanto en Canterlot, Ángela se transporta hasta su cuarto, una vez hay, ella se sienta en su mesa, toma un bote de pegamento blanco y un par de cajas de cartón.

-Creo que hoy descansare un poco, necesito olvidarme de esto... después de todo, con la preocupación de mi madre por la tormenta no tendré mucho tiempo para ausentarme por el día de hoy- dice Ángela mientras con su magia desbarata una de las cajas de cartón, haciéndola pedazitos y coloca los trozos en un tazón de plástico (el cual estaba manchado con pintura y papel picado). Ella vierte sobre el cartón picado una tasa de pegamento blanco y una tasa de agua, revuelve la mescla con sus cascos hasta que se forma una pasta café grisácea, una vez hecho esto ella se dirige al baño para quitarse el exceso de pasta que tenía embarrado en los cascos, es entonces que ella se mira al espejo y lo nota.

-¿qué es esto?- dice Ángela mientras con su magia levitaban unas pinzas para pestañas y se arranca un par de cabellos, estos eran totalmente blancos.

-¿Canas?... jeje, esto debe ser una broma, los alicornios no envejecen y aun si lo hiciéramos no tengo más de 16 años de edad, ni siquiera ponis terrestres de mi edad presentan canas- dice Ángela sin tomarle mucha importancia. Ella sale del baño y se dirige hasta la pasta que acababa de hacer, ella usando su magia levita una tabla de madera de 40 por 50, (también manchada con pintura).

-bueno… que hago ahora, hacia tanto que no hago una figura de papel mache- dice Ángela muy pensativa mientras mira a su alrededor para inspirarse de algo. -¡Ya seeeee!- dice ella y se pone cascos a la obra, ella levita un royo de alambre y con el cual hace la estructura de la figura que estaba por realizar, una vez hecho esto usa la pasta de cartón que hizo para rellenar la estructura de alambre y comienza a darle forma y detalles a su figura, le toma un par de horas, pero finalmente completa su figura.

-Bueno… había olvidado lo mucho que me gustaba hacer esto, jejeje, ya hacía tiempo que no hacia esto, se siente bien- dice Ángela con orgullo mientras se limpia el sudor de su frente y se queda admirando su obra.

-lo malo del papel mache es que tarda días o incluso semanas en secarse, ¡pero ya se lo quiero enseñar terminado a mi mami!- dice Ángela cual potrilla. Ella se queda observando la figura por un tiempo corrigiendo algunos errores menores y detallando un poco más su pieza.

-Creo que ya sé cómo acelerar eso, usare un hechizo de calor que aprendí recientemente de ese libro, solo tengo que tener cuidado de no quemar la pieza, pero si lo hago bien, esta figura se deshidratara en solo unos minutos- piensa Ángela y junta sus cascos, luego empieza a tallarlos uno contra el otro, para luego separarlos, de repente de sus cascos brota una llamarada. Ángela no evita dar un grito de la impresión, esta empieza a concentrarse para disminuir el calor haciendo que la llamarada desaparezca y en su lugar sus cascos tomen un brillo rojizo por el calor que estaba concentrado en sus cascos.

-Bueno… supongo que con este calor será suficiente… ¿no?- piensa Ángela mientras observaba sus cascos, ella empieza a masajear su figura con sus cascos calientes, haciendo que de esta forma el papel se deshidrate más rápido y tome su forma endurecida, casi al instante se da cuenta de que es demasiado calor por lo que baja la intensidad lo más que puede. –perfecto, ahora solo tengo que hacer esto hasta que esté totalmente seco-

2 horas después.

-¡AAAAAAAAAA YA ME CANSEEEEEEEEE! ¡Pero al menos ya termine de secar la figura!- dice Ángela mientras toma unas pinturas y algunos pinceles.

Otras 2 horas después.

Ángela se encontraba recostada en su cama, muy exhausta, con todos los cascos y parte de la cara manchada con pintura.

-Uf, por fin, esto es más cansado que pelear contra pandilleros en el callejón- dice Ángela exhausta mientras volteaba a ver a su reloj de media Luna- ¡ya son las 8, AAAAAA, SE ME FUE TODO EL DIA EN ESTOOOOOOOO!- dice ella exaltada y brinca hasta su espejo y se mira toda desaliñada y llena de pintura.

-¡Si mamá me ve así dirá que parezco una potrilla de 5 años!- dice Ángela y corre a ducharse, dado a que la hora de la cena era en 30 minutos, una vez aseada ella se queda admirando la figura que acababa de realizar.

-Como extrañaba hacer esto- dice Ángela con nostalgia- ¡Jeje, ya quiero ver la cara de mami cuando lo vea!... pero que digo… ya parezco una potrilla de 8 años jejeje- dice Ángela mientras da unos leves golpecitos a la figura y comprobar si ya se había secado, ella se da cuenta que no está totalmente seca al ver que un poco de pintura se le embarro en el casco, por lo que ella hace nuevamente el truco de calor que hizo anteriormente para secar la pieza lo más pronto posible, esta vez solo le toma 15 minutos, una vez lista, ella toma su figura muy contenta y con orgullo en su rostros se dirige al comedor en donde se encuentra con su madre y su tía Celestia.

-¡Wow, cariño, esta precioso!- dice Luna al ver la figura (una escultura de ella y Ángela cuando era una bebé, está la hizo en base a un cuadro que ella tenía en su repisa)

-¡es hermoso!- dice Luna.

-gracias madre, me tomo todo el día en hacerla- dice Ángela.

-¿Qué opinas hermana?- dice Luna.

-le quedo muy bien, has mejorado mucho cariño- dice Celestia.

-gracias- dice Ángela.

-¿y ese milagro? Digo… ya hacía tiempo que no asías una de tus figuras- dice Luna.

-he estado ocupada- dice Ángela.

-¿haciendo qué?- dice Celestia.

-Em… yo… em… ¿Qué hay de cenar? jejeje- dice Ángela y se muerde el labio.

-pay de piña- responde Celestia.

-¿Enserio? que rico- dice Ángela.

-si tú sabes cómo le gusta a tu tía los pasteles- dice Luna.

-Esto no es un pastel, es un pay- dice Celestia.

-como sea, el punto es que fue tu idea cenar esto- dice Luna y ríe.

-jejeje si como sea- dice Celestia mientras se sirve su cuarta rebanada.

-ejem, hermana, no le ibas a decir algo a Ángela- dice Luna

-oh si… Ángela, en una semana se inaugurara en Manehattan el primer tren eléctrico- dice Celestia.

-Aja… y que con eso- dice Ángela mientras se sirve una rebanada de pay.

-¿quería saber si te interesaría ir con migo a la inauguración?- dice Celestia.

-ir a Manehattan solo para verte cortar un listón, no gracias tía- dice Ángela.

-no solo cortare el listón, también me invitaron a subir al tren, junto a otros ponis importantes de la ciudad para dar el primer recorrido, creo que sería interesante para ti ¿no crees?- dice Celestia.

-Em, no lo sé tía…-dice Ángela.

-por favor hija, quiero que salgas más seguido de aquí, todos los días te la pasas en el bosque o en tu cuarto, por favor quiero que salgas más seguido- dice Luna

-no lo sé mamá, esto, no me convence la idea, será en otra ocasión, además, además tengo que ir con Skira (la hija de Shining y Cadance) al imperio de cristal para elegir mi vestido de la gala del galope que es en un mes- dice Ángela como pretexto.

-todavía falta un mes para eso- dice Luna.

-Bueno… em- dice Ángela.

-por favor acompaña a tu tía, será divertido- dice Luna en un tono suplicante.

-está bien mamá- dice Ángela con sumisión.

Mientras tanto en la cueva guarida de Mare Do Well. Se encontraba un intruso, el poni encapuchado había encontrado su guarida y estaba revisando las cosas que tenía.

-interesante, se nota que es muy fan de los comics, no sabía que en este mundo también avía algo así- dice el poni encapuchado mientras observaba los trajes de Mare Do Well y la colección de comics de Ángela. El poni sigue rondando por la guarida y se topa con el libro de encantamientos.

-¡imposible de donde saco esto! Estos libros solo los tienen los hermanos de sangre y "ella"!- dice el poni mientras ojeaba el libro –no creo que sea un hermano de sangre, esto, todo esto, es demasiado inocente para ser alguien que haya escapado de sus cascos, incluso puede que nunca los haya conocido-

El poni sigue merodeando y revisando las cosas, y se encuentra con la bodega de black Beauty (flor negra con la cual Ángela hace esa sustancia que se inyecta con frecuencia)

-Pero que tenemos aquí, una adicta al veneno del black Beauty, es eso o es una acecina serial cuya arma principal son dardos venenosos- dice el poni encapuchado-¿por qué no me sorprende?... aquí hay suficiente como para acecinar a 1000 ponis-

-Veamos que tienes en tus cajones- dice el poni mientras se acerca aun buro y revisa y se encuentra con un álbum de recortes de periódico donde vienen recortes y fotografías de todo lo que Ángela a hecho como Mare Do Well, y entre todas las demás cosas se encuentra una fotografía de Ángela y Luna- esto si es interesante en verdad jejeje-