Bueno. Ya paso otra semana, y aquí está el nuevo capítulo de mi fanfic ¡Disfrútenlo!

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Capítulo 7. El día de Corazones y Cascos

Melody no podía creerse que ya hacía un mes que su ex mejor amiga en Ponyville, Applejack no le hablaba.

Sin embargo, el hecho de no poder ir a Sweet Apple Acres no había frenado su relación con Big Macintosh, ya que el poni rojo intentaba ir a verla para estar juntos.

Este hecho había influido negativamente en su relación con Fluttershy, ya mala con anterioridad. Siempre que la pegaso la veía por el pueblo le miraba con mala cara y Melody intentaba que este hecho no la entristeciera.

Cuando Spike tenía tiempo libre, iba a ver a la unicornio, y, junto con Pinkie Pie ensayaban la canción que los tres le tocarían a la princesa Twilight el Día de Corazones y Cascos. Faltaba sólo una semana para esa fecha, y el dragón había decidido cantar la canción aquél día como regalo.

Aquel martes después del ensayo, Rarity acudió a ver a Melody. A la unicornio rubia le sorprendió mucho este hecho.

"¿A qué se debe tu visita?"

"Perdona por robarte tu tiempo. Pero necesito desesperadamente de tu poder"

"¿Mi poder?"

"He roto con mi novio. Era tan arrogante y falso… ¡Fue horrible!"

A Melody le pareció que Rarity estaba actuando de una forma demasiado melodramática, pero no dijo nada.

"El caso es" continúo la unicornio de la crin morada "Que necesito que con tu poder me ayudes a encontrar al corcel de mis sueños"

Melody no quería ayudarla. Para empezar ella le insinúo que no tenía posibilidad de salir con Big Macintosh, y luego le había interrogado sobre su presunta relación.

"Mi poder no funciona así como así" se excusó, pero Rarity no iba a rendirse tan fácilmente.

"¿Tienes idea de todo lo que sufrí en el amor? Cuando era joven soñaba con casarme con el Príncipe Blueblood, hasta que lo conocí en la Gala del Galope y pude ver lo arrogante que era en realidad. Luego Trenderhoof se enamoró de Applejack y no de mí; y aunque salimos un par de veces él no se enamoró de mí"

El relato de la unicornio diseñadora no hizo cambiar de opinión a la unicornio de crin rubia, pero como vio que no iba a dejarla tranquila hasta salirse con la suya finalmente cedió.

"Está bien. Te ayudaré"

"¡Es fantástico! Te prometo que te haré un vestido espectacular como agradecimiento"

"Te ayudo porque quiero, no por interés"

"Aun así lo haré"

Las dos unicornios salieron a la calle.

Hacía un día precioso. Todos los ponis se encontraban fuera. Seguro que alguno de ellos debía estar destinado a Rarity.

"Bueno, querida ¿Cuándo vamos a Canterlot?" preguntó Rarity.

"¿Para qué quieres ir a Canterlot?" le contestó Melody con otra pregunta.

"Es obvio que mi amor se encuentra allá entre el glamour y la clase"

"¿Por qué no empezamos por Ponyville?"

Melody trataba de mantener el tono amistoso, pero la superficialidad y el refinamiento de Rarity la ponían cada vez más nerviosa.

"¿Crees que mi amor verdadero está entre ponis tan… campechanos?"

"¿¡Quieres que te ayude o no?!" preguntó la unicornio rubia con la clara intención de zanjar la discusión "Tengo mucho que hacer, así que si no apoyas mi sistema me iré a casa"

Ante esta clara amenaza, Rarity finalmente decidió ceder y dejarse aconsejar.

Las dos caminaron por el pueblo hasta tres veces, pero era inútil. Ninguno de los ponis con los que se cruzaron eran compatibles con Rarity; así que finalmente se vieron obligados a viajar a Canterlot. A pesar de que Rarity conocía a la perfección la ciudad y a sus habitantes, estaba convencida que con ayuda de Melody sabría quién era su poni especial.

Al llegar ambas recorrieron la ciudad. La unicornio de crin rubia no notó en ningún momento nada especial en su cuerno.

"¡No me extraña!" pensó "Todos estos ponis son unos clasistas y superficiales a más no poder"

Tras dos horas Melody dijo que se tenía que ir a casa. Rarity le suplicó que se quedase en su casa esa noche, pero la unicornio rubia no estaba por la labor; lo único que quería era volver a Ponyville.

En ese momento, un unicornio muy bien vestido acompañado por otra unicornio de larga crin rosada saludó a Rarity y se acercó para hablar con ella.

"Rarity, querida ¿Crees que tendrás listo el traje que te encargué para el Sábado?"

"Sí, Fancy. No te preocupes. Realmente va a quedar espectacular"

"De eso no me cabe duda. Si lo haces tú seguro que es magnífico"

Justo entonces el cuerno de Melody emitió un pequeño destello y los ojos de Rarity brillaron emocionados.

"¡Mi poni especial! ¿¡Dónde está?! ¡¿Quién es?!"

"Pues…todo parece indicar que Fancy Pants"

Habiendo vivido en Canterlot la mayor parte de su vida hasta unos meses atrás, era imposible que Melody no conociese a Fancy Pants. Era una celebridad del lugar, por no decir en toda Equestria.

Rarity estuvo a punto de desmayarse de la emoción. Ella había conocido a Fancy Pants de adolescente, cuando se hospedo en el castillo. Él la había elevado socialmente y la había defendido de los ataques de los ponis de clase alta.

Melody por su parte no estaba muy segura de esta relación.

"¿No crees que es un poco mayor para ti?"

"Diez años no son muchos, querida"

"Depende de cómo lo enfoques" pensó Melody, aunque no lo dijo en voz alta.

"Bueno ¿Entonces cuando nos unes para siempre?"

"¿¡Qué?!"

"Tu poder es enamorarnos ¿No?"

Melody estaba empezando a desesperarse.

"Rarity, mi poder no funciona como tú te crees. Yo solo puedo saber cuándo dos ponis pueden llegar a sentir amor verdadero el uno por el otro, pero yo no puedo enamorarlos. Eso depende de ellos"

"¿Me estás diciendo que voy a tenerme que ganar yo el corazón de Fancy Pants?"

"Ajá"

"¡Me va a dar algo!" exclamó la unicornio de crin morada mientras fingía un desmayo.

Para ayudar a Rarity, Melody la acompañó a un club exclusivo donde Fancy Pants se encontraba.

"Rarity estoy súper-cansada. ¿No podemos irnos a la cama y seguir mañana?"

"¡De eso nada! ¡Tiene que ser mío!"

Rarity apareció entonces en escena con un vestido precioso elegido cuidadosamente para la ocasión entre su amplio vestuario.

"Luces estupenda, querida" le halagó Fancy.

"Oh, muchas gracias"

Rarity decidió entonces poner en práctica uno de los consejos que Melody le había dado:

"¿Por qué no me enseñas que hay afuera? Me han dicho que hay un jardín de rosas fabuloso"

"Por supuesto. Salgamos afuera y te lo mostraré"

Y ambos salieron afuera mientras Melody los observaba desde dentro. La luna brillaba ya en el cielo, aunque no era de noche del todo (Seguramente la Princesa Luna había decidido hacer su trabajo antes de tiempo) y la temperatura era ideal.

"Mi plan ha sido perfecto" murmuró Melody "Con suerte no pasen de esta noche sin ser pareja"

"¿¡Así que esto es cosa tuya, no?!"

La unicornio vio que quién le había hablado era la acompañante habitual de Fancy Pants, conocida como Fleur-de-Lis.

"Ahora por tu culpa Fancy Pants no me presta atención. ¡Y eso que yo siempre estoy con él y no como esa estirada de Rarity a quien los novios no le duran más de una semana!"

"¡Otra vez no!" pensó Melody "¿Por qué los chicos a los que mi don señala están tan cotizados?"

"¡Eres un arpía, igual que Rarity!" le gritó Fleur con furia.

"¡Ni de lejos soy como ella!"

"Pues…eres una bruja"

Melody no quería pasarse la noche discutiendo con una estirada de Canterlot, así que aunque era muy tarde ya, salió del club lleno de unicornios esnobs y se dirigió a la estación para coger el último tren de vuelta a Ponyville.

El resto de los días pasaron rapidísimo hasta que por fin llegó el día de Corazones y Cascos.

Desde primera hora de la mañana Sugarcube Corner se llenó de ponis que iban a comprar un dulce para su poni especial. Los señores Cake estaban hasta arriba de trabajo, pues la ausencia de Pinkie Pie (que ahora vivía con su marido) era bastante notoria.

Las parejas recorrían las calles de Ponyville disfrutando del día especial.

Melody esperaba encontrar una gran cesta llena de manzanas o flores de parte de su amado, pero esto no sucedió, así que con tristeza se reunió en la estación con Pinkie Pie para coger el tren rumbo a Canterlot donde se reunirían con Spike.

Una vez allí, prepararon todo para la gran actuación.

Pinkie Pie con la excusa de tener algo de vital importancia que decirle la condujo hacia su sorpresa. Melody encendió el audio y Spike comenzó a cantar.

Mi origen no conocí, mas sí mi destino cuando por primera vez la vi.

Su amor tan cálido me da el aliento necesario.

Es tan cariñosa e ingeniosa.

Sin ella mi vida no tendría sentido

¡Oh, Twilight!

¡Por favor, ámame como yo te amo a ti!

¡Oh, Twilight!

¡Hazme feliz con un sí!

Cuando Spike acabó la canción, los tres miraron a la princesa para ver su reacción. ¿Habría valido la pena todo el esfuerzo?

Lágrimas empezaron a caer de las mejillas de Twilight.

"¡Lo siento, Twilight! Se disculpó rápidamente el dragón "Yo no quería hacerte sentir incómoda. Yo intentaba…"

"Calla, tonto" le interrumpió ella "Son lágrimas de felicidad"

Melody y Pinkie sonrieron al oír aquello. La cosa parecía que iba bien.

"Spike. Yo también te quiero. Te he querido desde que te saqué de aquel huevo. Pero no como tu mejor amiga, tu hermana o tu madre ¡He estado enamorada de ti desde hace mucho tiempo! Al principio no te lo quería decir porque tenía miedo de cómo ibas a reaccionar. Después perdiste el interés por Rarity y me auto convencí de que era demasiado pronto y deje el tema aislado ¡Pero te amo y ya no tengo miedo a decirlo!"

"Twilight…"

Ambos se besaron sin acordarse de que Melody y Pinkie aún seguían allí. Amabas se fueron para darle a la pareja intimidad, pero felices al ver que su esfuerzo se había visto recompensado.

Tras un rato, Pinkie Pie dijo que tenía que irse.

"Lamento tener que dejarte aquí sola, pero es que es el día de los Corazones y Cascos. Me gustaría pasarlo con mi Cheese Sandwich.

"No pasa nada, Pinkie. El día de Corazones y Cascos es muy especial. Es natural que quieras pasarlo con tu marido"

Y la poni rosada se fue, dejando sola a la unicornio, quien dio una vuelta por Canterlot, aburrida.

En su paseo, vio a Rarity y Fancy Pants teniendo juntos una cita. Eso significaba que ya eran pareja.

"Después de todo no forman tan mala pareja" pensó Melody para sí.

Por suerte para la unicornio, la princesa Twilight y Spike la invitaron a festejar con ella, de modo que no tuvo que pasar todo el día allí sola como ella pensaba.

Melody volvió tarde a casa, pero seguía triste porque su poni no le había hecho ningún regalo. Ni siquiera había ido a verla…

Comenzó a llover con fuerza.

Melody decidió irse a dormir, pero llamaron a la puerta. La unicornio acudió a abrir, y en la puerta estaba Big Macintosh.

"¿Qué hacías ahí fuera?" le preguntó ella mientras le acerba una toalla para que se secase.

A modo de respuesta el poni rojo le entregó un ramo de margaritas.

"¡Son preciosas!"

"Intenté traértelas esta mañana, pero no estabas en casa. Quería venir a verte mientras durase el Día de Corazones y Cascos cuando me pilló la lluvia" explicó él.

"¡Mi valiente!" exclamó Melody abrazándolo y pudiendo sentir su pelaje aún mojado.

"Melody. Yo… quería saber si te… gustaría ser mi novia"

La unicornio al oír esto se sintió muy feliz.

"¡Por supuesto que seré tu novia! ¿Por qué no vamos a mi dormitorio y me demuestras tu amor?"

"Sip"

"Espero que te hayas traído protección"

"Sip"

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Bueno. Y hasta aquí el capítulo de esta semana. Espero que les haya gustado.

No se preocupen, que Melody y Big Mac sean novios no significa que esto vaya a acabar. Aún quedan capítulos.Y en cuanto a la canción de Spike disculpen si me quedó mal, pero es que yo no soy músico ni compositor ni nada de eso.

Gracias por leer y hasta la semana que viene.