Un psicópata en equestria
Chapter 39: Respirar en calma
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Despierto en una habitación… silenciosa… colorida… detestable.
Juro que extraño Everfree, hay muchas cosas que me molestan… no pude solucionar ninguno de mis problemas… sigo esforzándome por "ser bueno"… mis acciones siguen sintiéndose insignificantes… la lista sigue pero es un pensamiento poco productivo. Mejor dejarlo.
Trabajar en el yacimiento de gemas ayuda pero no paso suficiente tiempo en el bosque… necesito más. No puedo sencillamente volver… no tengo un sitio donde dormir allí… además no me ayudaría a encajar en este mundo… se vería sospechoso, jamás me ganaría la confianza de las princesas.
Mi paciencia se pone a prueba cada mañana, por el lado positivo es una prueba a mi voluntad, una prueba a la valía de mi tesoro… a mi valía. Cada vez que estos pensamientos vuelven a mi… cada vez que les gano y me les resisto… reafirmo que valgo algo… es mi premio de consolación. Es mejor que nada.
Pero hoy no se trata de mis problemas, hoy yo me ocupare de lo que le está pasando a Pinkie, si es que algo le pasa… pero estoy seguro de que algo pasa… y me gustaría equivocarme…
No solo por ella… sino por mí… no quiero ayudarla y que se sienta vacío también. Pero si algo le pasa, debo ayudar… no hacerlo sería egoísta… el egoísmo es malo… y yo no quiero ser malo. Suena como si es más por mí que por ella que deseo equivocarme… es debatible.
Desayunar… ok al menos la comida en el pueblo es mejor que la comida en el bosque. Admito que extraño cierto tipo de bocadillos de mi mundo pero solo la idea de ellos estaría visto como canibalismo por estas tierras. Nuevamente es un sacrificio que creo que vale la pena.
Hecho. Lo siguiente en mi lista es encontrar a Pinkie, debo hacerlo hoy porque mañana deberé realizar la búsqueda de zafiros para Rarity.
Sugarcube corner… ahí no está, la señora Cake solo me dijo que la vio salir, ninguna información útil.
Camino por el pueblo buscando a la pony en cuestión, ningún ruido estruendoso, ningún globo explotando, ninguna trompeta de fiesta en el aire. ¿De todos los días en los que podría ser silenciosa eligió hoy?
En la biblioteca no hay noticias de ella, en el Atelier Rarity está más feliz que preocupada por no haberla visto… no la culpo.
Fluttershy tampoco la vio, desde que comenzó el invierno está durmiendo más de lo usual ya que muchos de los animales que alimentamos en el otoño están hibernando durante esta estación.
Rainbow Dash… no la encontré… quizá este durmiendo o quizá este manteniendo a raya las nubes que salen de Everfree para evitar precipitaciones indeseadas, no lo sé y no afecta los resultados de mi búsqueda. Una pena, un par de ojos en el cielo serian útiles.
Me acerco a la granja de la familia Apple alejándome de Ponyville, fuera del pueblo quedan algunos rastros de la nevada, no muchos pero traen recuerdos… aún no sé cómo hare para cumplir mi promesa con las cutie mark crusaders. Me preocupare de eso en otro momento.
La familia Apple esta despierta… no me sorprende, por más de no tener trabajo de granja siguen manteniendo sus horarios. Applejack y sus dos hermanos están jugando a quien sabe que, es lindo ver una escena familiar, me recuerda a aquella que deje atrás… espero se hayan adaptado a mi ausencia aunque sea con una fracción de la sencillez de la que yo disfruto. Pero no tanta como para que se asemejen a mí, eso no se lo deseo a nadie.
Pensamientos improductivos… mejor eliminarlos.
Applejack:-¡Hey Razón! ¿Qué te trae aquí?
-Hola Applejack, ¿Cómo está todo?
Applejack:- Disfrutando de nuestros meses de descanso. No bien acabe el invierno toda la familia tendrá trabajo hasta las orejas.
-Me alegra oírlo… oye estoy buscando a Pinkie ¿La has visto por estos lados?
Applejack:- No la veo desde hace dos días. Perdón por no poder ayudar.
-Está bien, seguiré buscando. Con lo ruidosa que es no tardare en encontrarla por ahí.
Applejack:- (rie) Tienes razón en eso.
Nos despedimos, vuelvo al pueblo. No veo a Pinkie por ningún lado… no quiero preocuparme… pero se me hace complicado.
-Discúlpame ¿Has visto a una Pony rosada e hiperactiva de casualidad?- Pregunto a una pony terrestre violeta que cruza la calle
-No, soy nueva aquí vengo solo de paso. No conozco a nadie aquí.
Agradezco a la pony y la dejo seguir su camino. Mi mente ata los hilos con demasiada facilidad… no me gusta lo que se. Pony nuevo… sin una fiesta de bienvenida… y no vio a Pinkie…
Pinkie no le dio una fiesta de bienvenida a alguien… eso no es común… no es nada común. Tengo que hablar con ella.
No está en el pueblo… no está en Sweet Apple Acres, no la vi bordeando Everfree.
Camino por el sendero de la carrera de las hojas… aun no la encuentro…
Observo a mi izquierda un lago congelado, el cielo se refleja en el hielo como si se tratase de un espejo helado… una preciosura de vista… y en medio de la vista un punto rosa… bingo.
Camino con suavidad sin perderla de vista. Ella no quiere ser vista, no quiere ser encontrada… eso es lo único que explicaría su repentina desaparición. Si me ve escapará. Debo acercarme lo suficiente como para que escapar no sea una salida óptima.
Más me acerco y puedo observar más detalles de su posición. La posición del suéter azul que usa indica que me está dando la espalda. Ralentizo aún más mi caminar… respiro con cuidado como si estuviese escondiéndome de mi propia sombra. No sé porque le doy a este acercamiento tanta ceremonia a decir verdad.
Y me acerco lo suficiente, a diez metros diría… la veo de espaldas… la oigo sollozar… su pelo esta como siempre… su tristeza no la llevo a la locura… eso es bueno. No quita el hecho de que está llorando… y de que yo me acerco cada vez más a ella sin una idea clara de que hacer. Tarde para pensar eso, ya estoy aquí y debo hacer algo.
-Pinkie
La pony se sorprendió de verme aquí, limpio sus lágrimas con rapidez antes de hablarme con un tono casi común.
Pinkie:-¡Razón!... ¿Qué haces aquí? No te vi venir- Parece que se le da bien mentir… pero no me engaña. Me llama por mi nombre y no por mi apodo… está nerviosa.
-Te estaba buscando a ti Pinkie… estoy algo preocupado por ti
Pinkie:- ¡No hay nada de qué preocuparte tonto! ¿Por qué lo dices?
-Porque tanto yo como todos fuimos un tanto desconsiderados con tus intentos de fiesta los últimos días
Pinkie:- Oh, ¡Eso no es nada!
-Pinkie… no sirve mentirme… ayer estuviste desanimada y hoy hubo un pony nuevo y no le diste una fiesta de bienvenida… encima estuviste desaparecida durante toda la mañana.
Pinkie:- ¡Un pony nuevo! Tengo que preparar los globos y la torta y…
-Y sigues desviando la conversación… te escuche sollozando así que puedes cortar con el teatro ¿Cuál es el sentido de mentirme?
Pinkie:- Tonto mono sin pelo ¿Por qué lloraría?
Persistente en su mentira… me agradan quienes sostienen sus puntos pero no planeo permitirlo.
-Estoy aquí porque sé que está pasando. Conozco la frustración de intentar algo y no conseguirlo… quizá no sepa exactamente lo que te ocurra pero entiendo lo que es esconder pena. Y por eso estabas aquí sola-
A estas alturas ya estoy improvisando con lo que tengo a mano… pero estoy seguro de que debo hacer algo ¿Sino quién?
Pinkie:- ¿De qué hablas?
-De preparar la comida para la fiesta todos los días… de tener los globos listos… y la música… y los juegos. Y de que los invitados no lleguen. Esta bien el primer día, quizá también el segundo… pero todos los días hay nuevos preparativos y todos los días nadie viene.
Se siente como se desperdicia el esfuerzo… y todo hecho para un invitado que no viene a la fiesta.
Y si… estoy recurriendo a estas palabras… quizá no sea lo mejor posible pero la vi conteniendo su basura y eso no es correcto, mientras más uno aguanta más fuerte explota y ella merece soltarse. Creo que es mejor que esa explosión se de en un ambiente controlado. O sea este.
Pinkie:- Eso…-
No completa la frase… sus ojos comienzan a humedecerse… no es de mi agrado hacerla llorar. Pero debe sacarse las penas de adentro… se lo que es cargar con algo dentro y dejarlo crecer… no le deseo eso.
-Y juntas esa molestia dentro de ti escondiéndola de todos sin ningún motivo para hacerlo. Sabes que tus amigos están más que dispuestos a ayudarte con esto. No es secreto para mí que algo te molesta. ¿Por qué lo escondes? Sabes que guardarte eso no es bueno ni para ti ni para nadie.
Pinkie:-¡Porque quiero que estén bien! - Me grita conteniendo las lágrimas- Mira lo que pasa solo cuando alguien lo sabe. Te preocupas. ¡Yo no quiero que nadie este mal ni por mí ni por nadie! ¡Yo soy el elemento de la risa! Yo quiero que todos mis amigos sean felices. Si ellos me ven triste se van a poner tristes ellos también… Yo no quiero eso… yo quiero que sonrían.
-¡Pero te estas lastimando idiota! ¿Cómo van a sentirse si saben que estas así?
Pinkie:- Porque no tienen que enterarse, porque no se lo digo a nadie para no lastimar a nadie, así que nadie va a salir triste
-Excepto tu
Pinkie:- Pero ninguno de mis amigos va a estar triste
-Suficiente con esta basura vas a contarme que te pasa y te vas a descargar porque yo no voy a quedarme quieto mientras te lastimas por estupideces.
Pinkie:- Pero no quiero que estés triste por mi
-He allí mi magia… quizá lo hayas olvidado pero ¿Cómo decirlo?... ah cierto… ¡Yo no puedo ponerme triste por otro pony! Así que todo el sentido de lo que dices no sirve conmigo y por eso vas a hablar.
Pinkie:- Pero dijiste que te preocupas por mi
-¿Y eso qué? Me preocupo porque eres importante para mí y quiero que seas feliz como quiero que todos mis amigos sean felices. Es un pensamiento… no es como si mágicamente desarrollara empatía. No me puedo poner triste por tu culpa porque así soy. Por eso da la casualidad de que soy tu escucha perfecto para el día de hoy y vas a contarme que está pasando aquí.
Pinkie:- ¿Es en serio?
-¿Tengo cara de chiste? Ya, relájate que no puedes lastimarme, ahora suelta eso que te molesta.
No me esperaba lo siguiente… fue… ella actúa… demasiado efusiva. Llanto… exagerado, caricaturesco, al parecer liberador llanto. Entre gritos de desahogo sencillamente suelta todo… esperaba más resistencia… pero no… al parecer la presión que se guardo es demasiado para ella. Es como si hubiese abierto una olla a presión. Y aquí estoy escuchándola.
Palabra tras palabra frase tras frase mi amiga aquí presente da una suerte de confesión frente a mí.
Quizá fui o soy un entrometido… pero a decir verdad eso no tiene ninguna relevancia. Pinkie se estaba lastimando conteniendo su pena. Comprendo que por sus códigos no quiera dañar a nadie pero existiendo la posibilidad de que pueda no guardarse esa basura adentro sin dañar a nadie esa opción debe ser tomada. Es lo más óptimo. En este caso y no sé si en todos el fin justifica los medios, a mis ojos hice lo correcto y con toda la honestidad de la que soy posible digo que otra opinión al respecto no tiene efectos en mí.
Pinkie:- …Y eso no me gustaaaaaaaaa! Porque está bien que ordene su biblioteca y es más que genial que Rarity este persiguiendo su sueño de ser la diseñadora de Sapphire Shores y que Applejack pase tiempo con su familia es muy tierno y bonito pero yo paso tanto tiempo preparando las cosas y solo quiero pasar la fiesta con alguien.
Y Spike trabajando con Rarity se ve tan feliz y Fluttershy por fin puede dormir por las mañanas y tu estas consiguiendo un trabajo y Rainbow Dash practicando sus trucos para los wonderbolts y todos la están pasando bien sin mi… y yo solo quiero pasar algo de tiempo con ustedes y festejar y comer dulces y bailar pero ustedes están contentos y yo quiero estar contenta pero no quiero que dejen de estar contentos y por eso me pongo triste pero no quiero estar triste porque los pone tristes a ustedes y además cuando estoy triste me pongo mal y lloro y no me estoy riendo y se supone que yo ría y haga reír a mis amigos pero todos están muy bien sin mi ayuda entonces soy la única que está mal y se siente feo porque pienso que estoy triste porque ellos están felices y no es así.-
Se detiene a tomar aire y sonarse la nariz de una manera entre triste y cómica… no puedo decir que siento su dolor… tampoco que comparto su pena, y eso está bien en esta ocasión porque si no no me estaría diciendo lo que escucho… pero aun así intento racionalizar esa maraña de palabras con escasa pausa. Habla rápido como si quisiese deshacerse de un peso, como si cada palabra que dijese fuera sacarse una espina… admiro su sinceridad… su suerte… dos cosas más para la lista.
Y la descarga continua a lo largo de los minutos.
Pinkie:- …Y es en serio que no es así porque me gusta verlos contentos, en serio me gusta, sé que no me crees porque ahora parezco un pony egoísta y malo que quiere a sus amigos solo para el pero no es así no quiero que sea así solo quiero pasar un rato con ellos nada más, es en serio en serio en serio yo no soy un pony triste no soy un pony egoísta solo quiero preparar una fiesta y que vengan conmigo y que juguemos ponerle la cola al pony… ¡Solo un rato! ¡Nada más! No quiero que Rarity deje los vestidos ni que Twilight deje de leer ni molestar el sueño de Fluttershy ni evitar que Rainbow entre a los wonderbolts ¡No soy un pony malo es en serio yo no soy un pony egoísta no quiero serlo por favor no pienses eso de mí!
La interrumpo… ya paso un largo rato hablando… la verdad no recuerdo con exactitud todas las palabras que dijo pero algo queda claro… se siente un poco aislada, está molesta consigo misma por actuar de una manera que no le agrada… no comprendo muy bien que es lo que cruza por su mente pero es la clase de cosas que nunca entendí… y eso no me impidió nunca intentar ayudar.
-Shhhh calma ya Pinkie… no te ahogues en tus propias palabras.
Le hablo y casi de modo instintivo me siento a su lado para que estemos a alturas similares y apoyo mi mano sobre sus crines golpeando con suavidad su cabeza… podría considerarse una caricia. Casi olvido que no estoy en mi mundo…
-Así es como tranquilizamos a un amigo triste en mi mundo- No sé si estoy mintiendo o diciendo la verdad… es irrelevante… es la primer acción que cruzo mi mente y en este mundo no debe tener significado alguno. Debo explicar mis acciones si voy a romper la barrera del espacio personal. Por más que sea solo para calmarla un poco.
Permanece en silencio… no se aparta de mí, no opone resistencia, no me detengo. Su respiración hace momentos agitada comienza a calmarse de a poco. Cada tanto respira violentamente aparentando que comenzara a llorar de nuevo como si algo en su mente la asustase.
Pinkie:- ¡Pero yo no…!
-Shhhh… basta… no tienes de que defenderte en frente mío-
También… ¿Quién soy yo para juzgar?
Minutos pasan su respiración se calma, deja de agitarse de manera espasmódica cada vez que respira. Parece comenzar a relajarse… luego de un silencio en el cual no sé qué pensar, ella me habla… más calmada pero aun así su tono expresa una cierta duda… quizá un miedo. Eleva la mirada y me observa a los ojos… no estoy acostumbrado a que me miren así… sus ojos aún están humedecidos y brillantes de las lágrimas derramadas. No sé qué se supone haga en esta clase de situaciones… pero aun así me meto en ellas… no puedo ser tan egoísta de evitarlas solo por ser incomodas… además quiero que ella mejore.
Pinkie:- Tu… tu no crees… no crees que soy un pony… un pony malo… ¿No?... ¿No crees eso verdad?
-Pinkie… tú te pasas tu tiempo buscando como alegrar a todos los ponies que conoces… Sabes todo de todos y lo usas para ayudar a todos… No has hecho nada malo… no hay nada de malo en querer estar feliz por un tiempo.
Pinkie:- … Pero… ¿No crees que soy un mal pony?
-No, jamás pensaría eso… tu eres… eres un buen pony que tuvo un mal día… solo eso. Todos tienen días malos. Tú también puedes tenerlos.
Pinkie:- ¿En serio?
-Lo prometo, es la verdad… "Cross my heart and hope to fly, stick a cupcake in my eye"
Una sonrisa se dibuja en su rostro al escuchar la promesa. Se refriega los ojos una última vez y me mira con una expresión alegre, calmada, radiante.
Pinkie:- ¿Sabes algo?... en tu mundo saben animar a un pony triste.
Se levanta, su voz ya se normaliza a ese tono chillón y alegre que taladra tantos oídos. Se limpia una última lágrima antes de volver a hablarme.
Pinkie:- ¡Y ahora tengo que preparar una fiesta de bienvenida y encontrar al invitado de honor en un tiempo record!
-¿Puedo ayudarte con eso?
Pinkie:- Depende… ¿Te vas a quedar a comer pastel?
-No me lo perdería.
Pinkie:-¡Una cosa más que casi me olvido! ¡Muchas muchas muchas muchas gracias! Gracias por hablar conmigo hoy
-¿Para eso estamos los amigos?
Pinkie:- Pero para esto solo estabas tú. ¡Y ahora tenemos una fiesta que hacer!
Me pase todo lo que quedo del día intentando seguirle el ritmo. Todos los preparativos todos los decorados y la comida y encontrar a ese Pony y traerlo a la plaza y luego intentar mantenerme con fuerza para participar en la fiesta misma. Es agotador pero valió la pena, Pinkie está sonriendo y saltando de nuevo. Cuando las chicas se liberen de sus tareas estoy seguro de que la fiesta será colosal.
Por ahora somos ella yo, esta pony nueva cuyo nombre no tengo ganas de aprender y todo pony que cruce por aquí y quiera divertirse un poco.
Ver a Pinkie animada otra vez es un alivio, ella en realidad es buena y sus ganas de alegrar a otros, repitiéndome a mí mismo, son admirables. Merece toda la alegría que le sea posible adquirir. Y si puedo hacer algo para colaborar con eso, lo hare.
Parecería que la gran beneficiada del día fue Pinkie ¿No?... por suerte para mí eso no es cierto… yo soy el que más ganó el día de hoy.
Hoy descubrí algo que no esperaba encontrar… hoy ayude a Pinkie y quizá no soy capaz de alegrarme por ella… pero luego de ayudarla… me sentí satisfecho… no fue vacío. Pinkie me mostro el camino.
La ayuda que hoy di… solo la podía dar yo… es la prueba… es la prueba de que es posible que yo ayude de una forma particular… única… valiosa a mis propios ojos. No solo es la prueba… también contiene el método. El método es repetible. Yo puedo ayudar y puedo sentirlo útil. Puedo hacerlo de nuevo.
Todo este tiempo pensando que lo mejor que me trajo mi condición era solo la falta de los problemas acarreados por el sentir… fui tan ciego.
Mi condición me hace único, me da una forma única de ver el mundo… sin emociones ajenas… sin empatía… no es un limitante… al menos ya no lo veo así. Yo puedo atender los problemas de otros sin ser herido… sin verse mi juicio afectado por situaciones que no son mías.
No es una decisión, nunca lo fue y nunca lo será. Es un hecho de mi biología. Lo que sí puedo elegir es usar mi condición para ayudar ahí donde nadie más puede hacerlo. Ahí donde se necesita alguien que pueda entrar al fuego de un conflicto emotivo sin ser dañado… ahí donde se necesita a alguien como yo… allí donde se necesita razón… en ese momento en cuando se necesita a un psicópata.
Quizá aún me falte mucho por caminar, quizá nunca aprenda a eliminar mis instintos dañinos… pero hoy di un gran paso a mi camino para ser bueno… hoy perdí un limitante… más bien descubrí que nunca lo tuve.
Mentiría si digo que me siento "bien"… también si dijera que me siento renovado… pero estoy lo suficientemente entusiasmado con mi descubrimiento como para que no me moleste dormir en esta habitación.
Yo puedo… puedo ayudar y sentir algún tipo de satisfacción por hacerlo… no sentiré empatía por la alegría de otros pero percibir algo positivo al ayudarlos es un excelente reemplazo. Me ayudara a encajar como cualquier otro. Es más de lo que soñaba poseer ayer.
Ahora soy yo el que respiro más tranquilo. Y adivinen que… ella hace de maravilla su trabajo… estoy sonriendo.
Notas de autor
No tienen idea de cuan liberador es haber escrito esto, sacármelo de encima… se siente raro pensar en publicarlo. Está de más decir que este es el capítulo que más disfrute de escribir… pocas personas saben esto… en serio, muy pocas, las cuento con los dedos de una mano y diría que algunas sino todas no recuerdan esto con tanto detalle. Pensar en decírselo a alguien más es un suicidio. Pero gracias a esto cuando apreté "publicar" ese número está aumentando a más de 50 (aproximado al momento de escribir esto). Y ese número solo puede crecer.
No me conocen de rostro y creo que es mejor así pero, en cierta forma, me conocen.
Gracias por leerme… aun no termino de procesar en que me metí al comenzar esta historia.
Sip, este capítulo salió temprano.
Mala noticia es que voy a tardar en publicar el siguiente capítulo… tengo muchos exámenes en los días venideros, procurare no tardar mucho más que 7 días. Nuevamente les pido que jamás siquiera consideren la idea de que abandone este proyecto. Ahora más que antes quiero escribir esta historia hasta su final.
Es en serio me voy a tardar así que si llego a ser puntual es por un milagro temporal. Y más en serio es que les agradezco por leer.
Hasta futuras entregas.