El Padre de Dinky Doo Revelado
Chapter 1
El Padre de Dinky Doo Revelado
Traducido por NekoYasha-Raimu
"Mamá, ¿Quién es mi padre?"
Ditzy Doo hizo una pausa en la preparacion de la cena, el cuerpo de la pegaso gris se puso rigido mientras sus ojos se abrian en shock. Voltendose, miró a su hija Dinky Doo y parpadeó lentamente. Contuvo la respiración un momento, contando lentamente hasta cinco antes de soltarla. En su mente, sabía que este día llegaría, pero hubiera esperado que su potranca fuese mayor.
Ditzy Doo sabía sobre cómo los otros potrillos se burlaban de ella a causa de que su madre era "especial". Tan crueles como eran los potrillos de la edad de Dinky, eventualmente crecerían y pasaría esa etapa. Las espinas verdaderamente dolorosas venían de las yeguas y potros de la ciudad. Las miradas de espanto y los cumplidos malintencionados hacia ambas cuando salían de compras o a cenar. Los cuchicheos y las miradas punzantes. Eso les dolía mucho más porque a veces podrían incluso decirles cosas a la cara.
Pero hace mucho que pararon dejandolos con su fase. Dinky sabía muy bien que su madre entendía y comprendía mucho más de lo que los otros ponys creían. Pero en publico, el par sólo seguia sonriendo y a veces inlcuso agradecían a los otros por los insultos y cumplidos malintencionados sobre que maravilloso es que una pegaso tan especial como ella pudiera criar una potranca UNICORNIO normal.
Pero todo este tiempo, Ditzy había estado esperando este día. Cuando los otros ponys hablaban de sus padres, Dinky siempre lo harcía sobre su madre, la pony del correo. Pero el tema de su padre nunca antes se había dado. Por eso había nacido en la pegaso una delgada esperanza de que este día nunca llegase.
"¿Mamá...?" Ditzy trotó hacia ella, apoyó su pezuña delantera en el hombro de su madre con una mirada de preocupación. "Si....si no quieres hablar sobre ello...."
Ditzy miró a su hija, con una mirada triste en los ojos mientras negaba con la cabeza. Apagó la estufa y llamó a su hija a seguirle. "Los muffins me dijeron que un día querrías saber sobre cómo las potrancas unicornio llenan la vida de alegría..." La pegaso gris empezó a guiar a Dinky hacia su habitación mientras hablaba. "Y mi mas especial muffin de bondad debería saber sobre el día en que conocí a su padre muffin de alegría!"
Dinky la siguió en silencio asintiendo con la cabeza, despues de una vida, la joven estaba acostumbrada a la forma unica de hablar de su madre. Ella había nacido con un ojo caído y problemas mentales, gracias a algo llamado 'Sindrome Alcoholico equino-fetal'. El tío Quarterback le dijo a Dinky una vez, que su madre solia ser mucho peor cuando era más pequeña, lo que habia asustado a la joven potranca de solo pensarlo.
Al entrar en la habitación de Ditzy, las paredes estaban decoradas con dibujos a crayon de todos los ponys en la ciudad que Ditzy consideraba sus amigos. En realidad estaba muy bien dibujados a pesar del medio utilizado. Cada vez que su madre conocía un pony nuevo, siempre lo dibujaba esa noche. Esta era tan solo una de las muchas pecualiaridades que Dinky amaba sobre su mamá y que la hacían unica.
Trotando hacia su cama, Dinky hizo a un lado la colcha con diseños de muffins y se arrastro bajo la cama. Despues de un momento, empujó una pequeña caja de carton de debajo de la cama antes de salir retorciendose. Sacudió el polvo de su cuerpo y empujo la caja hacia su hija tragando saliva. "Todas las respuestas sobre el espacio y globos volando estan en esta caja, mi muffin. Me iré a terminar de preparar las delicias de la comida y la felicidad mientras tú aprendes la ciencia".
Dinky asintió con la cabeza, mirando a su madre irse antes de volver a mirar la caja. La mayoria de las posesiones de su madre tenian la calidad inocente de una potranca. Pero esta caja parecia fuera de lugar en la habitacion más que una parte de ella. La caja misma era vieja y estaba rota, como si hubiera sido movida muchas veces. usando una pezuña delantera, la joven potranca empujo gentilmente la parte superior de la caja y miró hacia su interior...
La pequeña caja no guardaba mucho, solo un rollo de papel y algunas fotos. sacó la primera y vió una foto de su madre cuando era más joven en una granja con otros ponys; algunos ponys de tierra, algunos pegasos y algunos unicornios. Todos estaban riendo y sonriendo en un día de campo, Dinky sintió una lagrima en el borde de sus ojos al ver a su madre tan feliz.
Pero algo más llamó su atención, y tuvo que mirar de cerca para ver si estaba en lo cierto. Sí, muchos de los ponys en la foto, tenían la misma mirada en los ojos que su madre Ditzy. Algunos estaban en sillas de ruedas, y uno estaba en muletas. Pero todos ellos al parecer, eran tan especiales como su madre.
Dejó la primera foto en la caja y tomó la segunda antes de una pausa....Ahí, en la foto, estaba su madre abrazando a un joven unicornio al lado de un árbol. Su cuerpo era marrón y tenia una melena y cola castaño-dorado. Lo que más captó su atención fue el hecho de que su cutie mark era un muffin. Se quedó mirando la foto por mucho más tiempo, sus patas temblaban mientras observaba el árbol. Sí, parecía ser de la misma granja y tallado en el árbol había un corazón con un 'BB + DD' tallado dentro. No era la mejor caligrafía, pero el sentimiento era claro....Esta era una foto de su padre...
De pie, la mente de Dinky se tambaleó con lo que significaba. Tenía un padre unicornio, y su madre y él se habian conocido en alguna granja donde todos los ponys eran tan especiales como ella. De repente, los años de su madre llevandola a estudiar más y más tenían sentido...Siempre pensó que era porque su madre tenía miedo de que terminara como ella, tan improbable como era. Pero con dos padres de un lugar asi, la verdad fué como una explosión en su mente: Había vencido las probabilidades y había hecho a su madre muy orgullosa al ser una de las mejores estudiantes en la escuela. No era de extrañas que su madre la controlara todos los dias mientras repartía el correo.
Dejando la otra foto en la caja, el cuerpo de Ditzy se estremeció de nervios al mirar el rollo de papel. Realmente quería hacer esto? Parte de ella quería desenrollarlo y empezar a leer, pero una punzada de temor corrió por su cabeza. Despues de esto, ya no habría retorno. Ya no podría pasar las noches soñando cómo era su padre, lo sabría con seguridad. ¿Estaba preparada para renunciar a la ilusión y la fantasía por la fría realidad?.
Aferrando el rollo, se asintió a si misma. tenía que saber...No solo por sí misma, sino tambien por su madre. Su madre dió mucho por ella y habia encarado el mundo con valentía. había guardado esta caja a salvo solo para que supiera la verdad...Se lo debía a su madre, seguir hasta el final. Abriendo el rollo, Dinky se posó en el suelo sobre su abdomen y empezó a leer.
Dinky, estoy escribiendote esta carta para que un día sepas quién es tu padre. Espero haberte dado esta caja y que la estés leyendo ahora. Si encontraste esta caja accidentalmente hurgando por mi habitación, entonces estás CASTIGADA! Vé a tu habitación y espera a que llegue a casa!
Dinky rió levemente, sonriendo para si ante la pequeña nota. Incluso por escrito, su madre tenía un divertido sentido del humor a veces. Sacudió la cabeza y se volvió hacia el rollo para leer más.
Cuando me gradué de la escuela, mis padres había muerto un año antes trabajando como ponys del clima. Quarterback había comenzado a hacer construcción, y yo era completamente inutil. Tenía muchos problemas haciendo incluso las tareas más basicas y no podía decir más que dos palabras. El trabajo del hermano mayor lo requería en Fillydelphia para ayudar a construir una nueva escuela por un año, asi que me dijo que iría a vivir a un lugar especial que podría ayudarme. Fue entonces que me ingresaron a la Granja.
La Granja estaba en las afueras de Coltland, y fue creada para ayudar a los ponys especiales a ser autosuficientes. Pero no lo sabía entonces. No, todo lo que sabía era que el último de mi familia me estaba dejando alli, y pensé que era porque ya no me amaba. Pasé la primera semana en mi habitación, negandome a salir incluso para comer. Cada día solo permanecía acurrucada bajo mis mantas ignorando a todos y a todo.
Al final de la semana, escuché un suave golpe en mi puerta. Luego oí a alguien andar muy lentamente en la habitación antes de sentir que depositaban algo en mi cama. Cuando se marchó, olfateé desde debajo de las mantas y sentí el más delicioso aroma....Sacando el hocico ví que el misterioso visitante había dejado una cesta de muffins en mi cama.
Mi estomago rugió, necesitaba comida despues de una semana de ayuno. Sin importarme nada mas, enterré mi hocico en la cesta y empeze a comer con alegria las delicias horneadas. Por supuesto, despues de tanto tiempo sin comer, debi controlarme. Terminé comiendo demasiado y tan rapido que me dió un dolor de estomago que se prolongó hasta entrada la noche.
Dinky suspiró, apoyando la pezuña en la frente sacudiendo la cabeza. varias veces había visto los resultados de su madre al comer demasiados muffins, y la había llevado a guardar una gran cantidad de una posión rosa especial que la pony enfermera preparó para ella. "Oh, mamá..." susurró para si misma. "Es tan tipico de tí".
A la mañana siguiente, me sentí hambrienta de nuevo, asi que lentamente troté de mi habitación al area principal. La casa principal de la granja era donde todos vivíamos y estaba diseñada de manera que cada habitación de los ponys se abría hacia el area principal donde había comida, juegos y se tomaban clases. Varios ponys me vieron salir de la habitación y me dieron un amistoso saludo, quize evitarlos un poco....Casi lista para huir de regreso a mi habitación.
Pero una pony enfermera me vió y me dió la mejor sonrisa, trotó hacia mi para darme la bienvenida. Me explicó sobre la granja, y que mi hermano no me había dejado alli como un castigo, sino como una recompensa para convertirme en una mejor pony. Entonces me enseñó la granja, arrastrandome a veces, me mostró todo lo que la granja tenía para ofrecer.
Lentamente empecé a salir de mi coraza en la granja, y empece a aprender como vivir por mi misma. Al inicio fue lento, me enseñaron a cocinar y a ayudar en las tareas de la granja. tambien empezaron a enseñarme cómo volar adecuadamente, algo que había sido un reto en la escuela debido a mi ojo dañado. Aprendí la ardua tarea de sobre-compensar la percepcion de profundidad, y cómo pensar que los objetos pueden estar más cerca de lo que parecen.
Y cada anochecer, despues de un largo día, siempre encontraba una nueva cesta de muffins en mi cama esperandome. Al principio, creí que eran de mi hermano Quarterback, y que él me estaba observando y viginalndo que todo esté bien. Pero todo cambió al inicio del verano.
Era un día soleado, y el sol de Celestia brillaba sobre nosotros mientras nos dirigíamos al campo. Habíamos terminado las lecciones del día y las tareas temprano, así que tendríamos un día de campo para celebrar nuestro duro trabajo. Speedy Wheels tambien estaba por 'graduarse', y todos queríamos desearle buena suerte. Habís nacido con algo llamado 'Pal-isis', y vivió si vida en una silla de ruedas. Pero llevaba dos años en la granja y habia hallado un camino mas alla de su silla y era muy talentoso entregando cosas. Podía estar sentado en esa silla, pero en ella aun podía ir a casi cualquier sitio.
Había estado ayudandolo, descubriendo que yo tambien tenía un don para repartir cosas. Entre los dos, no habia ninguna entrega en la granja que no pudiera llegar a su destino. Eramos un dúo imparable, y con algo de miedo, sabía que cuando se fuera, pronto todas las entregas de la granja y cartas de casa recaerían en mi, sola.
Pero todos estabamos felices por Speedy. La Granja le habia ayudado a encontrar un trabajo en Coltland con una compañia de repartos, e incluso le habia conseguido una casa para sí mismo. Hiba a ser una gran transición para él y para nosotros, él era uno de los afortunados. Ël hiba a marcharse. Algunos en la Granja nunca podían llegar tan lejos, y se quedarían hasta fallecer.
Pero ese día los espiritus estaban en alto, y alegremente nos arrojamos al campo para jugar. Incluso las enfermeras se estaban relajando, jugando con nosotros mientras el alegre sonido de nuestra risa resonaba en la pastura y las colinas cercanas.
Dinky sonrió, se enroscó un poco en el suelo y asintió para si misma. Podía sentir la alegría de su madre al leerlo, y sentía el deseo de haber tenido la oportunidad de verla así. Sin tener que poner el rostro fuerte cada día y sinceramente feliz sin alguien alrededor burlandose de ella...
Varios ponys de la cocina habían traido sopas, ensaladas y otras delicias. Al presentarse la comida, una cosa llamó mi atención: Una amplia variedad de muffins de diferentes sabores siendo colocados por un unicornio marrón. Troté allá para olfatearlos curiosamente anted de mirar al potro. Eran los mismos muffins que pensaba que mi hermano me dejaba!
Voltee hacia el unicornio, mi melena se erizó cuando empece a gritarle. ¿Quién era él para tener los muffins de mi hermano? ¿Cómo se atrevía a sacarlos afuera cuando eran para mí? ¿Se los quitó a él? por supuesto con mis problemas de habla, no salió como esperaba. Pero el punto es que estaba muy molesta.
ël solo me miró en silencio antes de empezar a mover sus patas delanteras en extrañas señales ante mi rostro. Negué con la cabeza, no entendía, y empezé a gritar de nuevo...antes de sentir su suave pezuña iquierda delantera posarse gentilmente sobre la punta de mi boca. Me indicó que lo siguiera y yo protesté...¿Por qué debía seguir a este unicornio extraño a algun lugar?. Pero me indico de nuevo y de nuevo que lo siguiera, asi que acepté a regañadientes.
No me llevó muy lejos, solo al otro lado de la pradera hacia un enfermero a quién dió golpecitos en la grupa insistentemente. El enfermero volteó y sonrió. Creo que su nombre era Red Cross, si recuerdo bien. Era un amable pegaso, y me había ayudado en algunas clases de vuelo. "¿Si...? Oh, hola Bran Muffin! ¿En qué te puedo ayudar?"
El unicornio marrón peinó hacia atras su melena castaña-dorada con la pata antes de mover sus pezuñas en patrones extraños de nuevo. Red Cross nos miró, el pegaso blanco asentía con la cabeza y su melena roja se balanceaba con el movimiento. "Ah, esta bien..." luego me miró y sonrió. "Ditzy, voy a decirte lo que Bran esta diciendo, esta bien? Pero habla con él como si yo no estuviera aqui"
Recuerdo haberme sorprendido por aquello, pero asentí silenciona antes de mirar de nuevo al unicornio. "¿Por qué tomas los regalos de felices ruibarbos en brillo de mi hermano mayor?"
Las pezuñas del unicornio empezaron sus rapidos movimientos mientras oía la voz de Red Cross. "Lo siento, los muffins eran de mí. te veías tan triste cuando llegaste, solo quería hacer algo para animarte. Parecían hacerte feliz, y te ves tan linda cuando sonries, asi que seguí llevandote muffins."
Por costumbre, voltee hacia Red Cross y pregunté, "¿Qué...? Pero los titíes verdes de-" Pero dificilmente dije otra palabra antes de sentir las pezuñas delanteras de Bran sosteniendo los lados de mi cabeza, volviendome de cara al unicornio de nuevo antes que una oleada de señales empezara.
"No lo mires a él!" Red decía lo que traducía. "…l es sólo mi voz para que podamos hablar! Estamos hablando nosotros dos! No vuelvas a ignorarme así otra vez!"
Traté de calmarme, como me enseñaron en las clases de habla para manejar las palabras correctas. Finalmente las palabras llegaron lentamente, pero fuí capaz de controlar lo que quería decir: "Tú no eres mi hermano. Tú eres pony nuevo. Pero ser amable y me animaste. Pero cómo es que no le dices a Ditzy esto por ti mismo?"
El unicornio suspiró, apuntando a su garganta antes de hacer mas señales mientrás Red Cross habló de nuevo. "Nací incapaz de hablar, al igual que tú, por largo tiempo fuí incapaz de decirle mis pensamientos a otros. pero aqui en la granja, pude aprender cómo hablar con mis pezuñas así como tú tomaste clases para aprender a hablar con tu voz ahora"
Recuerdo asentir, mirando sobre el unicornio con una suave sonrisa empezando a cruzar mi hocico. "Tu...Tu puedes enseñar tu habla que no tiene explosiones de estrellas que confunde a los ponys a los ríos?"
Rió silenciosamente y su cuerpo temblaba mientras asentía. "Por supuesto, Ditzy." Escuché la voz de Red decir lo que Bran otra vez indicaba. "Con gusto te enseñaré!"
Por el resto del día y hasta ponerse el sol de Celestia
, Bran Muffin comenzó a enseñarme a hablar usando las pezuñas igual que él. Mientras todos a nuestro alrededor celebraban la graduación de nuestro amigo Speedy Wheels, los dos empezabamos a hallar algo mucho mas significativo. Estabamos escontrandonos el uno al otro con nuestras pezuñas en nuestra forma personal de hablar.
Dinky sintió sus ojos llenos de lagrimas de nuevo y puso el rollo a un lado mientras alcanzaba un pañuelo, sujentandolo, limpió las lagrimas de sus ojos mientras sonreía para si. "Mamá......esta es una parte de tí que nunca conocí"
Despues de componerse, Dinky miró el rollo envuelto. ¿Podría terminar esto? ¿Realmente quería aprender tanto sobre los días de juventud de su madre? Armandose de valor, asintió. Cogiendo el rollo, trepó a la cama y se acurrucó bajo las mantas. Con la escencia de su madre a su alrededor, desenvolvió el rollo y regresó a donde lo había dejado.
Fué un trabajo duro, pero al final del verano ya no necesitabamos a Red Cross para hablar por Bran. Nos sentabamos afuera o en el salon principal, hablando con nuestras pezuñas las palabras que nuestros hocicos se negaban a permitirnos expresar correctamente. Me habló de su infancia creciendo en una pastelería en Ponyville, y de sus padres adoptivos Carrot Cake y Cup Cake. En realidad, él era su sobrino, y había perdido a su madre y padre en una inundación cuando nació, la misma inundación que le arrebató su capacidad de hablar.
Pero viviendo allí, había aprendido a cocinar y crear comida que llenaba nuestros cuerpos cada noche. Pudo no haber sido capaz de hablar al crecer, pero ese silencio escondía una mente brillante llena de talento culinario y experiencia. Su especialidad eran los muffins. Y rapidamente me hizó adicta a esas delicias horneadas. A pesar de todo, ambos eramos felices.
Cada día, despues de repartir las cartas y paquetes de la granja, volaba hacia la cocina y ayudaba a Bran a preparar la comida. Era una vida simple, pero éramos felices, verdaderamente felices. Pasabamos el tiempo riendo y hablando con nuestras pezuñas, diciendonos el uno al otro sobre nuestros días, nuestras esperanzas y nuestros sueños....Y para nosotros era suficiente. Al menos al principio.
No recuerdo cuando inició, pero empezamos a hacernos más que amigos. Los rozes ocacionales mientras cocinabamos, los abrazos cuando nos encontrabamos, e incluso los largos periodos en que tan solo nos sonreíamos mutuamente mientras nuestras pezuñas delanteras descansaban juntas en distintas ocaciones. Los otros residentes de la granja y enfermeros parecíeron ver la creciente relación mucho antes que nosotros.
Todo cambió en la cosecha de otoño, Cada otoño, despues de que los cultivos que ayudaban a pagar por la granja fuesen cosechados y vendidos, la Granja podía celebrar con una gran fiesta. Siempre había una votación por un principe y una princesa para vigilar la noche. y muchos de los otros residentes se la pasaban dandome un guiño de comlicidad cuando les llevaba su correo durante la semana previa a la fiesta de la cosecha.
Luego llegó el día de la fiesta, y todos trabajamos duro para hacerla la mejor noche de todas. Bran y yo trabajamos muy duro preparando para todos nuestros amigos en la granja un banquete que creció durante el día. Finalmente terminamos y pudimos llevar todo en nuestras carretas antes de servir un gran buffet de deliciosa comida.
Oh, Dinky, desearía que hubieses visto esa noche. Muchos de los otros huespedes de la Granja habían decorado la pastura y con la ayuda de los enfermeros, había puesto linternas de papel para iluminar el campo entero en suaves brillos rojos, naranja y amarillos. Todo era perfecto, Dinky. Completamente perfecto.
La enfermera jefe, una unicornio llamada Mare Blucher, dió un discurso sobre lo orgullosa que estaba de todo lo que habiamos logrado este año. Todos relinchamos y aplaudimos con las pezuñas en el aire, felices de tener esta divertida noche como recompensa. Al terminar el discurso, sacó un sobre. "Y ahora, anunciaré a sus principe y princesa de la noche...." Usó su magia para abrir el sobre, y leyó en voz alta, "Principe Bran Muffin y Princesa Ditzy Doo!"
Todos a nuestro alrededor empezaros a aplaudir y relinchar, y ambos mirabamos en estado de shock. Muchos otros residentes espezaron a empujar nuestros aun impactados cuerpos hacia el escenario mientras sentíamos coronas de juguete posarse en nuestras cabezas. Finalmente llegamos al escenario y miramos, nuestra multitud de amigos aclamandonos mientras todos empezaban a corear una palabra una y otra vez: "Beso! Beso! Beso! Beso!"
Nos miramos el uno al otro mientras Mare Blucher trataba de calmar al grupo, pero siguieron aclamando y coreaban esa palabra de nuevo y de nuevo con creciente intensidad... "BESO! BESO! BESO! BESO!"
Miré a Bran y el me miró también miestras nos encogiamos de hombros. En ese momento solo queriamos calmar a los otros ponys para poder continuar la celebración. Asi que nos inclinamos más cerca y nuestros labios se encontraron...
No se cuanto tiempo sostuvimos ese primer beso, Dinky. Era como...Verano y vuelo e incluso muffins, todos juntos. Era como ser abrazada por Quarterback...Como si mis padres viviesen...Era todo esto enrollado en una bola de calidos sentimientos que corrían a travez de mi cuerpo como un rayo. Sentí mis ojos cerrarse y todo lo demás en el mundo desapareció, éramos solo Bran y yo.
El beso finalmente se rompió y nos miramos mutuamente. Entonces oí los gritos de los otros en el grupo y volteé, viendo lagrimas de alegría en sus ojos mientras aplaudían. Ambos, Bran y yo nos sonrojamos mucho, nuestros hocicos estaban casi tan rojos como una remolacha mientras indicabamos que las festividades iniciaran.
Mientras todos se dirigían al buffet para comer, nosotros solo nos miramos por mas tiempo. Volví a sentir que el resto del mundo se desvanecía y eramos solo nosotros. Levantando sus patas delanteras, Bran empezó a decir en las palabras que se habían convertido en nuestro lenguaje privado. 'TE AMO'. Sonriendo, le devolví el gesto mientras lagrimas empezaban a brotar de mis ojos. 'TAMBIEN TE AMO'.
Esa noche al terminar la fiesta, no regresé a mi habitación. Mas bien, seguí a Bran al apartamento que tenía detrás de la cocina. No quieres saber lo que pasó esa noche, y muchas otras noches despues de esa. Basta con saber que ambos nos amamos mucho. No fue hasta poco despues del solsticio de invierno que empecé a enfermarme con frecuencia.
Ambos nos asustamos mucho, Dinky! Por primera vez en meses, los muffins me estaban enfermando! Y no quería comer lo que Bran Muffin preparaba, solo quería comer cosas como escabeches cubiertos de chocolate, o panecillos con salsa picante y chispas! Eventualmente, a insistencia de Bran, fuimos con Mare Blucher para que me hiciera una revisión. Ella miró y escuchó mientras le hablabamos de mis problemas de salud, luego nos hizo algunas preguntas personales que nos hizo ruborizarnos. Finalmente, sientiendo mi creciente vientre con sus pezuñas, nos diómla noticia: No estaba enferma, estaba embarazada. Bran y yo hibamos a tener un potrillo juntos!
Despues de eso, las cosas empezaron a moverse rapidamente. Los padres de Bran fueron llamados y nos ayudaron a empacar nuestras cosas. Planearon una fiesta, y todos nuestros amigos nos dieron muchos grandes abrazos y buenos deseos. La granja era nuestro hogar, pero no era lugar para dar a luz o criar un potrillo. Asi que nos hibamos a quedar con sus padres donde podriamos tener a nuestro potrillo con mayor facilidad.
Asi que viajamos en carroza de pegasos a Ponyville, donde sus padres nos acogieron con los brazos abiertos. Ah, Dinky, fue maravilloso. Bran empezó a trabajar en la pastelería, y sus padres nos ayudaron a establecernos en una casa en las afueras de Ponyville. Y un día, justo despues de terminar el invierno. Empecé a sentir los agudos dolores. Llamaron a las enfermeras mientras yo yacía en cama, llena de dolor. Pero valió la pena. Despues de todo el dolor, estabas ahi en nuestros brazos, Dinky. Nuestro más preciado muffin.
Vivimos juntos por tres años despues de eso, Dinky. Solo nosotros tres como una gran familia feliz. Eras muy pequeña para saberlo, pero tu padre te amaba con cada fibra de su ser. Pero, la Granja lo necesitaba. Seguían intentando hallar alguien que lo reemplazara como cocinero, pero ninguno de ellos tenía la paciencia para manejar el trabajo.
Lo necesitaban, y los posibles estallidos de los residentes hacia a la Granja un lugar en el que nunca podrías crecer. Y queriamos más para tí. Queríamos que tuvieses la vida que ninguno de nosotros podía tener. Tenías la brillante mente de tu padre y mi voz, si yo hubiese nacido normal. Tú era lo mejor de ambos unido en uno, asi que hicimos la dolorosa desicion de estar separados hasta que se pudiera hallar un reemplazo y tu padre pudiese volver a casa.
Pero, pasaron varias semanas y recibimos una carta de la granja. Tu padre nunca llegó. Enviaron equipos de busqueda, y yo gasté todo lo que pude para tratar de encontrarlo. Pero era como si se hubiera desvanecido y nadie sabía donde estaba. Sé que él nunca nos abandonaría a tí o a mí, asi que debe estar muerto. Solo desería poder demostrarte lo mucho que te amaba, mi preciosa bebé muffin. Solo espero que esta carta sirva como un poco de consuelo a eso.
Dinky, sentada, lloraba a si misma. Sabía que su madre habia renunciado a mucho ya, pero no tenía idea de que incluso había renunciado al potro de su vida....todo por ella. Colocando el rollo en la cama, se deslizó fuera de la cama y trotó hacia la sala de estar.
Ditzy Doo estaba sentada en la mesa, con la cabeza entre las pezuñas como atormentada por la preocupación. Dinky llegó corriendo, dandole a su madre un gran abrazo por un lado mientras Ditzy miró hacia abajo. Sonriendo aliviada, se inclinó para abrazar a su hija también, permanecieron abrazadas por largo tiempo.
Dinky miró a su madre despues de un momento y dijo, "Mamá? Puedes...Puede enseñarme a hablar como tú y papá lo hacían? Voy a encontrar a papá, sé que debe estar alla afuera en algun lugar. Y cuando lo encuentre, quiero que podamos hablar para poder saber lo que ocurrió, Tú haces tanto por mi, quiero hacer esto por ti."
Ditzy se mordió el labio, tratando de contener las lagrimas mietras asentía. "Por supuesto, mi precioso muffin." Esa noche, despues de la cena, Ditzy empezó a enseñarle a su hija de la misma manera que había aprendido: Una palabra a la vez. No fue sino hasta la mañana siguiente que se dieron cuenta que durante la noche la Cutie Mark de Dinky habia aparecido al fin.
Dos grandes muffins con un pequeño muffin reposando entre ellos.