Caballo Negro
Chapter 30: Capítulo 29: Renacer
Previous Chapter Next ChapterMartes, 29 de noviembre del 2016
Capítulo 30 "Apuesta insegura".
Luego de aquel viernes, Marcelo no despertó. Sus tíos y su madre, preocupados, lo llevaron a la asistencia médica.
-¿Cómo está mi hijo?- preguntó su madre desesperada cuando vio salir al médico.
-Es algo muy extraño,- respondió -se encuentra estable, establemente en coma.
-Pero... ¿por qué le sucedió?- preguntó su tío Hernán preocupado.
-Al parecer, tuvo una apnea de sueño,- respondió el médico -el punto es que no sabemos cuánto tiempo estará así.
La noticia llegó a oídos de Javiera, quien llamó a la casa, y tía Betty le contó la historia. "Todo esto es por mi culpa" pensaba "no debí haberle pedido eso, ahora está atrapado junto con mi hermano". Ella se dirigió hacia la pieza de su hermano, y unas lágrimas rodaron por su rostro, hasta que se fijó en aquel cuaderno sobre la cama, el diario de vida de Benjamín. "Solo un milagro podría salvarlos" pensó mientras tomaba el cuaderno entre sus manos.
Mientras, también Isabel y Manuel se enteraban desde Viña del Mar. Isabel había llamado a su madre preguntando cuando iba a ir a buscarla para irse a Argentina.
-No, no pude ser- decía a través del celular cuando Manuel la vio luego de salir con un vaso de bebida de la cocina, Isabel cortó la llamada con la mirada perdida.
-¿Qué pasó?- preguntó algo inquietado Manuel.
-Marcelo está en coma en Chillán- respondió sin mirarlo. La impresión se apoderó de Manuel, quien sin darse cuenta dejó caer el vaso.
Al día siguiente, ambos llegaron a Chillán a ver a Marcelo. Cuando llegaron, se sentaron en unas sillas que había en el pasillo frente a la pieza del paciente. Al rato, Javiera se sentó al lado de ellos, no les habló.
-Todo fue por mi culpa- pronunció Javiera de repente.
-Perdona, pero ¿culpa de qué?- preguntó confundido Manuel ante tan raras palabras que dijo la chica.
-Por mi culpa Marcelo está así- contestó Javiera.
-Perdón, pero, ¿conoces a Marcelo?- preguntó extrañado Manuel.
-¿Manuel?- preguntó la chica sorprendida.
-¿Javiera?- respondió igual de sorprendido Manuel. Ambos se dieron un reconfortante abrazo de reencuentro que Isabel interrumpió con un carraspeo.
-Ahora dinos,- dijo la pequeña -¿por qué dices que esto es tú culpa?
-Pues verán,- respondió Javiera -mi hermano chico Benjamín está en la misma situación que está ahora Marcelo, o sea, atrapados en la dimensión poni. Marcelo me confesó que en una especie de sueños viajaba a ese mundo, y yo no le creí, hasta que mi hermano cayó en coma. Nadie sabía qué era, hasta que revisé su diario de vida, y descubrí que hacía viajes similares a los que Marcelo describía. Fue allí cuando comencé a creerle, y con lágrimas en los ojos le rogué que me perdonara y que me ayudara a recuperar a mi hermano. Así lo hizo, y también quedó atrapado en ese mundo.
Manuel e Isabel quedaron mudos ante tal explicación, era lo último que se hubieran imaginado.
-Yo también sabía algo sobre esos viajes,- respondió Manuel tras un suspiro -pensaba que solo eran sueños, hasta que vi a Applejack en vivo y en directo, en este mundo.
Isabel mientras, escuchaba atentamente la conversación. Como la Emperatriz del Imperio Ponyland, no se había asomado a su imperio desde que se fue de su hogar, y era el momento de regresar y ver que estaba sucediendo allá.
-Sé cómo salvar a Marcelo, pero necesito de su ayuda- le dijo a los dos jóvenes.
-¿Cómo?- dijeron ambos al unísono.
-Necesito volver a Santiago, a mi casa, y entrar en mi cuarto, en donde tengo un portal hacia ese mundo.
-¿Ah?- preguntó confundido Manuel.
-¿O cómo crees que desapareció Applejack de mi cuarto?- le recordó.
-¡Así que tú lo hiciste!,- exclamó poniéndose de pie -¡metiste a Marcelo en muchos problemas por eso!
-Lo sé,- respondió Isabel -pero era por el bien del Imperio.
-¿Imperio?, ¿cuál imperio?- intervino Javiera.
-El Imperio Ponyland no puede ser descubierto por humanos,- respondió -y debo velar porque así sea.
-¿Ningún humano?, ¿y tú qué?- preguntó Manuel. Isabel guardó silencio ante aquello, sabía que si en el Imperio se enteraban que ella era una humana, sería su final.
-Bien, ¿quieren salvar a Marcelo?- preguntó tratando de desviar el tema.
-Ehm... no lo sé,- respondió Manuel -¿cómo podemos saber que no estás mintiendo?,- había comenzado a desconfiar de ella desde su última revelación, además, el tema del Imperio no le calzaba con la serie que conocía.
-Porque es la única alternativa que tenemos de salvar a mi hermano,- respondió -solo te queda confiar en mí.
-¿Tú que dices?- Manuel se dirigió a Javiera.
-Algo no me calza,- respondió -¿Qué es eso del Imperio Ponyland? nunca lo han mencionado en la serie.
-Bien,- respondió tras un suspiro -el Imperio conquistó pacíficamente Equestria hace unos meses.
-Y... ¿cómo es que tú formaste parte de aquel mundo?, ¿Por qué tienes un portal?- preguntó Javiera.
-Miren, si aceptan mi ayuda, responderé todas sus dudas, pero camino a Santiago, ¿vale?- respondió Isabel. A pesar de sus dudas, ambos chicos aceptaron su propuesta.
Es así como con la ayuda del padre de Manuel, se dirigieron los tres hacia Santiago.
-Y ahora dinos. ¿Qué tienes que ver tú con todo lo del Imperio ese?- comenzó Manuel con el interrogatorio.
-Digamos, que soy la Emperatriz- respondió en tono misterioso.
-¿Emperatriz?... o sea, ¿podemos decir que tu grado es superior al de la Princesa Celestia?- inquirió Javiera.
-Ehm... algo así- contestó un poco nerviosa ante tal cumplido.
-¿Y cómo llegaste a ser la Emperatriz de tal imperio?- preguntó Manuel.
-Eso, se sabrá con el tiempo- contestó finalmente.
Un par de horas más tarde, los tres se encontraban frente a la casa de la familia Gonzáles.
-Bien, escuchen,- comenzó a hablar Isabel -mi padre está muy furioso, y debemos entrar a la casa sin que nos vea. Si nos llegase a ver, puede incluso intentar matarnos. Debemos llegar a mi cuarto, en donde les diré cómo entrar al Imperio. Una vez allí no digan una sola palabra, no hablen con nadie, no pregunten nada, ¿entendido?- ambos afirmaron moviendo la cabeza.
De forma sigilosa entraron por una ventana trasera al interior de la casa. De forma muy silenciosa llegaron hasta la escalera, pero se detuvieron al ver la escena del living. El profesor de biología de Marcelo estaba instalado conversando con el padre de Marcelo.
-Al parecer, todo está saliendo como yo esperaba Roberto- le decía el profesor.
-Sí, todo sea por ayudar a un hermano de la familia Blackmagic, Gustavo- respondió orgulloso Roberto.
-Ahora podemos decir que ya me he desecho de Fluttershy- respondió el profesor con una leve risa.
-¿De qué está hablando?- le susurró Manuel a Isabel.
-Shhht- lo hizo callar.
-Fue un plan perfecto haber metido a mi hija cuando pequeña a ese mundo tras un hechizo,- continuó Roberto, -solo para que consiguiera un portal seguro entre ambos mundos, y poder duplicarlo y entregarte uno.
-No creo que el plan haya resultado tan perfecto como aparenta ser,- respondió en tono inquietante -me preocupa tu hijo.
-¿Marcelo? No, en estos días está al borde de la muerte. Si sabe algo, jamás lo dirá- lo tranquilizó Roberto.
-Que así sea, porque desde que supe que se podía tele transportar a ese mundo que intenté atraparlo. Lástima que atrapé al poni equivocado. Cuando llegué con Applejack, no se me ocurrió otra que encerrarla en el sótano, hasta que Marcelo, su amiguito y mi hijo la liberaron. Lo bueno es que ya me deshice de mi hijo...- dijo esto último con malicia.
-¡Rogelio!- exclamó silenciosamente Manuel mientras que se escuchaban las risas de los otros.
-Ya es suficiente,- les dijo Isabel -vámonos.
Así fue como subieron al cuarto de Isabel, para embarcarse en la aventura de rescatar a Marcelo y Benjamín.
En el próximo capítulo…
Isabel, junto con Manuel y Javiera, llegan finalmente al Imperio Ponyland al rescate de Marcelo y Benjamín, pero se encontrarán con un primer gran obstáculo: la invasión de un robot gigante.
Próximo capítulo veremos "El imperio contra el robot gigante".
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