Y aquí estoy una semana más colgando un nuevo capítulo. Espero que les guste

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Capítulo 10. El octavo elemento

Tras el descubrimiento de Twilight, todos estaban a su alrededor con la esperanza de que la princesa hubiese encontrado la forma de liberar al mundo del caos causado por Chrysalis.

"Escuchad esto. Según el diario de Star Swirl El Barbado existen dos elementos para el caso de que alguno de los otros elementos de la armonía se debilitase"

"¡Eso es fantástico!" exclamó Fluttershy.

"¡Echa el freno!" le dijo Applejack "Aún no sabemos cuáles son ¿Puedes seguir leyendo Twilight?"

"Sí, Applejack. Pues bien" la princesa continúo leyendo "Uno de ellos es el elemento del Amor, pero este solo funciona como sustituto de uno de los elementos. El octavo elemento tiene la capacidad de restaurar todos los demás"

"¿Y cuál es el octavo elemento?" preguntó Rarity "Quiero que toda esta pesadilla termine y volver al lado de mi amado Fancy"

"No lo sé. La página está arrancada" contestó la princesa.

"Lo que sí sabemos es que Cadance y Shining Armor son el elemento del Amor" dijo Fluttershy.

"Ya está ¿No?" preguntó Rainbow Dash con impaciencia "Terminemos esto de una vez"

"¡No tan deprisa!" le frenó Twilight "Es mejor que veamos si funciona"

Melody y Fluttershy se quedaron observando como el resto de Guardianas de la Armonía junto a Cadance y Shining Armor intentaban la transformación de Rainbow Power, con el fin de derrotar a Chrysalis, pero no lo lograron.

"¿Qué ha podido salir mal?" preguntó Cadance "Nosotros hemos sustituido el elemento que faltaba"

"Creo que no solo Fluttershy ha perdido su elemento. Una de nosotras también perdió el suyo"

Melody se imaginaba quien había sido. Efectivamente, Pinkie Pie, la cual había perdido sus ganas de reír a causa de la derrota.

"¡Esto es malo, muy malo!" repetía Shining Armor dando vueltas de un lado a otro "Mi esposa y yo no podremos criar a nuestra hija en medio del caos"

"¡Seguro que Twilight tiene un plan!" exclamó Spike, quién aún confiaba en la sabiduría e ingenio de su pareja.

"No, Spike. No esta vez" contestó con tristeza la princesa.

Abatidas, lo único que Applejack y Melody podían hacer era volver a casa.

Solo que Ponyville ya no era el mismo. El caos lo había invadido, y sus habitantes se habían vuelto locos, o huían de allí.

Snips y Snails campaban a sus anchas, como si todo aquello no les molestase; Derpy, medio loca derribaba casas a patadas y Caramel y Pokey Pierce se peleaban sin ninguna razón.

Pasaron dos días, pero Melody seguía sin acostumbrarse a todo aquello.

Aquel día una plaga de gusanos multicolor salidos aparentemente de la nada devoraron toda la cosecha. Pero eso no fue lo peor. Applejack recibió una nota de la princesa informándole de que la plaga de Changelings que habían estado devorando el amor en otras partes de Equestria se dirigían hacia Ponyville.

"¿Entonces se acabará el amor?" preguntó Melody con tristeza.

"Eso me temo, terroncito"

Melody se entristeció. Con todo lo que le había costado llevar su relación con Big Macintosh adelante para que ahora, una plaga de Changelings acabarse con ello.

Aquella tarde, el poni rojo llevó a la unicornio al lugar donde se besaron por primera vez.

"Los Changelings no tardarán en aparecer" dijo Melody.

Big Macintosh estaba igual de triste que ella.

"Espero que al menos nos dejen los recuerdos intactos. Me gustaría recordar este tiempo contigo"

"A mí también" dijo la unicornio antes de empezar a llorar.

El poni rojo la abrazó con todas sus fuerzas y los dos se quedaron allí hasta que llegaron los Changelings, que absorbieron todo el amor de Ponyville.

No quedó nada de amor en Equestria.

Las parejas no rompieron, no se odiaban. Era simplemente que ya no sentían nada por el otro.

Cuando Melody veía a Big Macintosh simplemente lo veía como su mejor amigo pero ya no estaba enamorada de él.

La Princesa Cadance, fue separada de su amado a la fuerza, y encerrada, como ya hizo la reina Chrysalis años atrás. En este caso fue peor, pues ellos no podían perder su amor mutuo, y, por lo tanto sufrían por la ausencia del otro.

Todo se había acabado… ¿O no?

Aquél día, mientras Melody estaba haciendo limpieza, se encontró un anillo. Llevaba un enorme rubí. Desde luego tenía aspecto de caro.

"¿Qué objeto es este?" se preguntó Melody.

Como no lo sabía decidió llevárselo a Applejack. Quizá ella lo supiese.

"Lo siento, dulzura. Pero no tengo ni idea de lo que es eso"

"Seguro que Twilight lo sabe" dijo Melody "Tal vez deberíamos ir a preguntarle"

"El tren se ha estropeado. Tardaríamos siglos en llegar a Canterlot" explicó la poni granjera

"Quizá algún poni en el pueblo lo sepa. Deberíamos preguntar"

Pero ningún poni lo sabía. Por suerte Zecora estaba allí, y ella no había sido afectada por los Changelings, ya que su casa estaba protegida por un antiguo ritual de su tierra natal.

La cebra les dijo que era un anillo de compromiso.

"¿Qué es el compromiso?"

Zecora les explicó que cuando dos ponis se quieren mucho deciden compartir su vida para siempre mediante esa unión.

"¿Una boda? Es lo que hizo Pinkie hace un año" recordó Applejack.

Tal como Melody y Big Macintosh habían deseado, los Changelings no habían eliminado todos los recuerdos, solo algunos.

"¿Y qué hacía el anillo en nuestra casa?"

"Si no es mío, ni tampoco tuyo solo puede ser de…"

"¿Mi hermano?"

"Sí"

Nada más volver a casa, Applejack fue corriendo a preguntar a su hermano por el anillo.

"¿Es tuyo?"

"Sip"

"¿Y por qué has gastado tu dinero en un anillo tan caro como este?"

"Pues…no me acuerdo muy bien"

El poni rojo pensó por qué. Solo recordaba haber ido a la tienda a comprar el diamante.

"¿No será que era un regalo para Melody?"

"No. Sé que fue para algo más que eso"

En ese momento, la unicornio entró en la habitación en la que ellos estaban.

"Fue… porque quería que se casase conmigo"

"¿¡QUÉ?!"

Tanto Applejack como Melody estaban impresionadas.

En ese momento los ojos de la unicornio brillaron. Si el poni rojo había querido casarse con ella significaba que la amó muchísimo antes de que los Changelings absorbieran el amor en Ponyville. Pero no solo eso; también confiaba en ella plenamente…confianza.

"¡Pues claro!" pensó Melody.

¡Lo tenía! Ya sabía que tenía que hacer.

"¡Tenemos que avisar a la princesa!" exclamó Melody con emoción.

"Ya te dije que no podemos ir a Canterlot"

"¡Entonces haremos que la princesa venga a Ponyville!"

Melody salió afuera y proyectó con su magia una señal para que la princesa la viese.

Y, tal como planeó, la princesa voló hacia allí a lomos de su dragón.

"¿Me necesitabas?"

"Ya sé cuál es el octavo elemento. ¡Es la confianza!"

"¿La confianza?"

"Sí. Sin confianza el resto de elementos no funcionaría ¡Piénsalo! ¿Sería Rarity generosa si no tuviese confianza? ¿O sería Applejack tan honesta si no confiase en los demás? ¡Los demás elementos dependen de la confianza!"

Twilight se quedó en silencio, pensativa.

"A mí me parece que Melody tiene razón" opinó Spike.

"Sí" dijo Applejack "Melody está en lo cierto. ¡Ella es el octavo elemento!"

La princesa pareció convencida.

"En ese caso tenemos que reunirnos todas y que Melody restaure los elementos"

Las tres se pusieron en marcha. La primera a quien encontraron fue Pinkie Pie, quien estaba cuidando de sus hijos.

"¿Y ahora qué?" preguntó Applejack.

"No lo sé" contestó la princesa. El Rainbow Power se activó solo en nuestro caso "Tal vez Melody tenga que ganárselo"

Melody se sobresaltó ante las palabras de Twilight, pero se mantuvo serena y se dirigió a Pinkie.

"¿No tienes ganas de reír?"

"No. La Reina nos derrotó como si fuéramos larvas, y luego los Changelings absorbieron todo el amor y ahora que miro a mi Cheese Sandwich no siento nada por él"

"¿Hablas en serio? ¡Seguro que aún confías en él! ¿Verdad?"

"¿Cómo?"

"Te pondré un ejemplo. Si te quedases ciega ¿Dejarías que él te guiase?"

"¡Por supuesto! ¡Estoy segura de que él no dejaría que me chocase con nada!"

"¿Y eso no te da ganas de reír? Puede que no le ames como antes, pero tienes confianza en él"

"Pues… ¡Sí que es gracioso!"

Y la poni rosa empezó a reír a carcajadas.

En ese momento, algo brilló. Twilight supo que el elemento de la risa había sido restaurado.

"¡Tenemos que encontrar a las demás!"

Fluttershy estaba siendo atacada por Snips y Snails, que buscaban robarle su dinero.

No obstante, Twilight, Melody y los demás llegaron y la rescataron.

"Escucha, Fluttershy. Puede que a mí me odies, pero seguro que no odias a tus amigas" le dijo Melody.

"No. A ellas no" contestó la pegaso mirándola con mala cara.

"Y seguro que sabes que ellas siempre estarán ahí para ayudarte. Quiero decir ¿Confías en ellas?"

"¡Sí, confío!"

De nuevo un brillo. El elemento de la bondad volvía a funcionar.

"¡Ya tenemos todos los elementos!" anunció alegremente Twilight "Ahora solo nos falta buscar a Rainbow y Rarity y juntas enfrentaremos a Chrysalis"

Melody se dirigió a Canterlot con Twilight y Spike mientras que Applejack, Pinkie y Fluttershy acordaron reunirse en Sugarcube Corner.

Una vez en Canterlot buscaron a Rarity, algo difícil, pues, al igual que Ponyville había sido atacado por los diabólicos Changelings y estaba sumido en el caos.

Encontraron a la unicornio diseñadora oculta dentro de un armario.

"¡Qué alivio que estéis aquí! A Fleur-De-Lis se le fue la cabeza y trató de acuchillarme. Antes solo estaba celosa, pero ahora…"

"En ese caso no hay tiempo que perder. ¡Hay que encontrar rápidamente a Rainbow Dash!"

La pegaso azul, última pieza para resolver el problema estaba en su casa sola y triste. Ahora que el amor se había acabado, su marido se había ido a entrenar en lugar de estar con ella como solía hacer.

"Los Changelings no han causado más que daño ¡Hay que detenerlos de una vez!" exclamó la princesa.

Y ya estaban todas juntas. Twilight, Rainbow Dash, Applejack, Rarity, Pinkie Pie y Fluttershy. Todas juntas se concentraron para poder invocar el Rainbow Power.

Melody vio como un arcoíris las envolvía y las transformaba.

Con su poder no tenían nada que temer. Todas se pusieron en marcha para hacer frente a la malvada reina.

Mientras tanto, la maquiavélica Chrysalis se divertía torturando a la pobre princesa Cadance en las mazmorras, entrando en su mente y proyectando imágenes horrorosas.

"¡Shining, amor! ¡Por favor, levántate!" gritaba la princesa del Imperio de Cristal, que, en su visión creía tener delante a su marido muerto.

"¡Que patética eres!" se burló la reina.

En ese momento llegó un Changeling.

"¡Majestad, las ponis están atacando el castillo!"

"¿¡QUÉ?!"

Chrysalis salió del lugar y desde las almenas pudo ver como las seis ponis armadas con su nuevo poder reducían fácilmente a los Changelings de guardia. Melody iba con ellas, aunque no tenía tanto poder, por lo que se limitaba a lanzar hechizos de confusión a los Changelings que tenía cerca.

"¡Malditas, guardianas!" exclamó la reina Changeling con rabia.

"¡Se acabó, Chrysalis!" le gritó la princesa "¡Restauramos la piedra del equilibrio poco antes de venir aquí! ¡Libera ahora mismo a Cadance para que restaure el amor que tus Changelings han robado!"

"¡Nunca!"

"¡En ese caso tenemos que obligarte!"

Las seis ponis se unieron y lanzaron un ataque de arcoíris hacia la reina, que les disparó un rayo verde como respuesta. Tanto Melody como Spike estaban convencidos de que sus amigas iban a ganar, pero con horror descubrieron que estaban igualadas. Parecía ser que, al haber absorbido el amor, la reina era más poderosa de lo que habían pensado.

"¡Melody, debes inclinar la balanza a nuestro favor!" exclamó la princesa.

"¿Yo?"

"Sí, eres el octavo elemento. Eres capaz de restaurar todos los demás. ¡Tienes que transformarte tú también!"

"Pero yo no…"

"¡Confía en mí! ¡Concéntrate! ¡Piensa en lo que más te importa en el mundo!"

Melody cerró los ojos y pensó en Big Macintosh. Tal vez no lo amase como había hecho antes, pero era en el poni en el que más confiaba de todos los que conocía… confianza…

¡Funcionó!

Un brillo apareció, y a continuación un arcoíris rodeó a la unicornio y la transformó.

Melody abrió los ojos y se vio convertida en algo precioso. Su cabello se había alargado y brillaba de una forma espectacular.

La unicornio se dirigió hacia donde estaban las otras seis y, entre todas lanzaron un segundo ataque arcoíris, que fue directo hacia la reina Chrysalis que dio un tremendo alarido.

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Y hasta aquí el capítulo de esta semana. Espero que les haya gustado.

¿Se lo esperaban? ¿Un nuevo elemento? Lo que digo en el fanfic en serio lo creo. ¿Cómo se les pudo olvidar algo tan importante como la confianza?

Si quieren dejen sus reviews, yo siempre se lo agradezco.

Muchas gracias a todos aquellos que siguen esta historia.

La semana que viene un nuevo capítulo :)