Login

La voz del destino

by Avro 683 Lancaster

Chapter 7

Previous Chapter Next Chapter

Cambio de planes…


En las afueras de la posada los dos estaban esperando a Aragorn que se había marchado sin decir nada, ambos sentados en la fuente habían hablado un poco de todo, Celestia el conto sobre su hermana, inventando algunas cosas y hasta le había enseñado algunos hechizos básicos, Faramir por otro lado le platico de sus aventuras que había tenido con Aragorn, algunas increíbles, cómicas, y otras aterradoras

-así que al final escapamos de esa maldita cueva –relato Faramir a una atenta Celestia que no paro de reír – ¿qué? Cualquiera se puede confundir un oso con una roca –volvió a reír, lo que causo que le pergamino se saliera de la alforja –oye se te cayo

-es cierto, la verdad no lo he visto –tomo el pergamino extendiéndolo, el mapa tenia las montañas, dos ríos un par de ciudades y algunos pueblos señalados, y un denso bosque, pero lo que más le llamo la atención fue un punto que sobresalía en el bosque

-Creo que es un mapa del reino de Lauren…si, esta es la capital, Faust

-¿entonces sabes cómo llegar? –el asintió –entonces podremos ir

-la verdad todo depende de convencer a Aragorn –respondió –a ese reino no se acerca, dice que hay un monstruo en esos bosques, y prefiere no encararlo, por ello cada vez que tenemos que viajar por esa región tomamos otro camino, aunque sea más largo o peligroso

-entonces el anciano tenía razón, tal vez si necesite aprender a usar esta cosa –se detuvo la sentir como su estómago le pedía comida –creo que ya tengo hambre

-toma –le entrego un sándwich de margaritas y apio –esto te calmara le hambre, no es mucho,

-gracias Faramir –comenzó a comer a la vez que Aragorn llegaba con ellos –señor Aragorn me preguntaba si…

-¿todo bien con tu asunto? – Faramir interrumpió a Celestia, pero el Alicornio no respondió, solo le dio una bolsa al Celestia, la cual al abrirla vio su tiara, incrédula iba hablar más Aragorn fue esta vez quien la detuvo, al tomar la empuñadura de la katana sacándola y examinando la hoja,

- Aragorn… –el Alicornio comenzó a practicar sombra con ella por unos instantes, tan concentrado estaba que no noto a una multitud que se había formado a su alrededor – Aragorn…

-buen equilibrio, gran calidad del metal, y lindo diseño –la volvió a envainar y entregándosela a Celestia dijo –desconozco lo que ese estafador te dio por tu tiara, pero te sugiero que no confíes mucho en lo que te dijo

-de hecho le dio un mapa del reino de Lauren – Faramir respondió mostrándole el mapa, Aragorn lo tomo, con fuerza listo a romperlo, más lo miro y se lo devolvió a Celestia

-no sé qué busques, y no me interesa, pero si de alguna manera no vale el riesgo, mejor olvídalo

-entonces no me ayudara a llegar –exclamo con recelo –bien, iré yo sola, Faramir le agradezco por todo, en cuanto a usted, gracias –dio un paso lejos de los dos, pero el Alicornio la detuvo

-detente ahí, nunca dije que no te ayudaría – con un brillo en sus rostro salto para abrazarlo, a lo que se separó apena unos segundos después –pero solo te dejare en la frontera con Lauren, el viaje tendrá que hacerlo por ti misma

-Oh…yo lo siento…fui algo impulsiva –fue lo único que exclamo, pero Aragorn no cambio su expresión de serenidad

-tal parece que tendré que enseñarte a usar la espada –se la entregó a Celestia que con su magia la volvió a envainar y se la acomodo en el lomo –empezaremos mañana por lo pronto tendremos solo que ir hacia el oeste, a Beleriand

-no se suponía qué iríamos al sur

-hay ciertos asuntos que nos obligan a ir,

-algo tiene que ver con el humano con el que hablaste –Aragorn asintió –entonces… ¿esperas que te esperemos aquí?

-no, iremos todos –respondió –así que andando

-ahora – Faramir tomo la alforja con comida, a la vez que Celestia guardaba su tiara con una sonrisa –pero Aragorn, está anocheciendo, no sería más prudente dormir un poco e ir mañana

-el tiempo es algo que no tenemos ahora –y sin más los tres caminaron hacia la salida del pueblo – andando

-al menos podrías decirnos por qué la prisa –Celestia miro al Alicornio gris muy apurado, impaciente y preocupado

-se los diré en el camino, pero no podemos detenernos por ningún motivo –así abandonaron el pueblo sin mirar atrás, a la vez sobre la muralla de la abandonada fortaleza una figura equina los miraba irse con una sonrisa

-como te dije, Aragorn hijo de Arathorn, nadie escapa a su destino –y auspiciado por las sombras oscuras desapareció de los muros de piedra, en la misma calle dos hombres encapuchados vieron a los tres Alicornios marcharse

-era lógico en él, jamás dejaría atrás a otro de su misma especie

-no crees que es muy peligroso hacerle esto

-no le mentí sobre la potrilla, pero tampoco fui por completo honesto con el – se quitó la capucha revelando al rey William de Dragonia – Leandro ¿ya está todo listo? –el otro hombre asintió

-están listos a partir mañana a Beleriand

-bien, no esperaba menos de ti –los dos se marcharon, Leandro más lento debido a que una herida de Guerra le obligo a usar bastón –si queremos que Aragorn no tenga más opción que unirse tenemos que ser rápidos

-y esperar que no tome el camino a Lauren

-lo dudo –respondió William – en ese lugar hay un monstruo al que no quiere enfrentar


Faramir y Celestia habían ya salido de la posada, cuando Aragorn se acercó a la mesa, y sentándose miro a los ojos al hombre encapuchado que solo tomo un sorbo de sidra que tenía en un tarro

-mesero tráigame un tarro de sidra –exigió Aragorn, con una sonrisa –que voy a beber con un rey –el mesero con temblor le dio un tarro bastante lleno, le cual fue tomado con euforia –y dime ¿que trae a alguien como tú a un sitio como este? por qué no pienso que fuera por la comida, y mucho menos por el hospedaje

-veo que aun sigues siendo el mismo Alicornio que conocí hace 7 inviernos –respondió el hombre quitándose la capucha –ha sido un golpe de suerte el encontrarte en esta hora tan oscura

-habla rápido William Díaz, rey de Dragonia, que no tengo tiempo para esto –tomo otro sorbo de su tarro, a la vez que el mesero con miedo le ponía un plato con botanas de diversas clases, de las cuales tomo una –aunque me interesa saber ¿qué buscas aquí?

-aliados –respondió – guerreros valiente que peleen conmigo en la difícil travesía en la que me encuentro, el reino de Beleriand estas reuniendo tropas para atacar a Lothlórien –tomo un sorbo de su tarro –me gustaría que te unas, una espada como la tuya nos sería muy útil en el campo de batalla

-Así que Starstone y Silverking van a la guerra, pero… ¿me interesa que luchen entre ellos? ¿Acaso tienes tú un pacto de ayuda con alguno de los dos reinos?

-que pelearían entre ellos, eso creí al principio hasta que recibí información de uno de mis espías Changeling…resulta que no se enfrentaran, planean unirse, tomar, y repartirse los territorios al sur de Rivendel…. ¿entiendes?

-¿atacar al rey Saúl de Rivendel?

-ahora entiendes mi venida a este sitio, las tropas de Saúl no serán suficientes para detener a los ejércitos conjuntos de ambos unicornios, pero con mi ayuda es posible que detengan sus intenciones

-no es solo por ello, te conozco lo suficiente como para conocer tus intenciones ¿Qué pasa en verdad?

-si derrotan a Saúl y su ejército, nada les impedirá llegar a mis tierras

-tu y yo sabemos que aun con el elemento sorpresa que creen tener, por que supongo que le advertiste a Saúl sobre aquello,

-supones bien, pero dudo que tome mi aviso en serio, pero al menos tendrá a sus tropas alerta

-¿y sabes el por qué los ponys de esos reinos cometerán tal suicidio al intentar conquistar un reino, sin la experiencia para hacerlo?

-los reinos de Beleriand, y Lothlórien, pasan por una sequía que se ha prolongado por al menos 6 años, no tienen reservas, y si te interesa el reino de Lauren no está mejor,

-no me interesa

-pensé que interesaría el hecho de que tu padre…. – Aragorn golpeo violentamente la mesa y con furia veía a los ojos a hombre

-¡escucha atentamente William montaña de cadáveres Díaz, no tengo padre, no tengo familia, y no tengo patria! –Se levantó de la mesa, sosteniendo el tarro para beber los últimos vestigios – ¡solo me preocupo por los míos! –se levantó con lentitud comenzando a marcharse de la mesa

-ya comprendí, solo pensé que te interesaba sabe el hecho de que culpan de las sequia a una potrilla Alicornio –el Alicornio dejo caer el tarro sentándose de nuevo –y parece que ahora si te interesa escucharme

-dime todo lo que sabes

-aparentemente su padre es un rico comerciante que esperaba impaciente un potrillo a quien educar y dejar su vasto imperio de navíos mercantes –tomo un sorbo de su bebida –pero grande fue su sorpresa al ver las alas y el cuerno en su hija, así que se la llevo a un pueblo cerca del bosque, casi incomunicado

-era de suponerse ¿y su madre?

-murió en el parto…..y le pago al alcalde para que cuidaran a la niña, hasta hace unos días nadie sabía de su existencia, ya que una vez al mes enviaba una fuerte suma de dinero al pueblo para que mantuvieran el secreto

-pero…

-el pony se volvió a casar y su nueva esposa dio a luz a un saludable potrillo unicornio

-lógico –la cara de Aragorn cambio a una de enfado –…unicornios…. –exclamo con desprecio

-así que ya no va a enviar dinero ¿sabes lo que significa para la niña? –con tristeza asintió,

-lo más posible es que la manden al bosque a morir devorada por alguna bestia salvaje – recogiendo el tarro del suelo, y poniéndolo en la mesa, donde fue llenado de nuevo por el mesero

-si tuviera suerte, me entere de esto porque al parecer amenazaron al padre, de que si no les enviaba más dinero se cobrarían con la niña ¿si sabes a lo que me refiero?

-¡son unos malditos!

-ha ah – tosió respondiendo– esperan recuperar la inversión con el mejor postor que page por…bueno, tu sabes…y lo peor

-hay algo peor todavía

-sí, un grupo bastante numeroso piensa que ella es la causante de la sequía, por ello planean matarla en un intento por traer lluvias a sus tierras –comió un poco de la botana que había en la mesa –salvajes ¿no?

-no sé por qué me cuentas todo esto, pero gracias – Aragorn se levantó con rapidez –solo una cosa ¿Cuándo será esa subasta?

- dieron un tiempo límite al padre de la Alicornio, el cual vencerá en seis días a partir de hoy, el pueblo se llama Sunville a cinco días de camino normal al oeste de la frontera con Lothlórien, y Lauren, Pero en tu caso, tendrías solo cinco días para llegar,

- es todo lo que necesito

-odio ser el que te baje de tu nube, pero es posible que la guerra estalle antes, estas contra reloj y de ser tú, si piensas hacer algo para salvar a la potrilla te sugiero que no pierdas mucho tiempo

-¿por qué me dices todo esto?

-simplemente porque no me interesa, pero a ti si, además ¿Cómo sabes que no es una treta mía?

-no tengo otra opción que creerlo, el estar contigo me quita valiosos tiempo, adiós y suerte en tu reclutamiento

-puedes venir con nosotros, tardaras menos tiempo, y si quieres tus dos amigos pueden acompañarnos –el Alicornio solo se levantó dejando el tarro en la mesa, y sin prestar atención al silencio de hombre se acercó al posadero en la barra

-ya no necesitaremos la habitación –y sin más salió por la puerta a la calle


¿Alguna duda? Por favor déjenme sus comentarios

Next Chapter: Chapter 8 Estimated time remaining: 0 Minutes
Return to Story Description

Login

Facebook
Login with
Facebook:
FiMFetch